Es la primera vez que íbamos siguiéndonos por las reseñas de Google. Pero hemos tenido una mala experiencia. Pedimos para el centro una ración de chocos fritos 12€ y no era para tanto. Después una tapa de ensaladilla de pulpo que sabía mas a pimentón que a pulpo. Las albóndigas de choco era lo que más bueno estaba, en eso os pongo un 9. Tuvimos un problema cuando pedimos adobo y al traerlo a mesa se veía claramente un pelo rubio. Lo llevo dentro para no dar mala imagen a los demás comensales, porque eso le pasa a cualquiera, y en ese momento estaba la cocinera y el camarero atentos a un pequeño accidente que hubo en la puerta y ahí me di cuenta que el pelo era de la cocinera puesto que es rubia. Ni lo siento ni nada. Después al 'cambiarmelo' el camarero dijo un lo siento a secas. La verdad no...
Read moreCuando alguien se sienta en un restaurante espera poder comer bien con una correcta atención. Algo que no ocurre en este lugar probablemente por falta de experiencia y falta de ese compromiso que es donde se aprecia la escasa profesionalidad de quien atiende al comensal que se merece un mayor respeto. La respuesta después de manchar por accidente el camarero por completo con una copa de vino a una persona y después la respuesta expresada a otro al preguntarle a la encargada si faltaba mucho por llegar algún plato de los pedidos después de esperar casi 40 minutos estando tan solo la mitad de las mesas ocupadas dan pleno testimonio de lo expresado . Hay otros restaurantes cercanos con más nivel profesional que merecen darles esa confianza para asegurarnos poder...
Read moreQuizás las mejores albóndigas de choco que he comido nunca. Las albóndigas de choco de buena calidad son muy difíciles de encontrar porque son muy complejas y al final suelo encontrarme bolas de pura harina con un lejano aroma a choco. A mi me parece que la calidad de estas albóndigas no tienen nada que envidiar a las de un restaurante estrella Michelín como el Cañabota en Sevilla. Desde luego solo por eso merece la pena ir aquí. El servicio es amabilísimo, la cocinera un encanto y los platos estaban espectaculares. Pedimos unas gambas cocidas de Huelva que estaban fresquísimas y unas almejas a la marinera sencillamente ESPECTACULARES, estuvimos un buen rato debatiéndonos de si pedir otra ración. Si pasas por Mazagón, el ancla del lepero es una parada...
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