Arroces el Pillo — Restaurant in Murcia

El pasado domingo estuvimos en este local, era la 8 o 9 vez que ibamos y siempre habian tenido unos precios razonables, una comida excelente y un servicio a la altura. Teniamos reserva desde el viernes y fuimos a comer el domingo a las 15h. Desgraciadamente nos encontramos con lo siguiente, no se si por un cambio de direccion o por la desidia de sus empleados y que conste que hablo desde la pena y no desde la rabia, ya que desgraciadamente no volvere a ir despues de lo sucedido. Nos cobraron un total de 350e que siendo 7 comensales nos da un total de 50e por cabeza, y por este precio recibimos lo siguiente.

Un servicio pesimo, tuvimos que pedir pan hasta en 5 ocasiones hasta que nos lo trajeron, una solo vez, por que a la siguiente vez que quisimos pan se le habia ACABADO. Despues de esto tuvimos que pedir hasta otras 5 veces que nos trajeran platos, cubiertos y las raseras, ya teniendo una de las paellas en la mesa, tardaron tanto en hacerlo que esa paella nos la comimos fria. Y asi con todo el servicio, lento, mal y tarde. Hubo mas momentos magicos como este pero no voy a nombrarlos todos. La unica valia algo era una chica con el pelo largo de color castaño oscuro que parecia la encargada y que estaba visiblemente cabreada por como iban las cosas. La comida, el pulpo increible como siempre, y ya esta. De las 2 paellas que pedimos una para 5 de costilla y conejo, y una para 4 de conejo y caracoles, la primera llego unos 15 minutos antes que la segunda y nos la comimos fria ya que los platos y cubiertos nos los dieron poco antes de que llegara la de conejo y caracoles, como ya he comentado. A esta le faltaban al menos 5 minutos mas de coccion, ya que el arroz estaba bastante duro, aun gustandonos este mas bien poco hecho. La asadura e higaditos de la misma, estaban crudos al igual que algunos trozos del conejo. De la de conejo y caracoles me atreveria a decir que los caracoles eran congelados e incluso apostaria que los han comprado en el mercadona, ya que estaban insipidos y parecian chicle, comerte un caraco lde esa paella es lo mas parecido a mascar goma que me he encontrado y aunque esta tenia el arroz mas menos en su punto, estaba realmente salada segun que zonas, en lo que debe de ser una tactica para que pidas mas cañas, ya que el precio de la caña es de 3.50e, una caña, en murcia, en un restaurante de huerta. Cuando comentamos todo esto al camarero ,y casi 15 minutos despues, nos dijo que se lo habia dicho el encargado y que nos ofrecia otra paella si queriamos, ya con mas de la mitad de las paellas comidas. Es decir, dejar de comer y esperar otros 30 minutos a que nos volvieran a traer la comida a lo cual nos negamos. Aqui lo suyo hubiera sido no cobrarnos aunque sea los cafes, o que la casa nos hubiera invitado a algo, en compesacion, pero unos ni unos miseros chupitos de licor de hierbas nos ofrecieron los muy peseteros. Direis que a lo mejor soy un tikismikis, pero nos encontramos con hasta 5 mesas quejandose exactamente de lo mismo, asi que por lo menos me queda el consuelo de que no es que nos tuvieran mania a nosotros. Resumiendo 3,50e las cañas, 17e el cubierto de paella, ahi es na, 7e los postres y 8e un plato de ensaladilla, un servicio PESIMO, LENTO, CAOTICO e INEFICIENTE , infulas y precios de un estrella michelin. Solo mirar el ticket. No volveremos y no recomendaremos como en otras ocasiones hemos hecho este local mas, vergonzoso el trato al cliente y precios desorbitados para un arroz CRUDO, SALADO y con CARACOLES CONGELADOS...

