GASTRONOMÍA EXPERIMENTAL Con sillas destartaladas que a veces pueden camuflarse bajo la apariencia de cajones de plástico, mesas con restos en forma de capas casi geológicas dejados por comensales anteriores, personal extrovertido y afectuoso, condiciones bromatológicas por demás sospechosas y baños que únicamente aceptarían como rival al inodoro escocés de Trainspotting 1, el Barloa es un agujero negro para cualquier teoría de marketing porque es imposible determinar muy bien si el secreto de su éxito reside en una conspiración del capitalismo que se aprovecha del romanticismo social de las clases medias o si realmente uno está ante una experiencia gastronómica intensa y disfrutable. Para tener una idea sin haber ido, probablemente se lo tendría que comparar con hacer pogo después de los cincuenta, leer las novelas de Joyce, escuchar durante una hora un disco entero de bebop al palo o las dos caras de Metal Machine Music de Lou Reed. En la búsqueda de un instante placentero uno no podría asegurar si va a encontrar lo que necesita, si es correcto lo que está haciendo, si se encuentra en el lugar y en el momento adecuado o si no se ha convertido en un clon 3D de Homero Simpson que va a terminar la noche acompañado por un audio infinito de la biblia tratando de salvar su alma como en el episodio del pez globo. El lugar es evidente y es lo que se ve: tres o cuatro tipos de sándwiches a la parrilla que salen rápido, sin papas fritas o ensaladas y un poco más de surtido en las bebidas. La reconstrucción casi literal después del incendio que lo destruyera unos años atrás hace pensar en el concepto deliberado de una especie de parque temático culinario lumpen al que las leyes de la escasez dificultan hacerle algunos cambios más allá del fuentón en el que se prepara la mayonesa, pero que mirado en cámara lenta, representa lo que oculta la pseudopulcritud de un local de cadena trashfastfood, una especie de 'inconsciente gastronómico'. Un amigo colgado de un amigo, la primera vez que fue pidió la carta y la persona que lo atendía lo miró como si hablara algún idioma jamás escuchado en el planeta Tierra. Como toda estructura de sentimientos el Barloa es binario, se toma o se deja. O se disfruta un sandwich clásico al borde del minimalismo, lubricado con sabrosos condimentos y con el toque ahumado de cocinar a las brasas que enfiestan las papilas gustativas pero que seguramente no van a ser lo mejor que comás en tu vida, o después del primer bocado se marca el 911 en el teléfono a la espera de que el sistema digestivo exija apretar el botón 'enter' para solicitar ayuda mientras se trata de recordar si las vacunas antitetánica y contra múltiples enfermedades tropicales están al día.
La gastronomía experimental generalmente está fundamentada en el uso de nuevas tecnologías y materiales pero no sería el caso de Barloa, que desde ese punto de vista podría considerarse excesivamente conservador, pero sí, y en definitiva es lo que cuenta, en cuanto a que todo experimento culinario exige la disponibilidad de un cuerpo que se ponga a prueba y si es posible y todo sale bien, se divierta revisando su posible Historia Privada de la Comida con el fondo de la ilusión utópica de un resistente crisol de gentes. Si este argumento no te convence, pensá que sin ese riesgo todavía estaríamos comiendo lo mismo que nuestros antepasados nehardentales. El BL es uno de esos lugares que cuestionan al sistema de calificación de Google maps, que debería permitir ponerle simultáneamente tanto cinco estrellas como una sola con el mismo valor de verdad. Ante la obligación elijo las cinco, porque el Barloa es un dilema al que me gusta volver y en el que siempre...
Read moreSinceramente fui porque todos hablan de los mejores lomos de mundo... Pero realmente el que crea eso es porque no comió un buen lomo o se conforma con muy poco... El pan es rico y fresco, la carne es tierna, pero no porque sea buena, es porque una feta de fiambre es mas gruesa.. Es solo eso una feta de carne en medio de un pan rico y fresco, con un poco de lechuga (pero muy poco) y una pincelada de salsa de tomate de mala calidad con mucho pellejo... La reina de la casa es la mayonesa casera, nada de reina: solo sabor a casero pero no deslumbra ni atrae para una segunda experiencia... La cerveza fresca... No fría... En verano sería caliente... El lugar es para comer, siempre afuera y rapidito... Muy poca limpieza y orden... Lo unico razonable es el precio: $4.000 el lomo, no vale mas.... Una justa relación precio calidad... Decir que este lugar hace los mejores lomos de Mendoza es nivelar para abajo, muy abajo; como así también es faltarle el respeto a mucha gente que cocina bien, te vende un producto de calidad y tiene un...
Read moreEs una lástima que haya bajado la calidad, tanto de servicio como calidad de Comida. Pedimos 5 lomos, es la segunda vez que vamos en el mes, primero atienden los pedidos para llevar y después las mesas, hemos llegado a esperar más de 45 minutos para que nos sirvieran; hoy pasó casi lo mismo. Vinimos más temprano para que no hubiera tanta gente y de igual manera la espera fue de 40 minutos aprox., tuve que hacer el reclamo en la parrilla porque estaban haciendo las entregas para llevar y las mesas estabamos esperando. Trajeron los lomos fríos, sin carne, mi hijo fue a pedir un tenenedor y le dijeron "tu mamá es una ...." encima me insultaron por reclamar lo justo. Conozco a Barloa desde hace muchos años, fueron clientes míos y lejos SON LOS MEJORES LOMOS DE MENDOZA (de hecho, a este lugar, va gente de todos los niveles socieles y hasta gobernadores, diputados, ministros, intendentes, etc) lástima que hayan bajado tanto la atención al cliente. Lamentable. POCO RECOMENDABLE. ESPERO QUE BARLOA VUELVA A SER "EL...
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