Es un parque muy grande, en una zona poblada de Cuernavaca. Hay muchas vías de acceso para llegar a través de las avenidas principales. Tiene buena afluencia de visitantes. Cuenta con lago, lanchas, puestos de comidas (antojitos), juegos para niños, trampolín, aparatos de ejercicio para adultos, baños, estacionamiento, las oficinas de la preparatoria a distancia y la biblioteca 17 de abril. Lamentablemente, como casi todos los parques de esta ciudad está en muy mal estado y prácticamente sin mantenimiento. La tierra está seca a pesar que un hombre regaba a las 12 del día a pleno sol (la peor hora para regar). Los juegos infantiles y de adultos en muy mal estado, estos últimos a pleno rayo de sol lo que dificulta que alguien se quiera acercar a ellos. La biblioteca infantil está en ruinas, en completo abandono. La Biblioteca 17 de abril, a pesar de tener buenas instalaciones y buen mobiliario tiene un acervo muy pobre, una completa ausencia de personal y, por lo mismo, está desolada. A las únicas personas que encontré en el interior fue a una pareja de chicas jugando ajedrez y un hombre sentado en un apartado rincón leyendo un libro. El único personal era la chica de la entrada que vigila quien entra y sale y nadie más. Por otro lado el agua de los pequeños lagos está verde, las canchas de básquet no cuentan con aro para anotar canasta varías de ellas, los puestos sólo ofrecen comida chatarra. Hay renta de cuatriciclos en estado regular. Aunque la entrada no tiene costo te cobran por el estacionamiento y por entrar a los sanitarios, por usar una lancha de pedales o por subir a un niño al trampolín.