Bistró Casa y Tinelo — Restaurant in Zaragoza

Mi mesa fue atendida por Marta. No es necesario saber su cargo en la empresa (camarera, jefa de sala...), porque yo la consideraré en futuras visitas como "mi maître" por lo bonito de sus posturas y gestos elegantes y por su buen corazón. Esto último afirmado sin necesidad de conocerla. Únicamente es mi percepción por su lenguaje no verbal. Caminaba a doble tiempo, a tiempo o a contratiempo según la gestión operativa del restaurante lo requiriera, y los tiempos de atención solicitados por los clientes, para pedir recomendaciones por ejemplo. Lo digo porque Marta me recomendó de forma acertada y se lo agradezco mucho. Me irrita la frase del camarero "no debo recomendar porque está bueno todo". En mi opinión, Marta hace muy bien en recomendar aunque no acertara finalmente con el gusto del cliente porque ella en mi opinión se anticipa a las necesidades, ya que muchos clientes no piden lo que desean por "no molestar". A Marta no creo que la molesten por las habilidades y cualidades que aprecié en ella en su servicio de Sala:

Conexión plena con los clientes. Adaptabilidad y flexibilidad. Me irrita que el camarero diga "son las normas, no puedo hacerlo". Con el buen hacer de Marta se mejora mucho la reputación digital y la fidelización, convirtiendo al comensal en un potencial embajador de su marca "Casa Tinelo" donde me encontré allí por primera vez con el Académico José María Pisa, al que admiro. Marta no solo entiende de cocina, y vinos... sino que sabe generar una experiencia gastronómica armónica, superando las expectativas de clientes difíciles y resolviendo los imprevistos. Marta observa los detalles ¿Dónde? en un punto estratégico de máximo ángulo de visión. Transmite confianza con sus movimientos elegantes y silenciosos, serenos y pausados... en desplazamientos eficientes (sin andar por andar). Es decir, sabe sincronizarse con su entorno con pasos calculados (como si fueran de baile) y gestos coordinados (como si fuera una actriz). Sus indicaciones a sus compañeros con postura erguida, microgestos y contactos visuales, sin alzar su tono de voz que es suave, calmado, bajo y fluido. Presencia impecable con su uniforme. Me irritan los camareros con ropa de calle. La sonrisa de Marta es genuina, empática y acogedora. Acompaña a los clientes cuando entran y salen y eso genera sensaciones agradables en justa reciprocidad a una actitud de "mi maître" que considero "conducta agradecida" y por eso lo hace como experta en Sala. Mi conclusión es que "mi maître" me impactaba por 1) su experiencia y formación tecnológica en los softwares del restaurante; 2) por su corporalidad y gestualidad y 3) por su discreción y cortesía... y los "chefs" me impactaron por 1) su creatividad, 2) los sabores; y 3)...

Hice un pedido para recoger allí, pedi de primero Arroz meloso de ternasco y setas con alioli de lima y manzana, canelón de ternera escanilla, salsa de trufa y parmesano. Y como platos principales bacalao confitado con delluxe de verduras salsa ajoarriero y cebolla morada crujiente. Y el segundo principal que escogí fue el pastel de paletilla de ternasco, puré de patatas panadera y salsa moscatel. Y dos postres que fueron la tarta de queso y el brownie de chocolate con nueces y toffe. Voy a recogerlo que tengo el restaurante a media hora de mi casa y cuando llegue a casa y abrí los platos, faltaban en varios de ellos acompañamientos que venían como en el arroz la salsa de alioli, también en el pastel de ternasco el puré de patatas y estoy seguro que en el postre también faltaba el toffe del brownie ya que revise fotos de otros clientes y si llevaba la salsa por fuera y el que recibí no la llevaba. Del Arroz no hice foto ya que lo empece para mi hijo y nos dimos cuenta que faltaba cuando estaba casi terminado. Pero de la tarta de queso que si llevaba un puré de frambuesa y del lingote de ternasco si hice y se puede ver que no lleva ningún acompañamiento. Llame y me dijeron que si me acercaba me lo daban. Pero claro si tengo que pegarme otra hora de ir y volver para recoger unos acompañamientos que ellos se olvidaron…… no me salía a cuenta. Me dijo que entonces no me preocupara que mirarían de a ver cómo se me podría recompensar y se pondrían en contacto conmigo. Eso fue el 6 de Enero. A día de hoy ni he vuelto a saber….. yo les dije que revisaran bien las cosas ya que sus clientes íbamos a posta a buscar un pedido y lo mejor de todo que ese día solo tenían un pedido para recoger según me dijeron anteriormente además de que cuando fui estaba vacío por las horas que eran. Con esto no quiero regalos ni compensaciones pero la palabra es la palabra y encima que pagas y fue un día como el de reyes y no tengas tu comida servida completamente pues aún me dolió más. Además el trozo de tarta de queso es ridículo por lo que cobran si no ustedes mismos pueden juzgar sobre la foto que he subido. Espero que esta reseña les sirva para hacer bien su trabajo y mas cuando es un pedido para recoger y no vas a comer allí. Porque si pasa comiendo allí pues lo dices y se soluciona el problema pero de esta forma el cliente siente que a tirado su dinero o que le han engañado. Porque no solo fue un plato.. fueron 6 platos de los cuales 4 le...

No resulta posible poner 3 estrellas y media por lo que le doy 3 ( 4 es demasiado a juzgar por nuestra última visita). Nosotros hemos ido a comer allí desde que se inauguró el restaurante, año arriba o abajo, evidentemente no todos los meses puesto que no es un sitio económico, pero si 2 o 3 veces al año. Bien, al principio comías muy bien con cantidades abundantes y precios (dentro de lo que comías muy ajustados), una gran relación calidad precio, desde hace unos años esa relación ha ido mermando y a día de hoy ya no resulta tan interesante...¿se come bien? si, se come bien, está muy bueno, cocina elaborada , buena presentación y servicio agradable pero las cantidades han bajado mucho , antes cualquiera salía saciado, ahora una persona de buen comer sale con la sensacion de " estaba bueno pero según llegue a casa me como un bocata". La reducción de cantidad no a ido acorde con una reducción en los precios, más bien al revés...antes comías allí por 22/25 euros por cabeza cualquier fin de semana ( hablando de un menú, con café, sin hablar de carta y copa después ni nada) ahora es imposible comer allí un fin de semana por debajo de 30 euros por cabeza, más bien contad con 32/35 por cabeza porque pese a que el menú vale 28 euros el café, los refrescos y demás van aparte. Pongo mi ejemplo, fuimos 7 adultos y dos crios, 7 menús de fin de semana adulto y dos menús infantiles, además de 6 cañas de barra , 6 cafés y 4 copas después de comer nos ha salido 280 euros....repito, sin raciones fuera de menú ni nada...solo lo que cito arriba, así que ...35 euros por cabeza y in habernos saciado realmente, yo llega casa y aun merende nada más llegar. Moraleja, se come bien, buen servicio, buenas instalaciones...pero el precio empieza a patinar, subir 2 euros el menú cada año...ojo, que a los 5 años estas pasando de 20 a 30 euros el menú....como está ocurriendo, además las raciones son más escasas que antes y los fines de semana comes apretujado. AHHH lo olvidaba, éste fallo viene años atrás, no se porque pero no ponen el aire acondicionado, hacía un calor tremendo y nos ha pasado las 3 últimas veces que hemos ido. A pasado de er nuestra...