Al Capone — Restaurant in Torredembarra

Visited on a warm Thursday evening g with my wife. Hadn’t made a reservation but we’re welcomed by friendly staff. Tables are well spaced out overlooking the harbour and are well dressed.

Ordered the calamari for starter to share and it was the best we had whilst we had been in Spain (we had it most evenings!)

Weren’t going to order pizza but seeing them being served to other guests we thought we would try them. I ordered the calzone and expected a pizza folded in half. What I actually got was a pizza with another base on top! It was huge. Really tasty but far too big to eat all at once so they boxed it up to take away.

The wife had the pear and Gorgonzola pizza which was also very tasty.

Total bill for starter, 2 pizzas, 2 glasses of wine, a coke and a bottle of water was €65. Very reasonable.

A great...

Para comenzar tienen fotos que no pertenecen al restaurante, con lo que lleva a confusión con el que había encima que se comía muy bien. El servicio, el camarero está solo para todo el restaurante, atiende bien la única pega es que el vino blanco no se trae en la copa, se sirve en mesa, siempre, junto al primer plato porque sino se caliente, y más cuando el primer plato tarda. Y bueno... Un vino de tetra brick, porque de sabor, no hemos podido acabarlo siquiera. Si cojo un menú degustación( tal y como se describe en la pizarra exterior que informa de que el menú degustación puede ser con dos penaltis ensalada o mejillones, paella o arroz bogavante) se supone que he de poder escoger el primer plato, no que me obligu es a coger lo que cojas mi acompañante... Entiendo que si pedimos arroz ambos me digas que los dos hemos de escoger el mismo... Aunque no tiene sentido tampoco, porque es un menú degustación y ha de poder ser cada uno lo que desee. Pero aún acepto, pero que cada uno no pueda escoger un primero diferente... No lo entiendo. Los mejillones no son de roca, tampoco son al vapor, han sido cocidos, con mucha agua, sin nada más, ni sal , ni limón, ni laurel ni nada.. Resultado, un mejillon aguado sin sabor a nada.... El mejillón al vapor ha de ser de roca, con pica agua si es al vapor y al agua se le añaden cosas... El arroz caldoso se hace con arroz bomba, no largo, pasado no pasadosimo.... Con un caldo que no reconoces ni a lo que sabe.. cualquier cosa menos mar.... El bogavante lo han cocido antes y añadido después de hacer el arroz... No he probado peor arroz caldoso nunca.... Y unas cosas negras que no sabes que es por todo el arroz... El postre.. Solo hay un postre, te guste o no... Nada para elegir, crema catalana, no puedes escoger nada.. Solo eso o café... Café de baja calidad. Resumen... Había mucho tiempo que no comíamos tan mal... Por 35€ por persona... Y un menú degustación que es el que presenta el restaurante para que vuelvas.. Cosa que no pasará jamás... Y aprende a escribir anda. Que cocinar ya sabemos que tú cocinero no sabe, de pizzas santa pero de comida española no, queda muy claro. Fatal. No...

La verdad es que me ha sorprendido para bien, ubicación curiosa y agradable en un puerto con vistas a los barcos y al mar. Es un restaurante con platos variados y con mucho cariño, originalidad y cuidado en su presentación haciendo que incluso te de pena comertelo. El servicio y los precios son de 10, camareros con mucho trabajo, estrés y agobio a las espaldas pero que aún así, siempre ponen una sonrisa al cliente y lo tratan como es debido. La guinda del pastel, la comida. De entrante pedimos un plato que jamás habíamos probado, el Chiacchiere y fue todo un acierto, estaba espectacular. Luego como principal comimos una pizza diavolo y una carbonara tradicional que os aseguro que de las carbonaras que hemos probado en España es la más similar a la que te puedes comer en una auténtica trattoria italiana, la pizza estaba muy buena pero tampoco diría que es su fuerte, por lo menos la diavolo. De postre pedimos un Eclair de Vainilla que considero ser un buen postre para compartir entre 2 personas. Mi experiencia ha sido de las mejores en un restaurante italiano en territorio español pero como consejo sí que hay varios puntos a mejorar. Para empezar desde que pedimos hasta que llegó el entrante a mesa paso unos 30/40 minutos, luego pedimos rigatoni a la carbonara tradicional y nos trajeron unos spaguetti a la carbonara tradicional, fue un pequeño error que tampoco afectó la experiencia, cuando se lo comunicamos al camarero comprobó el error y nos ofreció la posibilidad de cambiarlo, aún así no nos importó ya que solo cambiaba el tipo de pasta. Otro aspecto que creo que debrian considerar es poner en la carta el precio con IVA directamente, en la carta está bien señalizado pero aún así creo que es más agradable pedir sabiendo el total de lo que vas a acabar pagando. Solo son puntos que personalmente me han parecido mejorables ya que como digo yo y mi pareja nos hemos ido encantados del restaurante y seguro que volveremos...