La señalización para llegar a la finca es bonita pero poco práctica, no se lee bien hasta que no estás encima. En el parking no hay ni una sombra, podían poner unas marquesinas. No hay ningún lugar reservado para personas con movilidad reducida. La señalización para acceder al restaurante casi hay que adivinarla y recorrer unos caminos de tierra que serán muy artísticos pero poco prácticos. Las personas con movilidad reducida lo agradeceríamos, sobretodo si es la primera vez que vas allí. Al hacer la reserva no te preguntan si tienes alguna dificultad especial y lo que menos esperas es que el restaurante tenga dos plantas y no tenga un ascensor para acceder a la planta superior (y no es por falta de espacio) y, oh casualidad, nuestra mesa estaba en la planta de arriba. La verdad es que nos han ofrecido una mesa en la planta baja. Después de subir hemos tenido que esperar un buen rato de pie hasta que ha subido un camarero a decirnos cuál era nuestra mesa. El maitre muy amable ofreciéndose a explicarnos cualquier plato o sugerencia, nos ha propuesto servirnos la ensalada con el plato principal y nos ha parecido perfecto. Después de un buen rato nos han traído el plato de carne pero la ensalada no aparecía. Por fin llega la ensalada y nos damos cuenta que viene incompleta. Se lo decimos al camarero cuando aparece por allí, nos dice que es nuevo, nos pide disculpas y se la lleva. Cuando prácticamente hemos terminado con el segundo plato aparece el camarero con la ensalada. Después de mucho rato de haber terminado con la comida viene el camarero a ver qué tal íbamos. Le pido un sorbete y le pregunto que de qué los hay (tal y como indica en la carta). Ha subido dos veces y no me informa, al final pregunta por el pinganillo. Desisto del sorbete, me trae la carta de nuevo y cuando se iba se pone a charlar con una señora de la mesa de al lado que se ve que eran del mismo país. Han estado hablando una eternidad y yo ya había decidido que desistía del postre y que iba a tomar un café. No he querido interrumpir su animada charla con su compatriota y le he tenido que llamar, cuando se iba otra vez, para pedirle el café que, después de otro par de subidas con las manos vacías, ha llegado frío. En ese momento se le ha pedido la cuenta y ha vuelto a desaparecer. Hemos decidido que pagábamos abajo y cuando nos hemos levantado de la mesa ha aparecido el maitre. Mi acompañante le ha estado explicando la situación y tampoco es que le haya pillado muy de sorpresa. ¿Será porque está la gente de vacaciones y todos los camareros son nuevos y no han trabajado nunca en hostelería? Pues que cierren. Tenía muchas ganas de ir pero no sé si volveré. La...
Read moreEstá claro que en la Finca Santa Rosalía saben muy bien lo que hacen.
Desde que entras a la propiedad, ya intuyes que vas a disfrutar del lugar.
Está todo cuidado al detalle. Jardines, decoración, hilo musical, distribución de las mesas, limpieza, personal, etc.
Pero lo que más nos conmovió, fue su cocina. Es espectacular el productazo que tienen.
En nuestro caso, empezamos por el “Caviar de Wagyu”. El cual, tenía una infiltración increíble. Se deshacía en la boca. No me extraña que sea uno de los platos más demandados del restaurante. Nosotros pedimos el de 50g, y la verdad nos supo a poco. Aunque si sólo quieres degustarla, puede ser suficiente. Si no, pide la de 100g.
Continuamos por las “Croquetas de Wagyu”. Sin duda alguna, otro entrante a tener muy en cuenta. Rebozado perfecto, cremosas, y bien sabrosas (la foto adjunta, habla por si sola).
Luego, llegó el “Chuletón de Wagyu”. En nuestro caso, pedimos el de 800g. Y os aseguro que el sabor que tenía esa pieza, es indescriptible.
Mira que hemos estado comiendo en restaurantes como El Capricho, Casa Julian de Tolosa, Sagardi, Charrúa, Piantao, y otros tantos especializados en carne. Y sinceramente, no tiene nada que envidiarles. Al contrario.
Personalmente, puedo decir que es una de las mejores carnes que he comido hasta el momento. De hecho, entra en mi top 5.
Así que, si estás leyendo esta reseña y tienes pensado reservar una mesa. Te recomendamos que la incluyas en la misma. No te arrepentirás.
Eso si, al igual que hablamos muy bien de los platos anteriores. No podemos opinar igual del postre. Sencillamente, no estuvo a la altura.
A pesar de ser una recomendación de la persona que nos atendió, fue una auténtica decepción. Puro aire, poco consistente, y muy plano en sabor.
Habíamos leído varias reseñas sobre este tema. Donde hablaban muy mal de la repostería del restaurante. Y después de nuestra experiencia, pensábamos que teníamos que darles una oportunidad. Pero efectivamente, las críticas negativas tenían mucha veracidad.
Así que, como consejo, elige muy bien el postre o simplemente omítelo. No quieras opacar el resto de la comida por ello.
Por lo demás, nuestras felicitaciones al equipo de la Finca. Porque nos llevamos un grato recuerdo de nuestro paso por sus instalaciones. Y esperando, al igual que deseando, volver a visitaros.
Nos...
Read moreGroßartig! Nach Verlassen der Autobahn glaubt man zuerst man ist falsch abgefahren, dann beginnt eine von Zypressen gesäumte Alle. Wer den Blick neben die Straße schweifen lässt, sieht einen offene Kuhstallung mit viel Platz zum auslaufen, entdeckt Gewächshäuser, Weinstöcke und kommt schließlich einen mit Weinfässern dekorierten Kreisverkehr. Dahinter eine Skulptur mit einem stilisierten Frauenkopf. Von da geht es weiter zu einer beeindruckenden Ansammlung moderner Gebäude in denen an einer Ecke ein großes Lokal zu finden ist. Schon der erste Eindruck ist imponieren. Ohne Reservierung und mit viel Glück haben wir einen Tisch bekommen. Das Ambiente lässt gleich hervorragendes erahnen. Die Atmosphäre mit der hinter Glas gut sichtbaren "Showküche", in einem hohen Raum, tollem Gedeck, bequem Stühlen ist gediegen ohne abgehoben zu wirken. Wir haben uns sofort wohl gefühlt. Der Blick auf die Speisekarte bietet gehobene aber keinesfalls hohe Preise. Einzig das Chuleta scheint nach oben aus der Reihe zu tanzen. Der Service war sehr gut - freundlich, schnell, aufmerksam, unaufdringlich. Leckere Brötchen, genug Wasser, eine Gazpacho die als Gruß des Hauses kam und eine Wucht war. Das Essen war .... Sensationell!!! Schon optisch ein echter Kracher. wozu braucht man Messer und Gabel, wenn das Fleisch so zart ist, das ein Löffel reicht? Super abgeschmeckt und von einer Qualität die man nur ganz selten findet. Ich habe mir noch einen Nachtisch gegönnt und auch hier war ich begeistert. Der Cafe war dann das Tüpfelchen auf dem I - die Sahnehaube auf der Kirsche. Hier versteht man wirklich, dem Gast zufrieden zu stellen. Wir waren nur auf der Durchreise und kennen die regionalen Preise nicht, aber gemessen an der Leistung ein Schnäppchen. Wer also zu den Öffnungszeiten hier vorbei kommt, sollte unbedingt eine Mahlzeit einplanen und. Besten vorher reservieren. Wir werden uns dieses Restaurant auf jeden Fall merken und wieder kommen. Vielen Dank an die Gastgeber. Es war ein Erlebnis. PS: einziger Nachteil: ich kriege seit Stunden das Grinsen nicht aus...
Read more