Fui un sábado de noviembre con mi pareja a comer a este restaurante. Tras un plan de campo por Puerto del Pico y visitar los pueblos de la zona, decidimos probarlo por recomendación familiar, aunque nos advirtieron que el precio era elevado para lo que ofrecían. Optamos por sentarnos en la terraza porque, a pesar de la época, no hacía frío y además íbamos con nuestro perrito.
Nada más sentarnos, vimos en la carta que había un suplemento en el precio por el servicio en terraza. A partir de ahí comenzaron los problemas. No había camareros disponibles para tomar nota, así que mi pareja entró al interior para preguntar si debíamos pedir directamente dentro. El camarero le dijo que no, que teníamos que esperar al compañero que atendía la terraza. Sin embargo, después de 15 minutos, seguíamos esperando y no aparecía nadie.
Mientras tanto, los comensales de la mesa de al lado comenzaron a entrar al restaurante para pedir sus bebidas y comidas directamente, e incluso acabaron sacando ellos mismos los pedidos. Ante esta situación, mi pareja volvió a entrar para pedir, y lo primero que le preguntaron fue: “¿Pero vais a comer o solo a tomar algo?” Le respondió que íbamos a comer, pero que no había nadie en la terraza para atendernos. Finalmente consiguió que le sirvieran las bebidas, pero tuvo que sacarlas ella misma, ya que los camareros no lo hicieron. La comida, según nos dijeron, debíamos pedirla en la terraza.
Pasaron otros 15 minutos mientras disfrutábamos del “elaborado” refresco, y finalmente apareció una camarera en la terraza. Sin embargo, en lugar de atendernos, se dedicó a recoger platos de otras mesas y a preguntar a otros comensales si querían algo más. Cuando intentamos llamarla, nos ignoró y continuó atendiendo a otras mesas. Al pasar junto a nosotros, repitió la famosa pregunta: “¿Pero venís a comer o a tomar algo?” Le dijimos nuevamente que a comer, pero se marchó sin tomarnos nota. Su única aportación fue sacar un par de platos para otras mesas, lo cual, visto el panorama, me pareció un logro notable.
Tras más de una hora de espera, decidimos marcharnos. Pagamos una de las bebidas; la otra, una botella de agua que ni siquiera habíamos abierto, quedó sin tocar.
Fue, sin duda, la mayor desfachatez que he visto en un restaurante, y eso que he vivido experiencias realmente malas. Para cerrar, solo quiero recordar al lector que en la carta se indicaba un suplemento por el servicio en terraza. Al menos tuvieron la decencia de cobrar el precio del refresco sin dicho suplemento. Eso sí, para cobrar no tuvieron ningún problema...
Read moreDou 2 estrelas, só porque não gosto de pontuar com o mínimo que nos é permitido. Todos têm o direito de evoluir, melhorar; mas para já, não merecem mais do que duas estrelas. Nem começou mal. Chegamos cedo, então, pedi duas imperiais e fomos para uma mesa no exterior beber as ditas, eu, e a minha esposa. Alguns minutos depois, fui pedir outra imperial. E, foi a partir deste momento que tudo começou a correr mal - quando vais pela primeira vez a um estabelecimento, onde a confiança com o empregado de balcão não existe, o mesmo não pode pedir que vás buscar um copo fresco ao frigorífico que fica fora do balcão e o leves até ele, para que te tire a imperial. Jamais isso pode acontecer. Ainda assim, decidimos entrar para a sala de refeições para almoçar, após autorização do empregado de balcão. Chegamos à sala e escolhemos uma mesa para dois. Voltou a piorar um pouco a nossa experiência nesta casa. Pois nenhum dos empregados se dirigiu à nossa mesa, nem tão pouco para nós olharam. Esta cena durou cerca de uns 15 minutos, clientes que entravam depois de nós, tinham atendimento imediato. Tive de mudar de lugar com a minha esposa (para ficar de costas para os empregados), porque estava quase a passar-me com tal situação. A minha esposa, com a calma dela, após várias tentativas para chamar um empregado, lá consegui fazer-se ver/ouvir. Fizemos o pedido... A coisa piorou e muito, quando vieram os pratos, não tanto pelo meu, mas pelo da minha esposa. Trutas de Escabeche que não lembra a ninguém... nem vou descrever o quão medíocre era a apresentação deste prato, e o sabor, segundo a minha esposa, foi das piores degustações que teve na vida. Não recomendo de todo este...
Read moreAnte todo empiezo diciendo que si quieres comer carne de calidad no te van a decepcionar, el chuletón es de los mejores que he comido (y han sido bastantes podéis creerme), las croquetas muy sabrosas e incluso las patatas que suele ser donde hay problemas, estaban muy bien. Como excepción el cordón blue que pese a ser un plato muy generoso con una ración que supera a la del chuletón, lamentablemente les queda seco por lo grande que es la carne. Los huevos fritos son lo que tienen que ser y también los recomiendo.
Porqué entonces las 4 estrellas? Pues por el servicio, pero no todo el servicio. Es cierto que al entrar pasan de ti todo lo que pueden y más, se nota que la camarera de la barra de pasa más tiempo haciéndose sus escándalosas uñas y maquillándose que prestando atención a los clientes, los otros de fuera más o menos lo mismo. Una vez en el comedor hay camareras que trabajan duramente pero de forma poco eficiente, les cuesta y lo hacen con buena fe (cosa que aplaudo) pero que lamentablemente no es suficiente para llegar a todo el servicio correctamente (lo hemos pasado mal por ella en algunos momentos).
Dicho esto la comida está en la mesa tan deprisa que parece un restaurante de comida rápida pero la calidad del producto está a la altura de las expectativas.
Recomiendo la comida del lugar, recomiendo el ambiente de ánimo que hay, recomiendo la localización porque es muy buena y pasando en moto o en coche es fácil aparcar pero no recomiendo para nada al personal más joven porque no ponen empeño en el cliente, aunque si doy manga más ancha al personal más maduro puesto que tienen el espíritu de ayudar pese a que no les...
Read more