Pizzeria Italiana Pappa e Pizza Cocina Italiana — Restaurant in l'Hospitalet de Llobregat

Pedimos dos pizzas. El dueño, frío, seco, no nos dirige la mirada, dando la impresión de que somos un obstáculo en su tarea, no un cliente que mantiene el negocio vivo. Nos atiende en italiano. Le pido la pizza de jamón y champiñones y no me entiende, no conoce el nombre en español de su producto, aún teniendo su negocio en España. Se queda paralizado, con su boli en la mano, mirando el bloc. Le tengo que decir "prociuto e funggi", y entonces sí me entiende y abandona la parálisis. Las dos pizzas estaban en mal estado.

La pizza presenta los champiñones semicrudos. Consultamos a la camarera al respecto y le pedimos si se puede hornear un poco más. Nos responde con humor que esos champiñones están bien, que es un champiñón fresco. Nos lo enseña. Apreciamos el champiñón fresco. Nos cuenta que antes lo solían freirlo, pero que se cansaron de recibir quejas (esto lo comenta intentando disimular sin éxito su asqueo) y que cambiaron a esta modalidad. Nos dice que no hay problema en cocinar el champiñón. Esperamos. Nos devuelven la pizza con los champiñones más cocinados, pero al comerla notamos que está muy, muy, muy salada. No entemos ese exceso, porque sabemos muy bien qué es que el cocinero se despiste y eche sal dos veces a una comida, en lugar de una, y que la comida quede salada. Pero esa pizza está salada como si le hubiéran puesto no el doble de sal, sinó el triple o más. Incomible.

La segunda pizza, una carbonara, lleva unos trozos de bacon que en lugar de tener un tono rosado presentan un tono marronoso, adjunto foto. La probamos y efectivamente tiene mal sabor, de comida caducada, en mal estado. Incluso después de retirar los trozos de bacon en mal estado, advertimos que tienen mal sabor los trozos de queso que estaban en contacto con el bacon. No la podemos comer tampoco.

Opino que un restaurante que no se asegura de servir comida caducada, que puede causar una intoxicación y por lo tanto un problema de salud a sus clientes, es un mal restaurante. Porque la salud es fundamental, y cuando esto sucede no es debido a un error humano, sinó a la concatenación de errores, la mayoría de ellos consisten en la ausencia de un protocolo habitual sobre detección de peligros en la cocina.

Pero es que se trata de este error con el bacon, sumado al error de la otra pizza con un exceso de sal que no parece tampoco un incidente disculpable, porque puedo asegurar que en esa pizza no había dos raciones de sal, sinó tres o cuatro. A eso le llamo "trabajo muy mal hecho".

A añadir el trato desconsiderado de la camarera, que a pesar de atendernos y darnos una explicación extensa y detallada que agradecemos, con su lenguaje y su tono nos trata como si el problema fuéramos nosotros, cuando simplemente intentábamos resolver una duda y con toda la simpatía del mundo.

Mención aparte el dueño que no entiende la expresión "pizza de jamón y champiñones, por favor" y no se esfuerza para averiguarlo y poder atender a...

Sinceramente, no entiendo por qué no está más lleno...Llevábamos tiempo pasando por delante y siempre nos fijábamos, pero parecía siempre muy vacío por dentro así que no nos atrevíamos. Hoy nos hemos lanzado y ha sido todo un descubrimiento, y encima en el barrio!

Para empezar: El ambiente dentro de la sala es muy agradable. Las luces ténues con un tono rojizo por las luces de neón de la entrada queda muy chulo. La decoración perfecta, toques italianos sin ser recardado o con la bandera italiana por todos lados. Muy acertada. La música me pareció muy acertada también. Música de ambiente de Spotify pero sin cargarse el momento. Agradezco mucho que se pueda hablar tranquilamente mientras comes. No estuvimos en la terraza pero también parecía cómoda.

En cuanto a la atención también fue buena. Nos atendió un señor que creo que era el propietario o el encargado y nos dio mucho tiempo para decidir, sin presionarnos y cuando le pedí ayuda con una pizza me dio su opinión perfectamente. Luego nos atendió otro chico joven que también fue muy correcto. Atención de 10.

