La Baruva Chiringuito — Restaurant in Simancas

Sólo con el detalle de uno de los camareros ya me dice bastante de lo que hay aquí Es la primera vez que vengo,de primeras me parece un lugar bonito y acogedor Después de llevar diez minutos en la terraza sentada veo que nadie me atiende y me dirijo a una de las barras que tienen habilitadas en el centro del chiringuito... Me atiende un chico que se llama José ( según el ticket) Le voy a pagar y me dice q son 5€ ,le pido el ticket y me lo trae y me dice que le disculpe que son 4'50€....

Picaresca,jeta o simplemente una ESTAFA Cada uno que juzgue.... supongo que la gran mayoría de gente no piden tickets y ocurren estas cosas

Sólo por éste hecho,para mí muy muy grave No volveremos ni recomendaré

FORMALIDAD CERO PD: Con los euros y centimillos que van timando a todos los clientes,que a su vez hacemos de camareros, que se digne el dueño y cambie el equipo de luz que está hecho polvo....😜 De repente te quedas en penumbra.Hubo una señora que casi.se tuerce un tobillo de lo poco que se ve en una fase

Según me contesta el dueño a mí queja ya ven ustedes quién es éste fulano....se contesta sólo a su mala educación Lejos de intentar buscar una solución al problema de su negocio te dice que no vuelvas....hay gente que tiene bastante más de lo que se merece Sólo hay que leer las críticas tan nefastas de "...

Si buscas una experiencia inolvidable, este chiringuito lo consigue... pero por todas las razones equivocadas. Fuimos tres amigos con la simple intención de tomar unas Coca-Colas. Nada complicado. Pero lo que recibimos fue una clase magistral en hostelería al revés.

Empezamos fuerte: pedimos las bebidas con una sonrisa y recibimos a cambio un silencio que haría llorar a una piedra. Ni un "hola", ni un "ahora os las traigo", Nada. Eso sí, las Coca-Colas llegaron agitadas como si las hubiera mezclado un bartender en plena rave. Se la cayeron en la barra delante nuestro. Cero aperitivos. Parecía que si respirábamos más de la cuenta nos cobraban el oxígeno.

Lo mejor llegó al final: pedimos pagar por separado. Craso error. La señora que nos atendía, de modales tan sutiles como una apisonadora, nos negó la opción como si le hubiéramos pedido abrir una hipoteca en la barra. Y por si fuera poco, al irnos, nos dedicó unos cuantos insultos gratuitos que, francamente, podrían considerarse parte del menú.

Una joya de lugar si lo que buscas es salir indignado, sediento y preguntándote si has sido parte de una cámara oculta....

Lo difícil es hacerlo mal! Un lugar con encanto esperas que esté a la altura los servicios que ofrece. Opinaré de manera objetiva, lo más objetiva que me deje el amargo sabor de la experiencia recibida. Pedimos una consumición para 2 personas en Baruva ( por cierto no me representa como imagen de BAR EN VALLADOLID) Nos dice el camarero 5€, hasta aquí todo correcto. Le pedimos el TIQUET Y PONE 4'5€ UHHHMM algo me he perdido! La conclusión es la siguiente: Este señor se queda el resto o la propiedad cobra lo que quiere. El uso de ticket y la entrega de el es obligatoria. Es una práctica habitual en el sector de no entregarlo. Seguimos.... la luz es pobre, tan pobre que alguna de las líneas se cae y te quedas a media vela! No es que sea un problema es que es altamente peligroso para la seguridad de los clientes REVÍSELO CON SU EMPRESA DE RIESGOS LABORALES. Lo que más valoramos los clientes en el gusto que te deja el final y está guinda no colma es precioso pastel que tiene al lado de esta terraza. Si desea reopinar la propiedad me encantaría atenderles....