Restaurante-Taberna La Posada del Rey — Restaurant in Sevilla la Nueva

Fuimos ayer a celebrar el Día de la Madre fiándome de las buenas opiniones de la mayoría de la gente y nos llevamos un chasco enorme... El camarero atiende con poca predisposición y con desgana, te hacen un lío tremendo con las cantidades y lo que entra y no entra en el menú, te ponen las cantidades que les sale a ellos de las narices (siempre tirando a lo bajo, claro), los precios se los inventan porque hay ciertas cosas que no están en la carta, las cervezas estaban medio calentorras, la botella de vino te la traen ya abierta (lo que hace pensar que la rellenan con las sobras de otras botellas), nos cobraron el pan a pesar de estar incluido en los menús, al igual que alguna que otra bebida, que por cierto, para lo que son y la calidad de la comida, es carísimo (30 eur). Me pedí un entrecot de ternera y la carne estaba tan dura que me tuve que dejar un buen trozo porque no lo podía ni partir...y no era culpa del cuchillo, era el pedazo nervio que atravesaba la pieza de carne, y el que le dieron a mi hermano era super fino y tieso como una suela de zapato... Los torreznos estaban con la piel chiclosa que se te pegaba en las muelas, la ensalada de "canónigos" era TODA de rúcula que tiene un sabor fortísimo y no se parece en nada a los canónigos... y el "rulo" de cabra eran dos trozos sueltos de queso que no formaban ni medio medallón. El revuelto de gulas medio crudo, las croquetas de gambón buenas de sabor pero muy pastosas, las patatas que acompañaban a la carne estaban refritas y los pimientos de padrón que veo en algunas fotos en mi plato no existían... El local super ruidoso y muy mal climatizado, aparte de muy pequeño para meternos a tanta gente...estábamos como sardinas en lata...un agobio los camareros todo el rato pasando por detrás... Una DECEPCIÓN en todos los sentidos... Ya me han visto por ahí dos veces, la primera y la última... Venir aquí es TIRAR EL DINERO... CERO...

Calidad reguleras, rabo de toro más salado que los perros. Botella de vino abierta, te cobran de más. Carne más pasada que el copón bendito. Los cuchillos no cortan, una silla se ha roto... Sitio incómodo al paso constante de los camareros. El interior huele a fritanga que flipas... la ensalada de canónigos es toda de rúcula. El baño deplorable y sin papel. Hamburguesa plana y simple, entrecot tipo suela o tipo corazón sangrante. La tarta de chocolate blanco más ASQUEROSA que he probado, eso sí, el tiramisú dice mi hermana que muy bueno. Aquí hemos venido DOS VECES: LA PRIMERA Y LA ÚLTIMA. Si queréis tirar el dinero es recomendable 100%... ¡SALUD!

Por cierto, si veis la web, no hay fotos del salón comedor porque NO EXISTE, nos calzaron como pudieron en un cuchitril. Me parece indignante que tengáis la poca vergüenza de publicar en la web la CARTA DE VINOS cuando nos pusisteis una botella grasienta de tapón de rosca y contenido de dudosa procedencia... Fueron 30 EURAZOS por barba, ojito a estos IMPRESENTABLES. Nos tendríais que haber pagado a nosotros por aguantar la porquería de local y calidad de la "comida" por decir algo... NO VAYAIS A ESTE SITIO, ANTES OS RECOMIENDO COMPRAROS UN CUCURUCHO DE PIPAS y comerlo en el parque.... NO TIENEN DATÁFONO PARA PAGAR CON TARJETA en pleno 2023, o efectivo Bizum, tócate el nabito... En fin, todo es muy dudoso la verdad. Si hubiera CERO estrellas, la ponía, una ya me parece exagerada... ea, con...

No se muy bien por donde empezar, ha sido una experiencia dura... La ensaladilla rusa que pedimos de entrante estaba insípida y hecha una pasta. En el revuelto de gulas éstas nadaban en aceite y estaban medio crudas. Los torreznos por ponerlos un nombre estaban fríos y sin sabor ninguno. Los segundos platos no se quedaron atrás, yo pedí unas costillas que además de estar resecas, sólo sabían a una especie de salsa barbacoa que llevaban por encima. Y para rematar la faena, el helado de turrón que me trajeron tenía más años que la humedad, yo creo que fue congelado a la par que Walt Disney, medio hueco por dentro y el barquillo como un chicle de boomer. Ni café tomamos, sólo queríamos escapar de allí. La atención también dejó mucho que desear, tampoco había tanta gente como para atender sin interés ninguno. 35€ tirados a la basura y no quieren que pagues con tarjeta. Tengo poco pelo pero aquí no...