El Tropezon — Restaurant in Valdáliga

Éramos un grupo de 11 personas, menú de fin de semana por buen precio de 12€, cafés y cerveza aparte. Yo pedí de primero fideuá (Que eran dos raciones de dicha pasta con algún tipo de salsa que no sé de qué era, unas guindillas y sin ninguna gracia la verdad, aparte del tamaño desproporcionado), y de segundo un secreto al horno que ya sí estaba muy sabroso y tierno.

A más de uno nos habían servido una ración de primer plato demasiado grande por lo que en el momento de pasar al segundo preguntamos si era posible llevarnos las sobras de los 2 o 3 platos que habían sobrado: Nos dijeron que no estaba permitido en el menú del día, ya que "Si lo hiciésemos, la gente se lo llevaría todo. En platos de carta sí se puede llevar". Obviamente la perola de cocido no puedes llevártela, pero medio plato de fideuá o de menestra... No lo entendemos, puesto que las sobras iban a acabar en la basura (Ellos mismos nos lo dijeron) y sería un despropósito malgastar toda esa comida, pero bueno, ellos tendrán su política. ¡Considera traer tu propio tupper y llevarte las sobras sin decir nada, que para eso lo has pagado!

Al servir los segundos platos, trajeron dos que no habíamos pedido por lo que asumimos que se había confundido y que enseguida traerían los correctos. Esperamos y esperamos y cuando algunos habían casi acabado estas personas aún no tenían el segundo. El camarero segía pasando por la mesa así que dábamos por hecho que era consciente de que faltaba algo, hasta que vino a ofrecer la carta de postres, en ese momento le indicamos que no lo habían sacado. Habrían olvidado los dos platos, eso es un poco grave sobre todo si el camarero no se da cuenta que en una mesa hay gente que no tiene un plato delante.

A favor del restaurante, la cantidad de platos a elegir dentro del menú del día (Fin de semana al menos, no sé si entre semana cambia). No miré la carta así que no puedo decir nada sobre ella.

En contra, la calidad del servicio en general, y el hecho de que en algunos platos no estén tan cuidados como otros y prime cantidad...

Hace años era un lugar donde comí decente y abundante por un precio económico, hace años .. Mi última experiecia el sábado pasado ha sido realmente mala. Tuvimos que devolver unas rabas en mal estado, con un olor a amoniaco que tiraba atrás y aspecto seco y refrito. El camarero intentado convencerme de que estaban en buen estado diciendome que los de la mesa de al lado se las habían comido.... Los otros platos fueron albondigas (carne de mala calidad con mucho cartilago y grasa), pimientos rellenos de morcilla (4 pimientos de piquillo minúsculos, escondididos en una sopa de tomate frito y quesos, en fin,, una presentación y sabores que dejan mucho que desear. Lo unico "bueno" fueron las croquetas, eso si te gusta jugar a adivinar de qué es cada una, porque la verdad que salvo la de queso las demás sabian practicamente igual todas. Entiendo este establecimiento como Bar de pueblo, pero como restaurante creo que a dia de hoy tiene que ponerse muuuuucho las pilas, ni de coña se merece la puntuación que refleja google si solamente una persona, yo, salgo de comer asqueado y con 43€ menos en la cartera. Al final lo que pretendia ser una comida sencilla y económica acabó saliendo cara y con mal sabor de boca. Sorprendentemente el comedor estaba lleno y no hacia mas que...

Buenas tardes a todos. Experiencia lamentable. Después de reservar con un día de antelación para 7 personas (cinco que venían de Torrelavega, una de Santander y otra de Bilbao) a las 14,30 h., nos retrasamos diez (10) minutos de reloj en la hora de la reserva (llegamos al establecimiento a las 14,40 h.), como le pasa o le puede pasar a cualquiera por cuestiones del mero tráfico en la carretera, nos dicen que la mesa la han ocupado con otra gente. Que en breves momentos nos acomodarían. Una hora después, seguíamos mirando al techo esperando e indignados. Lógicamente, a las 15,35 h. pedimos la cuenta de la bebida que habíamos consumido durante la espera (encima somos imbéciles por hacerlo) y nos fuimos sin más explicación ni disculpas de ningún tipo por parte de ninguna persona del establecimiento. Desde luego, sitio vetado de por vida. Conseguimos que nos dieran de comer en Treceño al lado de la gasolinera, todo correcto, y de paso nos comentaron que es bastante habitual que episodios como el que nosotros habíamos padecido sucedan, ya que buena parte de la gente que acaba allí comiendo, vienen rebotados de El Tropezón por sucesos similares o idénticos al nuestro. Me parece muy poco ético y muy poco profesional por parte de esta gente....