Lo que más me ha gustado, su ubicación.
Queríamos comer en el restaurante Reyes de Aragón, pero estaba cerrado (al salir del monasterio vimos una comulgante, tal vez, tenían reservado este restaurante para dicho evento) y, por comodidad y por no salir al pueblo, decidimos comer en el restaurante Piedra Vieja.
La decoración, por llamarlo de alguna manera, está desfasada. Creo que no han debido renovar material ni han hecho ningún arreglo desde que abrieron.
Hemos pasado casi hora y media para comer primero, segundo y postre de menú, habiendo media docena de mesas ocupadas cuando nosotros habíamos llegado. Ha habido mesas que han entrado después que nosotros y, pidiendo el mismo menú, se han marchado en menos de una hora... La mujer que nos ha atendido ha sido bastante seca y cortante, aunque el hombre que nos ha recibido y la mujer que nos ha cobrado han sido muy amables.
El precio que tiene me parece excesivo para lo que sirven (teniendo en cuenta cantidad, variedad y calidad del menú del día).
La comida en sí creo que tiene mucho que mejorar. -Migas con huevo y uvas: las miga estaban secas, sosas y llevaba solo tres uvas, literalmente tres uvas. -Pimientos rellenos: ponía en el menú en su salsa, sin embargo me preció que era solo salsa de tomate y estaban sosos también. -Pollo asado: híper seco, soso y la piel nada crujiente, parecía cocinado en olla express. Trucha: pasada de cocción y la guarnición sin ninguna gracia. Unas verduras salteadas y un trozo de longaniza sin más... -Y los postres ni uno casero, las natillas sabían a “polvos” que tiraban para atrás y el helado no es nada que no puedas encontrar en cualquier supermercado.
El tema de la limpieza es otro asunto porque, en general, se veía limpio pero si te fijabas en rincones “poco visibles” (como el saliente que hay junto a las escaleras de entrada), estaban llenos de bichos muertos...
Tenía entendido que celebran bodas en el complejo y a mi pareja y a mí nos agradaba la idea de una boda en medio de la naturaleza, sin embargo, miedo me solo imaginando que el catering lo lleven...
Read morethe pizza for 9,10 are the cheapest frozen pizza from supermarket you can get. 99cent in supermarket. they write they are not fresh, but this is just trash.
but...
afterwards you dont get a bill but a piece of paper with "2pizzas, 20€". if you ask 3times for a bill you get it and spontaneous it cost only 18,20. so they try to cheat you by 1,80€, they cheat theat the tax office by not entering into system for pizza that cost only a few cent.
they can do it cause there is no other Restaurant. i am sure the tax office will like my report and photos of the...
Read moreLa estrella se la doy por el personal que es muy atento y servicial. Respecto a la comida nos sentimos estafados. Resulta carísimo comer ya que la calidad-cantidad-precio es abusivo. Está claro que en la carta pone hamburguesa con patatas y croquetas, y se lo toman al pie de la letra: te sirven la hamburguesa sin pan ni lechuga ni tomate o un poco de queso, ahí está en el plato, más triste y solitaria que la casa de la pradera a la hora de la misa. Nos pedimos dos y en un plato vinieron 3 croquetas y en otro 2. También nos pedimos 2 menús de los cuales uno vino sin pan (entra en el menú y lo tuvimos que pedir), y el otro sin agua (más de lo mismo). La calidad de la comida casi de comedor de colegio. Lo de los bocadillos fríos también tiene guasa: por 3 o 4 euros tienes un minibocadillo de jamón (una loncha y hasta más ver), chorizo (de embutido, 2 rodajas), queso (unos finos cortes que puedes ver al camarero a través de ellos) y tortilla (no lo pedimos pero supongo que estará hecha sin huevo ;-)). Conclusión: llevaros la comida hecha o visitar el Monasterio y su entorno a horas que no os pille la hora de comer, porque el "restaurante" es lo único...
Read more