Restaurante El Legado — Restaurant in Getafe

Un restaurante con más imagen que sabor: necesita una propuesta mejor definida

Como clientes del barrio, acudimos con la expectativa de encontrar una experiencia gastronómica acorde a la imagen que proyecta este restaurante. Sin embargo, la realidad fue decepcionante. No solo es mi opinión, sino el sentir colectivo de toda mi familia, que ha visitado el local y ha salido con la misma sensación: demasiada pretensión y poca esencia.

Calidad gastronómica: una propuesta sin identidad

Los platos carecen de personalidad y equilibrio. Aunque el restaurante intenta transmitir una idea de alta cocina, la ejecución es deficiente. Ingredientes sin carácter, combinaciones poco acertadas y una falta de coherencia en el concepto hacen que la experiencia no esté a la altura de lo que promete.

Servicio y presentación: falta atención al detalle

Si bien el emplatado intenta ser llamativo, no logra compensar la falta de sabor y técnica en la cocina. Además, el servicio es mejorable, con una atención poco cercana y sin el conocimiento necesario para transmitir confianza al comensal.

Un proyecto que necesita evolucionar

Las altas aspiraciones del restaurante no se ven reflejadas en su cocina. Más allá de la decoración, lo que realmente necesita es un cambio en su concepto culinario. Para estar a la altura, debería apostar por una propuesta más vanguardista y moderna, combinando lo innovador con la esencia de la cocina de mercado. Una cocina de autor bien ejecutada, con tendencia actual, sin perder la autenticidad ni caer en excesos estéticos sin fondo.

Por ahora, no volveremos ni lo recomendamos. Si el restaurante quiere ser un referente, debe replantearse desde la base su oferta gastronómica y contar con un equipo de cocina más preparado para convertir su visión en una experiencia real y memorable. Att pedro...

Un descubrimiento para Madrid sur.

Empezamos con una cecina espectacular. Sabor intenso ahumado y no muy curada como a mí me gusta. Pulpo muy correcto donde la base de puré estaba tan buena como el pulpo. Este tenía una especia que no acierto a descubrir pero a mí me gustó la propuesta. Berberechos al vapor, muy buena materia prima aunque no me pareció un plato extraordinario.

Los segundos fueron aún mejores

Chuletón. Madurado en su punto justo (marcaba 21 días pero estoy seguro eran muchos más) y perfectamente el punto de la carne. Sabor intenso y muy tierna. Costilla de vaca a baja temperatura. Macerada durante horas. Carne tierna y sabrosa que se deshacía en boca. Una maravilla. Chuletas de cordero. Pequeñas, bien cortadas y con un intenso sabor a brasa. Elemento común en todas las carnes (todo al carbón) Pluma de cerdo ibérica. Jugosa y con una guarnición de pimientos asados muy notables

Con cada carne una guarnición distinta a gusto de cada persona.

Tarta de queso de postre. Buena, nada pesada ni exceso de dulce, pero no soy muy fan de los postres en general.

Bodega pequeña pero con suficientes referencias para contentar al más exigente.

Acabamos con Champagne Ruinart y blu level a un precio más que correcto.

Si buscas cocina cuidada y calidad este es un sitio indispensable en tu lista.

Como área de mejora algunos tiempos de espera. Por ejemplo, te tuestan el pan al momento para dar un punto de calor y de carbón, cosas que yo personalmente agradezco aunque el tiempo de espera para el retorno del pan es quizás un poco largo por este motivo.

Volveremos a probar está vez...

Por fin un buen restaurante en el barrio con productos buenos y puedo ir andando, qué más puedo pedir. Sitio elegante, puedes ver cómo cocinan y mesas muy organizadas. El trato desde el principio a fin excelente. Nos pusieron en una buena mesa, hasta con una silla para dejar los abrigos. Se nos olvidó hacer fotos de lo que comimos porque estaba todo espectacular. Aperitivo aceitunas y queso en dados aliñados al lado aceite y lactonesa con ajo, nos preguntaron que tipo de pan queríamos (muy buen detalle), el calamar a la parrilla nos transportó cuando estamos de vacaciones en las playas de Huelva y de principal elegimos entrecot y yo para seguir en mi linea pluma ibérica a la parrilla con chimichurri, parecía que estaba en Aracena que solemos ir con bastante frecuencia. Recomiendo reservar y los platos te lo hacen en el momento, es de agradecer, puedes elegir guarnición y las patatas son caseras; para terminar tarta de queso. Mis felicitaciones a Antonio , Ángel y al resto del equipo. Espero que os vaya bien....