Bar-Restaurante "La Huerta" — Restaurant in Puebla de Alcocer

El local en sí está bastante bien, tiene potencial, con una decoración interior ciertamente contemporánea y rústica en una simbiosis acertada. El servicio en nuestro caso estuvo correcto en el trato, amable, sin apenas esperas cuando pedíamos cualquier cosa. El menú de semana santa me pareció acertado a medias, nos explicaron que si pedíamos de carta tardaría mucho mucho (palabras casi textuales)por lo que era mejor el menú ….28€ por un vasito de salmorejo y un trozo de pan frito; primero, segundo postre “o” café y bebida (agua, vino y casera) El acierto fue plantearse apostar por el menú y así poder hacer frente a un día de trabajo con muchas reservas y un gran volumen de trabajo con cierta solvencia rotando un número de primeros y segundos reducido.(claro eso para el negocio es ventajosa la cosa) Lo siguiente y siempre bajo mi criterio: El risoto con setas y ave que yo probé; es un plato muy arriesgado para tenerlo cierto tiempo porque pierde la textura cremosa y se queda seco o si lo humedeces mucho acaba pasándose y haciéndose pasta; de sabor estaba bien pero la textura : un poco regulinchi. Callos con garbanzos lo comieron varios comensales en mi mesa, no los probé pero tenían muy buena pinta y se terminaron todos los platos que por cierto llevaban bastante cantidad; yo considero que es un plato para tapa más que esa cazuela tan grande y densa pero para gustos ….. La pluma con patatas fritas estaba muy buena de sabor con un buen punto de plancha pero bastante escasa ( no me vale que sea una parte pequeña de la parte posterior del lomo porque,:28€) El bacalao que vi en mi mesa aunque no lo probé tenía buena pinta y era grandecito pero varias personas no se lo acabaron puede ser por los garbanzos y seguramente fuera así (mini punto ) Menú infantil : 10’50€ por un plato de patatas fritas de calidad media-baja filete de pollo congelado rebozado bastante bueno que lo probé (me gustaría saber de dónde sale ) y croquetas mal fritas congeladas, abiertas, desechas y 0 doradas. La verdad que de lo menos positivo. Al menos tenía un helado de postre incluido porque la bebida no la pedimos y aún me pregunto si se incluye o no ya que no vi papel ninguno en formato carta en que se especifique el contenido del M.infantil 🤔 Hablando de bebida me sumergí en un mar de dudas acerca de la formalidad de si se debe o no incluir bebida tipo refresco a parte de agua o vino y casera y expongo mi reflexión: en una mesa de 10 comensales, 8 adult@s y dos niñas, se pide 2 aguas y vino y casera durante toda la comida; entiendo que la norma no escrita establece que cada dos comensales es vino casera y agua ( el refresco no lo especifican y por defecto el local lo excluye ) ahora bien no sería más justo que se incluya al menos el primer refresco? Creo que según otras reseñas ya tuvieron algún que otro desacuerdo con otros clientes y no quería dejar pasar la ocasión para exponer mi opinión al respecto; y creo que si todos pidieran vino y casera por norma y acorde a los comensales sería un desajuste de margen volviendo a crear más desacuerdos incrementado aún más si te enfrentas con comensales de beber excesivo ….. Cuanto menos es un punto discordante y negativo para el restaurante. Los postres: torrijas, esponjosa gordita y a mi criterio buena de sabor quizá un pelín escasa y remito al precio del menú de nuevo. Mil hojas : de masa gorda en base lo que me indica que se compró en algún obrador industrial en cantidad y forma grande para abastecer la necesidad del evento religioso; desconozco si es su postre habitual o no pero desde luego deja mucho que desear frente a otras milhojas tipo Nicanor de hojaldre fino que se suele ver en locales de calidad media que se precie. En conclusión y por no alargar mucho más mi reseña hubo puntos positivos en la visita, servicio de camareros y la metre quizá de lo que más; sin embargo el punto más negativo fue el sobre coste de un menú que no siendo orientado a la calidad sino a ser práctico no justifica nada más que el margen de un negocio que prima cantidad de beneficio frente a calidad...

Desconformes totalmente, menú por 28€ caro para lo que entraba y para la calidad. Empezamos con un risotto supuestamente de sepia , pero la sepia no aparecía por ninguna parte y el sabor tampoco (insípido), de segundo lo único que mereció la pena fue el bacalao con pisto ya que la presa con salsa de pimienta eran cuatro trozos y con tres patatas fritas un desastre!!! , los postres podían pasar . Cuando pedimos la cuenta nos ponen dos copas de vino 6'5€ le decimos a la camarera que a nosotros conforme hemos llegado nos han dicho qué queríamos de beber y a los diez minutos de servirnos la bebida, nos han dado el folio del menú, en el cual vimos que entraba vino de la casa , casera y agua.... La comentamos que no nos parecía bien que nos cobren la bebida ya que al sentarnos no sabíamos si era menú o era la carta..... A regañadientes nos quita la bebida y cuando le pedimos pagar con tarjeta aparece la camarera y nos dice que la comida está invitada que nos larguemos tal cuál... Al salir nos está esperando el jefe hablando a voces tachandonos de sinvergüenzas que no queremos pagar la bebida... Cuando en ningún momento nos hemos negado en pagar nada , pero queríamos que entendieran que no pueden cobrarnos sin avisar que hay menú te cobran dos copas ¿Y la bebida de mi menu donde queda? Hablamos con educación, con respeto, tengo derecho a decirte que no estoy de acuerdo con eso pero no me niego a pagar . Vergonzoso el trato y su falta de respeto . Nos han invitado a la comida con tal que nos fuéramos del comedor como si estuviéramos montando un escándalo y en ningún momento nos han oído las otras mesas. Poca educación por parte del dueño!!! Gracias por la invitación de la comida pensábamos pagar gracias a Dios puedo pagarme la comida pero tengo derecho para opinar que no se hacen las cosas bien si me avisas yo pido sabiendo...

MALA EXPERIENCIA Empezaron recomendándonos una paella que según ellos estaba recién hecha, sin embargo la paella era de varios días atrás ya que esta estaba dura y el pollo estaba tieso. Nos trajeron una copa usada ya que tenía una mancha de pintalabios. Mi nieto se pidió el ojaldre de pollo y bacon, el cual era una pasta y por fuera parecía en la boca como si estuviera comiendo un papel de liar cigarrillos. De segundo me pedí el codillo, pensando que sería jugoso y sabroso, sin embargo el codillo era todo hueso no tenía apenas carne además de estar más seco que la mojama. Por último quería quejarme de la camarera, un ser creído y borde por lo que pedí la tarta de tres chocolates y venía con un regalito se pensó que no me iba a dar cuenta de que me hecho un escupitajo tras haberme quejado del codillo, finalmente me trajeron otra tarta y me la comí asustada. EXPERIENCIA NO RECOMENDABLE. Mi nombre es Antonia y para alguna duda mi teléfono es...