Reservamos para la noche del viernes 16 para 3 personas porque no había lugar para el sábado 17. Nos pidieron una seña de $10.000 por persona y nos aclararon que si no íbamos no se devolvía. Me preguntaron cuando reserve que menú queríamos y como era la primera vez preferimos optar por el menú de $25.000 porque no conocíamos el tamaño de las porciones y llevamos un amiga que por primera vez iba a probar la comida libanesa. Llegamos y nos ubicaron en una mesa para 2 y éramos 3 “con reserva de $30.000” El mozo nos trajo la carta y le dijimos que habíamos pedido el menú de $25.000 y nos dijo que lo iba a tomar “la dueña”. Dicha señora estaba tomando el pedido en la mesa de al lado que habían llegado adelante nuestro, y no se acercó a la nuestra. Le volvimos a reclamar al mozo y mesa miró fijo y me dijo “no se altere, ya le dije 2 veces a “la dueña “. La dueña vino con una actitud poco simpática y me pasó el menú en el celular. Yo empecé a pedir y me inducía a que pidiera otros platos. Nos empezaron a traer los platos y NO entraban en la mesa, no era mala voluntad. Mi esposo le pidió al mozo que nos trajera una mesita auxiliar y decía que sí y se iba. No podíamos tener todo en la mesa, mi esposo se hartó y le llevó un plato al mostrador a ver si “alguien” reaccionaba y se daban cuenta de la situación. Nos trajeron otra mesa. La dueña me dijo es que “vos me reservaste muy sobre la fecha”, pero es ella la que decide si tiene o no lugar. La comida exquisita, fresca y abundante. Ya había pasado una hora desde que habíamos llegado. La “dueña “ tomó el micrófono y delante de todos mencionó la incomodidad manifestada por mi marido, como que se reclamaba porque tenía ganas de molestar y era falta de espacio! La pudo comprobar el mozo! Terminamos de cenar y esperábamos la carta con los postres aunque no estuvieran incluidos en el menú y un té que la dueña dijo por micrófono que lo había preparado ella. Nunca la trajeron. Pedimos la cuenta y el mozo nos dijo que “la dueña “ la tenía que hacer, esta señora estaba en una mesa sentada con un nene chiquito y nos ignoraba. Pasaron 15 minutos y le reclamamos al mozo y otra vez la frase “no se altere” Nos trajeron la cuenta, pagamos y nos retiramos. Es lamentable que nos hagan sentir que “tengamos la culpa “ de las falencias de la atención La comida y la ambientación muy buena pero no nos gusta el destrato, no es la simpatía que muestran...
Read moreEl pasado miércoles 15 de Enero por la noche, tuve la oportunidad de visitar el restaurante Beirut, y aunque tenía grandes expectativas, salí con una mezcla de sensaciones.
Primero, hablemos de los precios. La carta presenta opciones que, en mi opinión, son un tanto elevadas. Por ejemplo, el shawarma cuesta $20,000, lo cual me pareció caro para una porción que, honestamente, no es suficiente para dos personas. Además, la lechuga que contenia el shawarmatenía un sabor un poco amargo, lo que afectó la experiencia general. Desconozco si es algo puntual o es la carcateristica del plato.
Por otro lado, el café arabe también fue una decepción, tanto en términos de sabor como de porción. A $5,000 por cada café que resulta extremadamente pequeño, creo que la relación calidad-precio no es la adecuada. Personalmente sentí la falta de ese pequeño acompañamiento que suelen ofrecer los restaurantes junto con el café. Si bien no pedimos postre, hubiera sido bien recibido algo como una masa o un pequeño dulce junto con la bebida.
En cuanto al servicio, debo destacar que la atención por parte del mozo fue excelente; no tengo ninguna queja al respecto.
En resumen, aunque el ambiente del restaurante es agradable y el servicio fue eficiente, los precios parecen desproporcionados en relación con las porciones y la calidad de algunos platillos. En total, pagamos $46,000 por dos personas.
Dado que el restaurante se encuentra en una zona con múltiples alternativas, es importante considerar que los precios son altos en comparación con lo que se puede encontrar en el barrio. Espero ver mejoras en el futuro, ya que la comida arabe y libanesa tiene mucho...
Read moreFuimos al lugar 3 veces, deseo destacar los elevados precios en relación con lo ofrecido. Nos encanta la comida de oriente y hemos conocido lugares de excelencia( Armenia , Sirio Libanesa, Turca) La comida es pasable pero no excepcional, con calidad oscilante en relación a las veces que fuimos. Estábamos entusiasmados por ser un lugar cercano a nuestro domicilio. La última vez que fuimos ( aproximadamente 3 semanas atrás) pedi una copa de vino de la casa , me mostraron la botella ( Uxmal) y me sirvió la moza un tercio de la copa, a un costo de 8000$ , de un vino de $3700 pesos en el comercio, hago esta reseña porque otras veces me sirvieron algo más y no tenía ganas de pasar un mal momento reclamando algo obvio. Noté lo mismo en las porciones de comida. Probamos baclava como postre, extremadamente seco. A mi criterio están sobrevalorados, los precios son desproporcionados a lo ofrecido. El promedio por persona fue de 30000$ , para cobrar esos precios deberían ser de calidad uniforme y manjares, situación que no se experimentó. Si rescato la atención de un mozo que la última vez no estaba, José Luis era su nombre si no me falla la memoria. Espero mejoren...
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