Gallina Clueca Gastrobar — Restaurant in Llangréu / Langreo

Espeluztacular, en todos los aspectos es un lugar recomendable. Así que vayamos por partes:

El ambiente está conseguido, bailando entre un chigre y un local más moderno, con una muy acertada elección musical y de volumen. Es un espacio que invita a estar, a charlar y a no subir la voz ni sentir que se rompe la privacidad.

Luego el servicio, Pola, es todo lo que una camarera debe ser: atención, conocimientos de cocina y bebidas, educación, simpatía. Da charla sin exceso, se ríe sin querer entrometerse en las conversaciones ajenas, es cercana sin sobrepasarse. Es que muchas Pola, por todo.

Y finalmente llega lo fuerte, la comida, pedimos el segundo menú porque tras las explicaciones de Pola, daban ganas de pedir directamente toda la carta. Nos sorprendieron con un aperitivo de mantequilla casera salada y dulce, acompañada de un cocktail de sidra, todo espectacular, y aún así, solo era un aperitivo de lo que estaba por llegar.

Las croquetas de boletus son sabrosas, sin estridencias, crujientes por fuera sin excesos de aceite y jugosas. Vamos, son lo que debe ser una croqueta, pero ay sus compañeras, las bolas de Kataifi a la soja y miel, destacaban tanto en su mezcla de texturas y sabores que casi consiguen que me olvide de unas croquetas perfectas.

Menuda forma de empezar el menú, poco podía mejorar y no dejó de hacerlo con la llegada del micuit de foie completado con una gelatina de sidra, menudo placer de los sentidos. Suave, con toques dulces y acompañada de unas pequeñas galletas de pan. Me voy a saltar un plato a propósito para habñar de lps canelones de pitu Calella, con su pasta al dente, el pitu asado y desmigado y la aparición de la salsa de boletus para enfrentarse al sabor del pollo, que gran elección. A esto le siguió el solomillo alabardado, acompañado de un puré de patatas y pimientos del padrón, todo al punto exacto que uno desee.

Pero hablemos de la estrella, de un plato acertado en todos y cada uno de sus aspectos, el pulpo a la parrilla con patatas a lo pobre, con la cocción perfecta en todo, incluyendo unas sutiles huevas de alga y sobre todo, de un alioli auténtico, del que sigue su nombre y su receta catalana que explica todo lo que hay ahí, all-i-oli. Dando hasta un toque picante a un plato redondo. Daban ganas de pedir un menú con 20 raciones de este plato.

El postre por su parte, fue muy correcto, también algo sorprendente, aunque un escalón por debajo de la excelencia del resto de la carta. Y debo añadir que Pola me sirvió un capuchino auténtico, sin leche hirviendo, bien de crema y dejando al café protagonizarsu sabor, tal y como te lo hacen en Italia.

Bravo por este restaurante, pienso volver y probar los arroces, la fideuada y ver cómo cambia su acertada carta de vinos. Servicio Comí allí Tipo de comida Comida Precio por persona 40-50 € Comida: 5 Servicio:...

Hay reseñas que sabe mal escribirlas y este es uno de esos casos. Acudí por las reseñas y quedé bastante decepcionada, así que me decido a escribir esta de forma constructiva y espero que la tomen como una oportunidad de mejora. Comí un menú degustación (38 euros sin bebidas) y creo habría que ajustarlo un poco, tanto en el número de platos como en precio y en calidades. Al añadir vino etc se acaba pagando unos 50 euros por persona y la verdad, por ese dinero te comes un buen pescado o carne en un restaurante de calidad. No volvería. Me duele porque le ponen muchas ganas y el servicio es bueno, por no hablar de los vinos que son excelentes. Al local le falta una reforma, salí oliendo a frito y la ropa impregnada (necesita un sistema de ventilación y salida de humos), aunque muy bien la mantelería, la vajilla y el cambio de cubiertos con casi todos los platos. En cuanto a la comida destacar el bacalao y el tiramisú, bien ejecutados aunque les faltaba algo que sorprendiera en sabor o textura. El "cochinillo" no era lechal (tenía un sabor bastante acentuado a cerdo) y venía prensado en tacos y tenía huesecillos muy molestos y bastantes pellejos de grasa que ocupaban la mitad del taquito. En general hay buena base pero falta más cocina y sabor. Les deseo mucho éxito en su...

We were pleasantly surprised by this place! We chose the tasting menu with an excellent wine from the Aragon region. Every dish was crafted with skill and imagination. For me especially the cod and the St. Jacques were outstanding. A refreshing contrast to the usual local options. We came with two young kids and felt truly welcome. Warm, professional service and a...