Desastre en la gestión, organización y servicio, con un servicio exageradamente lento. Era de esperar si realmente aquello es gestionado por un chaval, joven y nervioso, que allí trabajaba y decía ser “EL JEFE”, que demostró un derroche de soberbia , arrogancia , mala educación, inexperiencia en el sector hostelero y servicio al cliente. Culpando de su lentitud, desorden en el servicio a los propios clientes. Una pena ya que contaba con un grupo humano de camareros de calidad, a los cuales sumió en el caos, por tener el local con un exceso de aforo clamoroso. Hora de llegada comensales 14:30. Mi marcha del local fue a las 17:45 y aún no había finalizado la comida (reservada con un mes de antelación ) . Niños de 2 años que a las 16.15 solo les habían traído una croqueta. Mesas empotradas contra las paredes y comensales apelotonados en las mismas. Durante toda la comida teniendo que sufrir molestias y moverse para que los camareros pudieran acceder al armario de cuberterías . Los comensales tenían que hacer funciones de camareros , recogiendo platos y cubiertos para dárselos a los camareros y abriendo espacio en mesa para que pudieran colocar entrantes . Todo siempre debido al encajonamiento producido por el exceso de aforo . Algunos entrantes ni llegaron según contratado a alguna mesa, alegando que se habían puesto en otra. El supuesto “JEFE” no pidió ni una sola disculpa por el bochornoso servicio y se limitó a culpar públicamente a los comensales. No solo eso , tampoco permitió que uno de los carros de un bebé de 6 meses entrara en el salón, teniendo que tenerlo en brazos la madre durante más de tres horas .(1 mes de antelación la reserva y avisados de la asistencia de comensales con bebés en carro). Para colofón final y como contestación a las críticas recibidas in situ por los comensales, “EL JEFE” , de forma pública en el salón , donde también se encontraba gente ajena , vociferó…”ya me encargaré yo de que no volváis a celebrar nada aquí” . Creo que con esto, ya no hace falta hablar de comida….

Con la réplica recibida a este comentario , no hacen más que constatar la falta de autocrítica a su servicio , culpando nuevamente de mala gestión a los clientes. ...

Ayer acudimos a comer con reserva, y sin previo aviso, nos pusieron en una mesa alta, justo al lado del baño… desde nuestro asiento veíamos cómo entraba la gente al baño y era muy incómodo comer con vistas al wc. Seguidamente nos disponemos a pedir los entrantes y la paella. Mi pareja al hacer la reserva habló con una empleada y le manifestó nuestra intención de pedir la paella de chuletón y ella le recomendó la de secreto y nos dijo que llegado el momento podríamos decidir si una u otra. Cuando nos disponemos a pedir la paella, se contradicen y nos dicen que teníamos reservada la de chuletón y que no podíamos cambiarla, nos extrañó, aún así nosotros amablemente le dijimos que adelante con la paella de chuletón. Llegaron los entrantes y reconocemos que estaban todos muy ricos y la camarera muy amable y atenta, no dejó de disculparse en todo momento por los percances que fueron sucediendo. Llegó el momento de la paella…y LA PAELLA ESTABA FRÍA NO, CONGELADA… NO ME HE COMIDO PEOR PAELLA EN MI VIDA, el punto de la carne no era el correcto, pero además, el chuletón estaba caliente y el arroz congelado, nos reconocieron que la paella se había hecho antes, y después hicieron el chuletón, por lo que estaba fría. Aunque la realidad es que el arroz estaba hecho de mucho tiempo antes y lo habían recalentado para servirnoslo, ahí entendimos el porqué no nos dejaron elegir otra paella… el paellero estaba ardiendo y el arroz congelado!! El arroz ni se despegaba del paellero de lo frío que estaba!! El postre estaba muy rico y era casero. Cuando nos trajeron la cuenta, nos descontaron 6€ de la paella, cosa que nosotros no pedimos y por supuesto no compensa la mala experiencia y el tiempo e ilusión que invertimos. Pagamos una cuenta de 100€ y la experiencia no estuvo a la altura de ese precio. Si vas supuestamente a un sitio de calidad, esperas un servicio y producto de calidad, nos da igual el precio, pero queremos una buena experiencia. Fuimos a un sitio especializado en arroces y lo que peor estaba...