Cafeteria Restaurante Batallas — Restaurant in Jaén

Un excelente EQUIPO de profesionales de la hostelería que trabajan con gusto, que enseguida se hacen con tus gustos y te reciben, atienden y despiden con amabilidad y hasta cariño cuando ya eres habitual. Son un ejemplo del trabajo excelente. Andrés pendiente siempre de que todo esté como debe estar. Los camareros y camareras no pierden detalle. Pongo un ejemplo que para mí ha sido fantástico pues acudo a desayunar con mi madre, ya mayor. La saludan con tanto cariño, le dicen que se alegran de verla, cuidan que haya una mesa con silla baja para que esté cómoda...se interesan por saludarla y charlar con ella... esos detalles que te demuestran que además de excelentes profesionales, aman su trabajo y para ellos su trabajo es un lugar donde hacerte sentir bien y feliz. Lo recomiendo a diario a mis conocidos/as. Cuando vas a desayunar varios días ves a clientes habituales felices y bien atendidos. Eso ya termina de confirmar que no solo lo hacen bien...TE CUIDAN, te preguntan si está todo a tu gusto...y algo importantísimo: el baño...

Excelente cafetería y restaurante en el centro de Jaén, muy cerca del hotel Condestable.

Además de servir buenos desayunos a precios económicos (recomiendo pedir la tostada batallas), tiene una carta variada para comer, platos elaborados y de calidad y un magnífico servicio de camareros.

Aunque tiene una amplia variedad de platos, la especialidad de la casa es el lagarto ibérico (el espinazo del cerdo ibérico), muy sabroso. También recomiendo las pechugas de pollo en salsa de almendras. Y para acabar, un surtido de postres.

Sitio de referencia (y recomendable) en el centro de Jaén para los desayunos y comidas. Calidad...

Es caro, se come mejor en otros sitios por menos. El café otra clavada, más caro que en ningún sitio, ni que fuera una estrella Michelin. El pan te ponen dos rodajas finitas de una barra de cuarto y te cobran 75 céntimos por persona, o sea que a una barra le ganarán 10€ o 15€por lo menos, ya que cortan las rodajas finísimas. Ni siquiera ponen un bollo pequeño. Con el pan nos quedamos flipados, que por cierto no lo habíamos pedido. La comida normalita. Logicamente no...