No entiendo cómo este restaurante ha podido empeorar tanto. He ido montones de veces y siempre he salido más que satisfecho. Pero las cuatro últimas veces han sido horribles.

La cantidad y el precio no están mal. Pero la calidad ha empeorado notablemente. El servicio, pésimo. No puede ser que cuatro personas estemos tres horas para comer solo un plato. 25 minutos sentados en la terraza sin que nadie nos atendiera. Transcurrió una hora y media desde que nos sirvieron al primero, y atendieron al último. Vamos, que parece que hemos comido por turnos. Lamentablemente, no ha sido algo puntual, pues ya está siendo habitual en nuestras últimas visitas.

Espero que mejoren el servicio sobre todo, pues es una lástima perder unos de los mejores sitios para comer de toda la zona.