Restaurante Zurbarán — Restaurant in Llerena

Llegamos a las 14:15 al establecimiento, nos sentaron en una mesa de pie toda manchada y encharcada de una bebida anterior que se habría caído. Le pedí amablemente al camarero una fregona para limpiarlo, me contestó vale vale, y se fue. Se lo volví a recordar media hora después y me sonrió como gesto de escucha, pero nunca volvió. Nos tomaron nota a las 14:32, una parrillada para dos, con la carne poco hecha, insistimos. A las 15:10 nos traen la parrillada como la suela de un zapato, sin sal y un cuenco de patatas de bolsa con un charco de aceite, sin siquiera dejarlas escurrir de la freidora y por supuesto, sin sal. Pedimos una botella de agua por lo menos en 4 ocasiones a varios camareros diferentes, y el agua nunca apareció. Todos, absolutamente todos los comensales de la sala menos tres niños pequeños estábamos comiendo con los abrigos porque hacía una sensación térmica de -1C Bochornoso. Pedimos la cuenta en la barra porque tras el mal y lento servicio esperábamos que ni nos atendieran. A las 15:54 nos dan la cuenta cobrándonos una ensalada que nadie había pedido y la botella de agua invisible. En la barra se encontraba otro camarero poniendo unos cafés que se le estaban derramando y con la balleta que acababa de pasar por la barra y que contenía posos, cerveza, grasa…. estaba limpiando las tazas de café por fuera para dárselas así a los clientes. Ha sido el colmo, luego vienen las infecciones. Desde luego, es un local digno de que lo visite Chicote. Una vergüenza...

Lovely decor and atmosphere, however the lady who served us doesn’t smile and is very unfriendly. Tables are set, yet there are still bread crumbs on the chairs and the floor hasn’t been cleaned properly either. You don’t serve crisps with you hand…She obviously doesn’t...

Recientemente tuvimos el placer de disfrutar de una comida que superó todas nuestras expectativas. El chuletón de frisona fue, sin duda, el mejor que hemos probado en mucho tiempo. La carne estaba perfectamente madurada, con un sabor intenso y jugoso que se deshacía en la boca. La cocción fue exacta, logrando ese equilibrio perfecto entre una costra dorada por fuera y una jugosidad irresistible por dentro.

Además del chuletón, el ambiente del restaurante fue acogedor y elegante, con un servicio atento que hizo que toda la experiencia fuera aún más agradable. La carta de vinos también merece una mención especial, con una selección que complementó a la perfección nuestra comida.

Si estás buscando un lugar donde disfrutar de una carne excepcional, restaurante Zurbarán es sin duda una parada obligatoria. ¡Ya estamos...