Restaurante El Campillo — Restaurant in Villablino

El restaurante es muy bonito, en un pueblo más bonito aún. La atención, de 10, camareros muy atentos, educados y explicando muy bien los platos disponibles.

La comida muy rica, exquisita, platos bien preparados , abundantes y comida de calidad,los postres tb muy buenos!! , Por poner un " pero " muy personal, sí que heché de menos un pan mejor, entiendo q es una zona q cuecen buen pan y con una comida de este nivel, merece algo mejor q una barra de pan tan básica, un pan de hogaza de la zona le pega mucho más, pro repito esto del pan lo escribo como algo personal, xq el restaurante se merece 5 estrellas. El precio me pareció razonable e incluso barato. Para 4 personas: 2 entrantes muy abundantes ( sobró comida y somos gente de comer mucho) , 4 principales, 4 postres, 4 cafés, un chupito de crema de orujo, 2 refrescos y 2 botellas de agua..y salimos a 27 euros por persona...osea, la relación calidad precio, excelente. Lugar totalmente recomendable,...

Espectacular, todo, me cuesta hasta ordenar mis ideas para alabar las virtudes de este sitio. La primera mención va a ser para el dueño, quien nos atendió, una persona amabilísima y encantadora que en todo momento nos explico en detalle la composición de los platos así como anécdotas de su procedencia y elaboración. Empezó por un aquí el menú lo cantamos, yo os digo los primeros y los segundos y pedís lo que queráis el precio ronda entre los 25 y 30 euros por cabeza. El local, precioso; muy bien decorado y amenizado con una música suave tipo jazz o lounge versions, y la comida riquísima, mucha cantidad y a un precio más que asequible, tan contentos y sorprendidos quedamos que quisimos reservar tb para el día siguiente, lamentablemente estaba ya todo completo y no es de entrañar porque sitios como estos son auténticos tesoros de la gastronomía, son restaurantes de autor, genuinos y trabajados...

Veníamos de viaje y sabíamos que llegaríamos sobre las 15:30-15:45 por lo que al reservar preguntamos. No nos pusieron ninguna pega, todo lo contrario. Llegamos y nos atendieron dándonos una mesa al lado de la ventana con espectaculares vistas. Era domingo y comimos el menú del día (tenía 8 primeros y 8 segundos para elegir). Elegimos: alcachofas con huevo gratinadas con cecina, puerros con jamón, caldereta de cordero (brutal) y chuleta de vaca. De postre mousse de limón y tarta de la abuela. Cafés, agua y vino. Antes de traernos la comida, mientras esperamos nos trajeron una tapa de quesos la cuál no nos cobraron. Pagamos 38€ (36€ dos menús + 2€ caña) por una comida espectacular con vistas inmejorables y un trato del dueño y su camarero TOP. Era la primera vez que iba pero sin dudarlo no será la ultima. Es un placer descubrir este tipo de sitios en nuestro...