Almar — Restaurant in Montevideo

No era la experiencia que esperábamos encontrarnos en este lugar, sabíamos que sus precios eran elevados pero esperábamos una calidad precio acorde. Al llegar hicimos el pedido de dos tablas de picada, unas croquetas de salmón y 2 papas con cheddar y panceta, aparte de las bebidas. La demora fue bastante, aclarar decir que mientras esa espera 60 minutos o más no recibimos nada más que las bebidas que habíamos pedido, no hay panera ( lo sabíamos ) pero al ser de más de 60 minutos la demora esperábamos algo! El local no estaba lleno, habían unas 4 o 5 mesas más con personas. Al ir a preguntar por la demora nos dijeron que ya salía, nos trajeron la primer tabla la idea era que se entregue todo junto. La tabla básicamente eran todos congelados fritos y faltaban cosas que nos dijeron que traía y vimos en demás fotos de usuarios, la verdad no lo valía el precio, entre esas cosas habían porciones de pollo fritas CRUDA, solo se llevaron la pieza sin pedir disculpas. Entre 15/20 minutos después mandaron las papas chaddar con panceta y luego de un rato más la siguiente tabla, que también habían cosas crudas! Comentando que habían aros de calamar y pescado que no tenía el punto que debía tener, eran blandos y estaban blancos! Vinieron las otras papas con cheddar con panceta, sin panceta y crudas las papas. Las croquetas le pedimos que no las traigan ya! Comentario estaba la encargada o una persona superior, en ningún momento se acercó a la mesa, tuvimos que ir a comentarles todo esto, ya que la moza entendible. Nos decía que ella no podía hacer nada, tampoco se disculpo cuando las cosas estaban crudas o llagaban todas separadas, solo comentó que ella no podía hacer nada y también estaban enojada por lo sucedido. Al ir a hablar con esta encargada, nos quería hacer un descuento en el ticket, al comentar todas las cosas mal nos invitaron con el postre a cada una de las personas de la mesa. El postre fue lo mejor llegó todo perfecto, todos juntos postres elaborados y muy ricos! Pero la verdad no volvería al lugar una lástima con la vista e infraestructura tan...

Un desastre de principio a fin. Reservamos por WhatsApp y, desde ese instante, percibimos la informalidad. Ni siquiera nos preguntaron a nombre de quién era, lo que nos hizo presuponer que no habían tomado la reserva. Lo verificamos al llegar al lugar: todas las mesas estaban ocupadas y nos hicieron sentar en una pequeña mientras se liberaba otra. Pasaban los minutos y no había novedades, por lo que consultamos. Como si nada, la mesera nos ofrece quedarnos en esa mesa (que era como para una persona, y éramos tres). Al rechazar la propuesta, nos ofrecen una más adecuada que estaba por quedar disponible. Tras otra espera y cambio de mesa, finalmente nos sentamos, con la desagradable sorpresa de que se acerca otra persona (aparentemente dueño o encargado) hablando con uno de los mozos como si no estuviésemos allí: “a ellos sacalos de esta mesa porque el otro grupo está esperando hace rato y tenía reserva”. En ese momento, sin dar crédito de la situación, le aclaramos amablemente que nosotros también estuvimos rato esperando, y que también teníamos reserva. Por si todo esto fuera poco, nos da una respuesta insólita, entre risas: “ah es que acá garantizamos las reservas pero no las mesas”. Ante nuestra atónita mirada, decide cambiar de tema ofreciéndonos una bebida a lo cual le dijimos que sólo queríamos la carta para poder hacer el pedido pues a todo esto ya había pasado más de media hora. El resto de la experiencia no estuvo exenta de situaciones bizarras, como que nadie nos tomara el pedido durante un buen rato porque no había quedado asignado mozo alguno a nuestra mesa, y que nos vinieran a traer (no una sino varias veces) pedidos ajenos por una absoluta desorganización, y viceversa: cuando finalmente conseguimos que nos tomaran el pedido, vimos con asombro minutos después cómo iban mesa por mesa preguntando si era para ellos. Cuando finalmente logramos consumir lo solicitado, lo único bueno de toda la experiencia es que la comida estaba muy muy rica. Los precios, ni de cerca acordes al pésimo servicio. Para nosotros, primera...

Esperé una semana para escribir esta reseña porque quería ser objetiva. Fui a tomar el té con 15 amigas para festejar mi cumpleaños el 4 de setiembre. Durante agosto había pedido presupuesto para ese día de setiembre y cotizaron $1.190.- té para dos. Cuando escribí para confirmar hora y personas me dijeron que el precio era $1.490.- y que habían dado precio equivocado anteriormente. Reclamé y se mantuvieron en su posición. Yo ya había invitado y coordinado todo con mis amigas y fuimos igual. El mozo que nos atendió fue muy atento y servicial y la señora detrás de la barra también, nada que objetar sobre ellos. La comida era rica y variada pero la trajeron a la mesa mucho después de las bebidas, cuando ya las habíamos terminado, no estuvo bien, desincronizado. Los vasos de jugo de naranja todos mal servidos, unos con más otros con menos, muy mal. Al final fui a pagar y emitieron el ticket al precio dado inicialmente de $1.190.- por lo que lo comenté a mi amiga que estaba a mi lado. La chica que cobraba escuchó y enseguida dijo que había un error, anuló ese ticket y emitió otro a $1.490.- Yo no comenté nada allí y pagué agregando 10% de servicio. Ahora sí digo: son poco profesionales, ven el árbol y no ven el bosque y no saben lo que es el valor de la palabra. Ni mis amigas ni yo volveremos y seguramente otros a quienes comentemos esta experiencia tampoco. Visión cortita, muy cortita. Una lástima porque el...