Bar emblemático de los que ya no quedan. Lo primero que llama la atención nada más entrar es su decoración: recargada pero nada agobiante ni estrafalaria. Recuerdos impagables de épocas pasadas pueblan sus paredes y techos. Fotografías, juguetes, recortes, libros, discos, bicicletas y mil instrumentos de música que... ¡se pueden tocar! Y es que éste, no es un bar cualquiera. Es un templo de la gastronomía donde puedes disfrutar de música en directo en cualquier momento en el que Bobby se ponga a tocar el banjo, la guitarra, la armónica o el contrabajo ayudado por cualquiera de sus muchos secuaces. Mientras tanto, Nines, su pareja, te podrá servir sonriente unas croquetas, un plato de jamón, de queso o de fuet aderezado con pan untado en aceite y tomate de la ribera. Todo regado con el mejor vino de la tierra, claro. Y, si te ha gustado mucho el vino (no en vano el local comenzó siendo un despacho de vino casi cien años atrás), te lo puedes llevar metido en una de las cojonudas botas que venden. No tengas miedo si lo ves muy lleno al entrar, al fondo, en la terraza interior, seguro que tienes sitio. Aún...
Read moreUn poco decepcionados, habíamos ido antes de la pandemia y nos encantó el sitio, tiene mucho encanto y todo estaba muy bueno y bien de precio, está vez volvimos esperando lo mismo y nos encontramos con raciones más pequeñas a mayor precio, entendemos perfectamente las subidas de precios, los pobres hosteleros se han llevado muchos palos e intentan superar la racha, pero no nos gusto que nos pusieran menos por más, nos sentimos un poco abusados, aún así recomiendo ir a probar su vermú y pasar un rato en un...
Read moreIf the road ever takes you to Casetas and your looking for some good home made tapas and a refreshment this is a great place full of...
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