Restaurante La Covacha — Restaurant in Tornavacas

Ubicado en el corazón del Valle del Jerte, este restaurante se erige como un auténtico refugio de excelencia culinaria y hospitalidad. Durante una experiencia gastronómica inolvidable, fuimos deleitados con una selección de platos exquisitos mientras disfrutábamos de unas vistas impresionantes del valle: delicadas patatas rebolconas con torreznos, un selecto surtido de embutidos autóctonos, un cochifrito con pimientos de inigualable suavidad y una trucha con pimientos, preparada a la perfección. Todo ello maridado con uno de los vinos más majestuosos, los "Ribera del Duero", ejemplificado en un Protos. Para culminar la velada, se nos ofreció una majestuosa tarta de queso bañada en sirope de cereza, acompañada de una sublime tarta de cereza del Jerte.

Debemos agradecer el trato cercano y esmerado del propietario, cuyo encanto y profesionalidad se reflejaron en los invaluables consejos que nos ofreció para descubrir los rincones más cautivadores del Valle del Jerte, enriqueciendo así nuestra experiencia.

El ambiente, familiar y acogedor, se complementa con una atención que trasciende lo gastronómico, haciendo de cada visita una experiencia memorable. Altamente recomendado para quienes buscan un sitio ideal para comer, cenar o simplemente disfrutar de una bebida en un entorno único y...

This is a fantastic restaurant. It feels like it’s run by a family, and the food tastes like the food a family would prepare for special occasions. The servings are very generous and the quality of the food is very fresh and packed with so much flavour. We had the Sepia, Calamari’s, Ribs, Salad, Cheesecake and coffees / everything was 10/10. Service was fast and friendly. Would 100% recommend. Thank you...

No puedo decir nada sobre la comida, ya que tras más de media hora esperando, finalmente no nos atendieron. Cierto es que fuimos en la época en la que el valle del jerte está en todo su esplendor, pero no era ni medio normal. Los camareros empanados, que no sabían ni contester a preguntas simples como "¿puedo reservar para dentro de una hora?" , "¿cuanto hay de cola de espera?" o aún mas facil, "¿a que hora cierra la cocina?". Las respuestas, si es que te la daban, era "Diselo a mi compañero", o "No se si se puede reservar...pásate por aquí y ya vemos". Tras más de media hora esperando, y viendo que ni a mi ni a todas las personas que estabamos esperando nos atendían, decidí pedir un par de bocadillos, a lo que el camarero me dijo que no, que no daban nada de comida sin mesa. Nos fuimos de allí sin comer, perdiendo una hora de visia del valle y con el autobus de bajada a punto de irse, teniendo que esperar al siguiente para poder comer algo en un bar pequeño en la calle principal de platos combinados. Fallo nuestro por no llevar bocadillos de casa. No se si los camareros son familia del dueño y por eso trabajan ahí, o algo así, pero...