Venta Las Maravillas Arroces Delgado — Restaurant in Málaga

Teníamos una reserva a las 15:00 h y, al llegar, nuestra mesa ni siquiera estaba lista. Algo que, en principio, no tendría mayor importancia… si no fuera por todo lo que vino después. Éramos 4 comensales y dos de nosotros no teníamos ni servilletas ni cubiertos. Después de pedirlos hasta en 5 ocasiones, nos trajeron únicamente un tenedor, sin cuchillo ni servilleta.

Nada más pedir la comida —sin cubiertos ni bebida— nos sirven unas croquetas frías, con una presentación descuidada, que sinceramente daba la impresión de haber sido servidas previamente en otra mesa. Después de un buen rato de espera, deciden retirarlas y eliminarlas de la comanda.

En un día festivo como el de hoy, cuando las reservas permiten prever la afluencia de clientes, resulta incomprensible que no tengan organizados los suministros básicos. Pedimos tomate, y 45 minutos después nos informaron de que no había. Luego pedimos pilpil, pero tampoco había pan.

La terraza es amplia y solo había una camarera atendiendo todo: Vito. Y aquí es justo reconocer su profesionalidad y paciencia. A pesar de estar completamente sola, hizo lo imposible por atender a todo el mundo con una actitud ejemplar. El problema no es el personal que hay, sino la falta de personal. Era inhumano que una sola persona tuviera que encargarse de semejante volumen de trabajo.

Todas las mesas de alrededor estaban igual: gente entrando al interior a buscar sus propios cubiertos, esperas eternas y un evidente colapso del servicio. Tras una hora y media esperando tan solo cubiertos y pan, decidimos marcharnos sin poder probar la comida.

Fuimos con muchas ganas y expectativas, pero si la situación de personal sigue siendo la misma, lamentablemente no volveremos. Si un restaurante no está preparado para un día con tanta afluencia, es mejor no abrir que dar una experiencia tan decepcionante.

Gracias, Vito, por tu esfuerzo y paciencia. Ojalá la gestión estuviera a la altura de tu...

La comida, como siempre, muy buena. Hoy teníamos una reserva a las 15:00 en el restaurante Arroces Delgados. Llegamos puntuales, a las 14:50, pero al llegar nos informaron que nuestra mesa ya había sido asignada a otro grupo. Finalmente, después de esperar 13 minutos, nos asignaron otra mesa y logramos sentarnos.

Una vez sentados, intentamos pedir, pero la atención fue bastante caótica. Vinieron tres camareros, que aparentemente eran los únicos disponibles. Uno solo se encargaba de recoger platos y entregar bebidas en mesa, otra camarera (morena, según ella misma comentó) estaba en barra preparando bebidas y sacando platos, y la tercera, que debía tomar nota de los pedidos, también estaba en la barra pero no tomaba comandas.

Cuando intentábamos pedir a los otros dos, su respuesta era: “Hasta que no me salga el ticket, no puedo poner bebida”. Lo entiendo, pero si la persona que debe tomar nota está en la barra y no atiende, ¿quién apunta entonces la bebida?

Después de todo eso, pedí una cerveza, pero nunca llegó. Me cansé de esperar y entré al restaurante. Al pedirla directamente en barra, por fin me la dieron. En ese momento aproveché para decirles que la paella ya llevaba 7 minutos en la mesa y todavía no teníamos ni platos ni cubiertos.

En resumen: tuve que entrar al restaurante, ir a la zona de barra, coger yo mismo los platos y los tenedores de otra mesa, y salir con mi...

La venta de las maravillas, tú peor pesadilla. Comida razonable, tiempos de esperas abusivos, solo para una carta y un cenicero, más de media hora. Cuando traen pan y aceitunas, para echarse a llorar. Siendo 7 nos dio para una aceituna por cabeza, y cuatro bollería de pan que había que compartir. Servicio horrible, cera de una hora y media para atendernos, habiendo llegado prácticamente los primeros fuimos los últimos en ser atendidos. Después de pedir, a los 45 minutos el primer entrante para compartir, y a la hora y media el segundo entrante. Habiendo reservado a las 2 tuvimos que pedir la cuenta a las 4.30 por qué no haya llegado nada más. Pedí un poco de pan y alioli cerca de 5 veces, y a las 4 y 20 me trajeron una cesta con picos diciendo que no había más pan, después de haberlo pedido varias veces. Además de que la chica de las comandas nos vaciló varias veces. En fin, todo horrible, pedimos la cuenta y nos fuimos completamente disgustados, además de todo, mesas que se habían sentado 1 hora después nuestra, pudieron comer arroz que según ellos tardaban solo 20 minutos. Además de después de haber pedido, a la hora y media nos dicen que tenemos que cambiar algunos platos por que ya no tenían. Horrible todo, cero recomendable. Si se puedes poner un cero...