Mesón del Norte — Restaurant in Valverde

Visita con sabor agridulce Llegamos sobre las 21:00 solicitando una mesa para poder cenar ya que hubiéramos estado por la tarde tomando algo y nos llamó bastante la atención el ligar tan acogedor y algunos platos que vimos. Empezamos la experiencia pidiendo una botella de vino tinto local y nos decantamos por una de 28,50€ y empezó el amargor de la visita cuando la camarera al verse incapaz de abrirla nos acaba destrozando el corcho llenando el mismo vino del y teniendo que llevarsela a adentro para abrirla sin darnos opción ninguna a cambiarla cuando llegue a ofrecerme para ayudar a abrir dicha botella ante la dificulta que le generaba, paso seguido llega la segunda parte pedimos cuatro platos en primeras a compartir el problema de dichos platos es que los dos primeros fueron perfectos y los otros dos acabaron llegando frío el ultimo por que llego serca de 10 min despues del 3 plato totalmente frio siendo verdad que no fue culpa del cocinero sino del servicio que no lo trajo a mesa Cabe destacar que los camareros habian un señor y una señora el señor muy amable correcto y el que se acercaba a atender las dos mesas que eramos en el local La señora que estaba con el movil bastante mal educada y la unica vez que nos atendio nos lleno nuestro vino de corchos El unico error que cabe destacar del chico es haber venido con un plato frio a la mesa que era el mio y dos minutos despues haber desmontado la mesa dejando unicamente mi plato y acto seguido su compañera haber recogido todos los taburetes de la barra ya que acabe sintiendome echado sin poder disfrutar mi comida por la que tanto espere La verdad una gran lastima ya que el local es precioso en una zona centrica y que prometia ser bastante bueno aun asi mis mas grandes felicitaciones al cocinero y agradecido ya que cuando habiamos terminando el primer plato gracias a que el salio de su cocina a mirar pudieron seguir llegando los platos a nuestra mesa volviendo a repetir con un canarero atendiendo la otra mesa y con una camarera que unicamente miraba durante todo el...

PARADA OBLIGADA. Si quieres comer sabroso y en abundancia, con buena calidad y estupendo servicio, tienes que ir.

De entrantes pedimos una ensalada de la casa (tomate, queso de cabra, aguacate y aliño de aceite con miel de palma) y unas croquetas variadas (solo les quedaban de ibérico y de pescado). La ensalada es un no parar: mojar el pan es obligatorio. Y las croquetas no estaban mal, especialmente las de ibérico, aunque con la ensalada estabamos encandilados. También el servicio de pan es abudante, incluyendo un alioli (éramos dos personas y nos sobró bastante pan, y eso que rebañarmos bien la ensalada).

De primeros pedimos un solomillo a la mostaza antigua y carne de fiesta de cochino (cerdo). El solomillo estaba rico, teníamos curiosidad de cómo era, aunque para mi gusto un poco repetitivo. Alrededor del solomillo hay batatas que acompañan bien con la salsa. La salsa no es a basa de crema pero tiene un sabor como a mayonesa y mostaza. Está rica, pero a lo mejor te cansa un poco. La carne de fiesta estaba del mil: bien fritita y las papas fritas eran del país, formando una generosa cama debajo de la carne de fiesta. No nos la comimos todas porque casi reventamos y hay que dejar hueco para el postre.

Para cerrar, una mouse de mango y otra de maracuyá. INCREÍBLE. La de maracuyá está para robar la receta y la de mango está muy rica, pero me enamoré del mouse de maracuyá. Y estoy seguro que los otros postres también estaban a la altura.

En conclusión: tienes que parar en este sitio si estás cerca. Recomendado el mouse de maracuyá y la ensalada de la casa. Volveremos si estamos cerca,...

Pésimo trato. Jamás recomendaría este restaurante. El miércoles 12 de abril fuimos a comer. Pedimos un entrante y la comida. Bacalao con "papas arrugadas". Después del entrante esperamos la comida, éramos tres comensales, el primer fallo es que trajeron sólo el plato de dos personas, cuando los tres habíamos pedido lo mismo, bacalao encebollado con papas arrugadas. Además de sólo llegar el plato de dos personas, en ver de papas arrugadas, llegó con papá guisada, y digo papá porque sólo pudieron una, partida en 4 mitades y además de pequeña, fría, parece que llevaba horas guisada. Tras casi diez minutos, cuando ya los otros dos habíamos comido, llega el plato de la otra persona. Después de haber tardado bastante más que los otros platos, el centro del pescado estaba congelado. Tuvimos que pedir que retiraran el plato para que lo pudieran en condiciones. Después de comer, la camarera se acerca a ofrecernos café/ postre, a lo que le relato lo sucedido con la comida y me dice que vaya a hablar con el dueño del restaurante, que resulta ser el cocinero. Después de esto ella le comenta a este señor lo que nos ha pasado, algo que ya sabía el porque le habíamos dado ya las quejas. Yo esperaba que se acercara a disculparse, pero lo que hizo fue entrar a la cocina por la puerta detrás de la barra, en vez de por la del comedor. Si le daba vergüenza del trato que nos había dado, debería de no haberse escondido y disculparse. Pagamos 65, además hay que decir que nos cobraron los servicios de mesa, que ni eso descontaron, a pesar de todo. Desde luego no recomendaría a nadie este lugar,...