Restaurante A fuego lento Vinaròs — Restaurant in Vinaròs

First entering the restaurant, you can already tell the place is well run and organised by the level of hygiene they proudly present. Personally this made me feel comfortable staying there. Greeted by a polite waitress, and sat down by a table of my choice. Got handed the menu, which has a varient of foods and meals. A regular pattern of steaks and seafood. And, if you havent already noticed the shelfs of wines near the stove, there is wide arrange of wines in their drink menu. I didnt have to wait too long for the food to arrive before feasting (having a 3 foot steak*) and the taste was beyond delicious. Overall, the service was fantastic. Food also met my expectations set from entering inside. Not to meantion the cleanliness.

*The steak was obviously not this long. Although it felt like it.

P.S, not everything is expensive. If you order more on the hefty side, the price is going to rise. For a family of 3-4 id say the price...

We’ve been passing by this restaurant for the past few days and couldn’t help but notice the impressive selection of food on offer. Every time we walked by, we saw several empty tables, which made us eager to give it a try. Finally, we decided to pop in one evening, only to be told that without a reservation, they couldn’t accommodate us.

It seemed a bit odd, especially as it was late in the evening and plenty of tables were still unoccupied. We're not sure how those tables could suddenly fill up within minutes. Nevertheless, the team was friendly and professional, which we appreciated. However, we were really looking forward to dining at your restaurant, and it was disappointing to be turned away under those...

Fuimos a este sitio xq nos pillaba muy cerca del chalet de vacaciones y xq tenía buenas reseñas, además de xq el olor a brasa siempre atrae y un asador argentino no suele defraudar, al menos a los que yo he ido. Tiene una buena terraza y nos pusieron una buena mesa, estuvimos cómodos con el perrete y todo. Pedimos unas empanadillas criollas, correctas, sin más, las he comido mejores con sus aceitunas, su huevo cocido... Pero bueno, un pase tenían. Hasta aquí lo bueno. El resto, una peli de terror. Pedimos secreto a la brasa... No era ibérico, hicimos mal en no preguntarlo, eso es cierto, xq eso se nota en la jugosidad, pero es que además estaba seco no, lo siguiente, desecado diría yo, y duro... muy duro... nada que envidiar a la momia de Ramsés II. Yo tomé un trozo para probarlo y ya... Otro de los comensales le echó arrojo y comió algo más... Un par de trozos al perri y el resto ahí se quedó. Pero peor fueron las mollejas. A mi en todos los argentinos hasta ahora me habían dado unas magníficas mollejas LIMPIAS, abiertas, tiernas y bien cocinadas en brasa... Estas eran un despropósito, las trajeron sin limpiar, con una piel conjuntiva casi imposible de partir, enteras, como en racimo, a medio hacer de lo gordas y recubiertas de pellejo que estaban. Se las tenía que haber devuelto tal cual, sin intentar meterles mano x todos lados, con resultado infructuoso. No pudimos comerlas. Nos dijeron que eran de no se que parte, etc etc y que lo teníamos que haber dicho antes... Vale... Pese a que las devolvimos enteras excepto el trozo que probamos el arrojado y yo. Antes dije que hasta ahí lo bueno, me olvidaba de que los postres tenían un pase, flan de queso rico, flan de coco reguleras y pana cota muy rica. Café correcto y nos invitaron a un chupito. Ahí agradecí el haber podido comer postre xq si no, entre el chupito y el vino hubiera acabado haciendo eses, dado que no comimos más que eso y una empanadilla. No volvemos ni locos, vaya. Argentinos hay...