La Rinconada — Restaurant in Vegacervera

Hemos ido a comer un grupo grande. Teníamos hora para las 14:30, pero al final llegamos mucho antes, 13:50. Les decimos que tenemos la reserva a esa hora pero que si nos podemos ir sentando y pidiendo (viendo que estaba las mesas libres pensamos que incluso sería mejor para ellos adelantar a nuestro grupo) Nos dicen que si, que nos podemos ir sentando pero que claro, que teniamos la reserva a las 14:30. Hasta las 14:30 no nos tomaron nota de la comida, 40 minutos sentados en la mesa viendo lo surrealista de la situación, ya que si nos dicen algo antes, habíamos hecho tiempo dando una vuelta o algo sin problema alguno... Con la gente que estaban en barra que conocían eran super sonrientes, casi igualito que con nosotros... Pero el detalle que todavía nos sorprendió más, fue que pedimos para llevarnos lo que sobró del cocido y nos cobraron 3€ por dos tuppers de plástico...

Le pongo 3 estrellas por la comida .

Obviamente no volveremos, es de nuestras zonas de montaña favoritas y hay muchos más restaurantes que no lo pagan con la clientela y con comida...

En Coladilla, un rincón sin igual, donde el sabor se convierte en caudal, está La Rinconada, joya escondida, de la buena mesa, su alma prendida.

Sus embutidos, un canto al paladar, curados al viento, hechos para soñar, el chorizo, la cecina, el salchichón, cada bocado, pura devoción.

Y el cocido de chivo, ¡qué maravilla!, aroma que envuelve toda la villa, caldo humeante, sustancia y pasión, un plato que toca hasta el corazón.

De postres caseros, el broche final, yogures y tartas que saben a hogar, dulces susurros, caricias al alma, cada cucharada, amor que no calma.

Pero no sólo la mesa es primor, también sus camareras derrochan calor, con gracia y donosura, siempre servicial, La Rinconada es un sueño terrenal.

Un festín de sabores que hay que probar, en Coladilla, el gusto se va a quedar. ¡Ven y disfruta este templo encantado, La Rinconada,...

Tremenda decepción por parte de un personal que no se ha disculpado por los errores cometidos, por la dueña que además se cobró íntegra la cuenta a pesar de dichos dichos errores y quien además se permitió vacilarnos en la cara . Ella misma es un ejemplo de cómo se les ha subido a la cabeza una tarea bien hecha a lo largo de los años que sin embargo ha decrecido en su calidad culinaria, en carnes con mayor grasa y servidas a temperaturas inadecuadas que sin embargo no dejan de incrementar en su precio. En fin, de ser un habitual ya me han visto suficiente porque a pesar de haber gastado cientos y cientos de euros comiendo en este local, jamás han tenido un simple detalle como invitar a un misero chupito o como en este caso, no cobrarse los errores cometidos . Nunca más …para eso hay muchos otros lugares donde comer mejor y con un...