Sinceramente, cuando fui por primera vez tenía muy buena pinta, una lástima no poder ni siquiera haber probado las carnes ni nada de lo que hacen. Al mediodía resulta que hemos ido mi padre y yo con idea de comer allí y resulta que estaban TODAS las mesas reservadas, por lo que nos tuvimos que ir al otro restaurante del camping, es cual hemos tenido el mismo problema, con la suerte que este último hacían comida para llevar y el otro no, al menos eso nos suponíamos ya que a la noche volvimos y al parecer sí que hacen comida para llevar también, lo cual no se nos notificó. A parte de eso, hemos ido pronto con idea de tomar un refresco y luego cenar. Nos hemos sentado sin problema a tomar el refresco, a lo que una de las camareras nos ha venido con que si nos podíamos cambiar de mesa porque esa estaba reservada (No había ningún cartel de reserva, inexistente) y que como compensación por las molestias nos iban a sacar unas patatas para comer. Bien, creo que sigo esperándolas. Por último y para rematar, ha salido el camarero y nos ha dicho que a las 21:30 nos teníamos que ir ya que habían reservado esa mesa en la que estábamos, y digo yo.. ¿Por qué han reservado una mesa en la que había gente sentada? Para ganar más dinero independientemente del bienestar del cliente, ¿No? En fin, una experiencia pésima en un restaurante al que no pensamos volver.