Por último, lo más importante: La comida. Que los cocineros sean italianos no tiene por qué ser mejor, pero sin duda en este caso se nota que conocen los ingredientes y los tratan con respeto. Comida italiana 100%. Sin duda voy a volver para probar más platos. Nosotros probamos 2 pizzas: Pizza Prosciutto de Parma & Pizza Marco. Las dos estaban muy buenas. La salsa de tomate es casera y muy bien hecha, nada aguada. La masa es simplemente espectacular... Es crujiente y esponjosa a la vez, fina por el centro y un sabor a horno de leña brutal. Ah! y en su punto de horneado. Hay sitios que por debajo está quemadísima.

Para mí fue todo un descubrimiento la Pizza Marco. Tenía mis dudas y me daba miedo porqué eran sabores un poco dulces (pera y miel) que contrastan con otros como el queso de cabra. Esto puede ir o muy bien o muy mal y alguna vez me ha pasado que la pizza lleva demasiada miel y queda muy dulce o empalagosa... Pues bien, en este caso fue todo un acierto y agradezco a quién nos atendió por animarme a probarla porqué me encantó. De verdad, los contrastes eran perfectos: ni muy salados ni muy dulces. Merece la pena!

Quizá la única sugerencia que tengo es que agradecería que la carta de pasta tuviera alguna opción más como una arrabiata o una simple pasta con salsa de tomate y parmesano que se adapta más a niños o a vegetarianos, pero aún así creo que lo que más merece la pena de este local son las pizzas y cuando vuelva será por las pizzas.

Los precios también son muy buenos para la calidad de los ingredientes. Tienes muchos rangos de precios, des de pizzas por 8 euros hasta 15€. A nosotros nos parecieron precios muy acertados y seguro que volveremos. No hay muchas pizzerías por el barrio y esta fue todo un descubrimiento. Les deseo toda la suerte del mundo y que el negocio les...

Buena comida, PESIMO servicio de delivery.

He hecho 3 pedidos usando la aplicacion de Glovo ya que ellos no tienen servicio de reparto.

La primera vez pedí una pizza y un postre (pizza de nutella). No llegó el postre. Le digo al rider que falta el postre y me dice que lo gestione con Glovo. Reclamo en Glovo y me reembolsan el dinero. Vale, bien, pero ya te has quedado sin postre.

Segunda vez, pido lo mismo. La pizza con un complemento de burrata de 3€ y la pizza de nutella con platano. Llamo al restaurante para explicarles lo que me pasó la vez anterior y pedirles que porfavor no se olviden de poner el postre. Me dicen que tendrán cuidado y que sienten las molestias. Me llega la pizza sin la burrata y la pizza de nutella es con pistachos, que no me gustan. Reclamo en glovo la falta del suplemento y me reembolsan el dinero. Tambien hago saber que el postre es de ingredientes diferentes a los que he pedido. Acto seguido llamo al restaurante para indicarles lo que ha pasado, decirles que he reclamado en glovo y que era frustrante que pese a que llamé y me prometieron mirarselo muy bien, me llegase el pedido mal.

Ayer volví a intentarlo. Pedí lo mismo exactamente y llamé al restaurante. La chica que me atendió, me recordaba de la ultima vez y me quiso despachar rapido, diciendome que ella misma entraria a la cocina a encargarse personalmente de que saliese como era debido. Se le notaba apresurada y se oia gente de fondo. Entiendo que debia estar hasta arriba de trabajo y no me enfadó que fuese tan seca e intentase terminar la llamada lo antes posible. Pues me llega la pizza de nutella con pistachos y platano. Supongo que debió de ser un fallo y lo arreglaron poniendo platano. Pero NO ME GUSTA el pistacho. Y si fuese alergico? Harian lo mismo. Y no, no venia el extra de burrata que vale 3€. Al reclamar en glovo no me han reembolsado nada. Supongo que porque la app debe pensar que estoy intentando hacer una estafa, tantas reclamaciones seguidas.

El sitio esta muy bien pero no pienso volver a pedir a domicilio. Me parece lamentable tantos fallos y siento que incluso lo han hecho para reirse de mi por pesado al llamar.

En todo momento fui muy amable y es la primera reseña negativa que...