Restaurant Masia Can Sous — Restaurant in l'Ametlla del Vallès

Podría hablar de la mediocridad absoluta. Podría contaros las pocas opciones, al tener que pedir aquellos pocos platos, que si tenían, de una ya de por si, poco extensa carta. Podría hablaros de la incompetencia y mala educación de algún camarero, que miraba claramente hacía otro lado cuando lo llamabas, hacía caso omiso cuando le preguntabas algo directamente a la cara, o pretendía retirarte el plato, cuando era evidente que aún estabas comiendo, sin preguntar primero si habías terminado. Un claro ejemplo del síndrome del camarero, claramente desubicado por añadidura. Podría hablar del gesto feo de ese camarero, inspeccionando la carne delante del comensal con cara de incrédulo, cuando se le explica que se ha pedido la carne muy poco hecha. Podría hablar de todo ello y destacarlo, de no ser por un hecho que prevalece sobre todos los demás, la incomprensible e injustificable actitud del jefe de sala y propietario, que convierte todo lo anterior en una mera anécdota, al traer la carne y lanzar comentarios, cual esputo, como: “a ver si está esta bien, que quiero que la abras delante mío”, haciendo alarde de una prepotencia inusitada, que denota la terrible carencia de materia gris, de alguien que pretende que prospere un negocio, para continuar, erigiéndose en el único poseedor de la verdad y pretendiendo asentar cátedra sobre puntos de cocción y tipos de carne, en un patético, inocuo y absurdo intento de justificar lo injustificable, aderezando con otro sutil comentario: “al otro, te invito yo, campeón”, mostrando el churrasco que pretendía endosar por un entrecot muy poco hecho. Como resultado, el “campeón” consiguió con su hazaña, amargar un cumpleaños a 14 personas, que se levantaron de la mesa, sin postres, ni café y no entraré a detallar los muchísimos feos detalles hallados en la cuenta de tan abominable establecimiento. Eres un fiera,...

Poso 1 estrella perquè no puc posar 0, i m'explico; Encara som al restaurant però no puc esperar per explicar el que ens hem trobat. En primer lloc, dir que teniem una reserva per avui, dia 15 d'Agost, a les 14:30 per a 12 Pax. Bé, només començar, ens han fet esperar 45 minuts asseguts a la taula per a prendren's nota. Un cop hem demanat la beguda, 15 minuts més per venir a anotar el menjar. Fan un menú especial per el dia de Sta. Maria, però no permeten que algú de la mateixa taula faci menú si uns altres fan carta. Bé, ens adaptem tots/es a fer carta perquè hi ha una noia intolerant a moltes coses que el menú no li va bé per a la seva salut. La sorpresa me l'emporto quan cap dels 3 primers plats que demano de carta, no en tenen. Al final, molt a disgust, ens adaptem a demanar altres plats. És a dir, el menjar el fan bé, les coses com són, però el preu és desorbitadíssim pel que menges, i a més, d'una taula de 12, al servir els primers plats, 3 d'aquestes 12 persones demanant una trista esqueixada (perquè pràcticament no hi havia res més), s'han hagut de mirar com menjàvem la resta i han hagut d'esperar 20 minuts més! En resum, la nostra experiència ha estat nefasta i sincerament, no crec que alguns llocs mereixin la qualificació de restaurant, de bar de poble potser si, però mai de restaurant. Estic molt enfadat i si em perdo i em voleu trobar, no em...

Mi última experiencia en este restaurante ha sido nefasta. Cuando empezamos a pedir nos comunican que la bebida entra como cortesía de la casa, lo comentan rápido y de soslayo. Nos sirven enseguida el pan y un aperitivo (éramos 10: 3 platos con 3 trozos de fuet, 2 de bullnegre y 2 de Bull blanc). Nuestra sorpresa estuvo cuando vemos en el ticket un cobro de 10 unidades por 2,75 en concepto de pan, bebidas y aperitivo (total 27,50) lo que me sorprendió ya que no habíamos pedido el aperitivo ni el pan y el jefe de sala con mucha prepotencia nos dice, sin mirar la cuenta, que si queremos lo cambia y nos cobra las bebidas por separado a ver que tal nos sale...lo que a mi me hace saltar y comentarle (en su mismo tono) que me cobra por una niña celiaca (para la cual no tienen pan) y me dice que eso da igual, pero es más, me cobra los 2,75, (ella no puede comer nada de la supuesta cortesía) y me cobra también su bebida a parte. Se da cuenta de su error dentro de su prepotencia y me hace el abono de 2 refrescos y 2 botellas de agua que me había cobrado (la cerveza por supuesto, tampoco entra) El trato de este señor fue del todo desagradable, cero empatia con el cliente. Nosotros evidemente no volveremos más, pero quiero dejar constancia del engaño del que pueden...