Casa rural santibañez de la fuente — Hotel in Aller

MENTIRAS Y POCA PROFESIONALIDAD. El propietario de la casa era conocedor antes de que empezara nuestra estancia de que tenían un nido de lechuzas encima de uno de los dormitorios por el cual los huéspedes anteriores habían tenido que dejar la casa (como bien citan en la reseña anterior, la cual no vimos hasta ya estar con el problema en la casa). El ruido que los animales hacen por la noche es insoportable. La respuesta del propietario, como bien se comenta también en la pasada reseña fue inexistente, de hecho, primero se hizo el loco como si no fuera conocedor de lo que había en la casa y solo ofreció como respuesta dormir en el sofá cama (sucio e incómodo en la planta inferior). Tuvimos que dormir todos los días con tapones (lo peor es que la familia del propietario también vive al lado y se hacían los locos cuando los demás vecinos del pueblo nos comentaron que ese problema les había ocurrido varias veces y seguían sin cerrar el agujero del tejado). Como las lechuzas son animales protegidos, no puede hacerse absolutamente nada una vez que están allí y los propietarios se dedican mientras tanto a engañar a la gente. Por otro lado quiero destacar que la limpieza en la casa brilla por su ausencia, tuvimos que retirar las telarañas de los techos de las habitaciones así como barrer polvo de hacía meses de la escalera de la casa. Igualmente, se nota dejadez total en el mantenimiento de la casa, cuando alguien se ducha, cae agua en el piso de abajo en el salón. Por el incidente de los animales, le costó muchísimo ofrecer un descuento indicando que tiene que pagar la limpieza, algo inexistente y siendo el precio de la casa desorbitado para el mantenimiento y limpieza que se le da. Sin duda lo peor de todo es la poca calidad humana y profesionalidad del propietario y su familia MINTIÉNDONOS en nuestra cara cuando realmente no podíamos dormir. Ojalá pueda evitar que alguien viva lo mismo que nosotros con esta reseña, porque desde luego intentará engañarles y esos animales están una media de 8 semanas en los nidos, durante las cuales seguirá aprovechándose...

Fuimos a Santibáñez De La Fuente buscando tranquilidad y nos encontramos con la desagradable sorpresa que unas lechuzas habían anidado en la parte alta de la casa, a la que no se puede acceder. Nos pusimos en comunicación con el dueño y nos dijo que eso no había pasado anteriormente, cosa no cierta, porque en Google vimos unos comentarios de unos huéspedes que contaban que hacía unos días que les había pasado lo mismo y tuvieron que abandonar el alojamiento. Lo que me ha molestado es que previamente no nos dijeran que existía ese problema, no se puede descansar en una de las habitaciones, éramos siete personas y las dos personas que dormían allí tuvieron que abandonar la habitación por molestias durante toda la noche. Por otra parte, la limpieza deja la bastante que desear. Polvo por los muebles y telarañas por las paredes. El lavabo del baño de arriba está atascado y el baño en general huele mal, a cañería, ese baño gotea y cae el agua al...

La casa es preciosa y acogedora, el pueblo muy tranquilo y la ubicación es ideal. Tiene una patio grande donde se pueden hacer actividades en familia/amigos, barbacoas... yo pude hacer mis clases de Yoga estupendamente! Hago notar la maravillosa agua caliente que tiene sus duchas! Nos vinieron muy bien después de "nuestras salidas de monte". Es una muy "buena base" para hacer actividades de montaña y bicicleta en la Cordillera Cantábrica. Desde la misma casa mismo pudimos subir al "pico Cuchu" (con increíbles vistas) y desde un pueblito muy cercano también a la Peña Mea. También hicimos bici y disfrutamos magníficos senderos (bien señalizados) para realizar las rutas. Además, hicimos turismo, degustamos las sabrosas (y abundantes) comidas de la zona..., fuimos a la playa, visitamos Somiedo... Tuvimos una muy buena experiencia, de seguro que volveremos! Sergio estuvo siempre pendiente de nosotros, es un...