De nuevo nos equivocamos al elegir este establecimiento, si bien los comentarios en Trip Advisor y las fotos lo recomendaban vivamente (algo inexplicable). Vaya por delante que la península de Karpaz es una de las más bellas zonas de todo Chipre, por lo que la visita era necesaria, pero la escasa oferta de hoteles nos llevó a elegir éste. De entrada no es un hotel sino una agrupación de pequeños bungalows independientes y relativamente nuevos (algunos están sin terminar). El problema es que en esta zona se construye a base de bloques de hormigón, sin más revestimiento ni aislamiento. Se pintan por fuera y a correr. Y dado que estamos en un terreno semi-pantanoso, la humedad sube por las paredes que es un gozo (todos los bungalows tenían una o dos paredes llenas de verdín). El cuarto era amplio (una cama grande y otra pequeña (colchón y sábanas aceptables) una mesa bastante espartana y dos sillas incómodas), con un frigorífico vacío y tirando a viejo (y bastante ruidoso) en el que encima estaba la TV plana con satélite (pero con solo unos pocos canales internacionales en inglés y francés, y unos 700 en árabe y turco). Allí hacía un frío tremendo, por lo que nada más entrar pusimos el aire caliente. El baño helado, con olor a humedad y con las paredes chorreando agua. La ducha no llegó a tirar agua caliente nunca y no era precisamente atractiva. Toallas justitas. Lo peor fue que con la caida de la noche, el fluido eléctrico se fue hasta 5 veces en unos 40 minutos. Al minuto volvía sin más (menos mal, porque allí no había nadie a quien preguntar; nos habían dejado solos y éramos los únicos residentes), pero nos dió muy mala espina, porque el frío y la humedad eran fortísimos. Cuando quisimos cenar en el "restaurante" del hotel, vimos que, efectivamente, allí no había un alma. Y en los alrededores (sin farolas y solo con algunas luces amarillentas en unas pocas casas) no había nada parecido a un mesón, bar o figón, por lo que tuvimos que tirar de lo que llevábamos en el coche para picar. La noche transcurrió sin más cortes de luz, pero a la mañana siguiente comprobamos que las paredes del cuarto estaban mojadas (condensación) y lo que es peor, el suelo (de plaquetas) era una pista de patinaje pues, excepto en donde daba directamente el calor del aire acondicionado (justo en la cama y poco más), el suelo estaba igualmente encharcado. Con cuidado salimos de allí y acudimos a desayunar, si bien tuvimos que esperar a que las dos señoras que allí había (y eran más de las 8 y media) terminaran de prepararlo. Entramos a una habitación con 6 mesas tan destartaladas como la de nuestro cuarto, vestidas con manteles de cuadros que estaban tiesos del frío. Allí no había más comensales que nosotros y no estaríamos a más de 15 grados. Trajeron el desayuno (bastante abundante, pero excesivamente turco) consistente en café (la leche la sirven fría), tortillas, kefyr, pan, pepino, tomates, aceitunas, queso fresco y otros preparados de dificil identificación (los habitantes de la península de Karpaz son en su inmensa mayoría emigrados anatolios y nuestras anfitrionas también lo eran, al igual que el desayuno). En el fondo, fue toda una experiencia, pero en ningún caso este establecimiento debería estar abierto al público dadas sus paupérrimas condiciones, instalaciones y mantenimiento. Curiosamente había wifi (pero débil). Tras haber pagado (en mano) los 60€ que costó aquella sala de torturas, le pedimos a una de las señoras que fuera al cuarto para que viera el suelo encharcado, cosa que fue fácil de demostrar al poner sobre el pavimento, junto a la cama, una hoja de papel, que inmediatamente quedó empapada. La cara de sorpresa de esta buena mujer no dejaba de ser un teatrillo sin arte alguno, pues nadie se cree que estas buenas gentes no supieran las deplorables e insalubres condiciones que ofrece este "Glaro Garden Hotel". Absolutamente reprobable e insisto, en que debería abrir solo en los meses de julio y agosto siempre que la mejor temperatura estival permita sobrevivir en estos bungalows. Totalmente...
Read moreSingle travellers don’t seem to be treated the same as families n couples The website says 55 Euros for single room, was charged 65€ plus had to pay 10 Euros for a terrible children's bike of the lowest quality. Glaro Garden is also difficult to locate and a 15 minute walk to the village “centre” Only my room didn’t have any outdoor furniture, except a broken table lying around in a ditch. I complained to one of the "employees" but nothing happened. (Poss not worth it, I was only a single traveller).Quite discriminating The landlord although trying to be helpful when I checked in had very very poor listening skills and I had to repeat everything 2x. Then the other guests arrived in my block. Inconsiderate moving around furniture until 11pm so I told them off. At 2.15 am loud talking on the terrace from yet another pair of tourists. No sleep again. And the worst: internet not working AT ALL.No evening entertainment, TV only Turkish channels. 65 Euros for really lousy inconsiderate neighbours, inconvenient bed, no sleep and no internet and not even outdoor furniture to sit on. I wish I had booked via Agoda.or booking to raise a formal complaint for compensation AVOIID n stay in Magusa!! Better value and...
Read moreWhat can I say about this small friendly family run hotel. I could not emphasis how wonderful our stay was. The whole family could not do enough for us, it was our wedding anniversary and my birthday whislt we stayed there, Murat made us a lovely special sweet for our anniversary and on my birthday, they actually made me cry with a wonderful, totally unexpected surprise. His sister is an amazing cook and we left them to choose our evening meal every day and nothing was a dissappiontment, food we would never have though to choose of a menu, but all superb. Breakfast was full of lots of variety of food. We truly ate like kings. Rooms comfortable and clean. It was a pleasure to stay there, relaxing, charming & quiet. More places should be like this, it was a step back in time to true Cypriot hospitality. We chose this hotel as we wanted to explore the area as only made day visits from the Kyrenia area, we would...
Read more