Entrecortes Parrilla al Paso — Restaurant in Mar del Plata

Llegamos literalmente de rebote y nos encontramos con una joyita.. no, una joyita no, una reliquia de Mar del Plata. Íbamos a comer a una parrilla muy cercana a "Entrecortes" y nos dijeron que ya no recibían más comensales (eran las 23 horas y estamos en plena temporada alta). Decidimos movernos y buscar otro lugar, y llegamos a la parrilla de Fabián: él estaba afuera, relajado, tomando aire y nos invitó a pasar aduciendo que la "mercadería" que servía en "su casa" de hace 17 años, era la mejor. Y no hubo dudas sobre eso. Una persona que de entrada decís: "es un viejo vinagre".. y todo lo contrario. Éramos tres (un amigo, mi hijo y yo). Nos atendió 10 puntos. Él cocinó, él nos sirvió, él hizo todo de punta a punta (tuvo bajas de personal esa noche por problemas de salud). Limpio, agradable y pintoresco. Tuve la oportunidad de entrar a la cocina, y todo de punta en blanco (eso suma un montón). Chori, morci, asado, vacío y fritas de primera. Con música acorde al bodegón que su estilo marca. Él cantando y atendiendo. Con mucho respeto. Con charlas de una noche de verano que te dejan ese gustito a "que estoy dónde quiero estar". Nos invitó una cerveza, mientras nos daba cátedra de los lugares a visitar para comer en "la feliz". Digno de un tipo que tiene calle y experiencia en el rubro. Sin dudas, vamos a volver. Pd: conoce a personas de mi ciudad, y eso suma a que la charla sea más interesante. Saludos Fabián! Santino agradecido por la propina y nosotros...

Éramos 2 personas, ya teníamos la idea de ir. Alrededor de las 21:30 nos acercamos y, sin nadie más sentado, Fabián (propietario) nos recibió muy cálidamente. Nos comentó los platos del día, nos mostró lo que se estaba haciendo en la parrilla y exclamó: "El vacío está una manteca". Nos sentamos en una mesita al fondo, donde se veía la cocina impecable y muy ordenada. La ambientación de una parrilla clásica, todo muy acorde a su servicio. "Traete 2 empanadas para los chicos que se la invitamos", le dijo Fabián a la chica que se encarga de la cocina. Mientras tanto, pedimos 1 gaseosa (tienen línea Coca Cola) y 1 vino (cabe destacar que tienen gran variedad de etiquetas y buena amplitud de precios), unas fritas y la porción de vacío que nos había recomendado. Las empanadas de carne cortada a cuchillo fritas estaban increíbles, el vacío una manteca como nos había dicho y, por si faltaba otra cosa, el pan calentito de la parrilla con 3 salsas (chimi, provenzal y criolla) para ponerle a lo que quieras. Se notaba la frescura de todos los productos. "Ahora les traigo 2 café de invitación", dijo nuevamente Fabián; como si fuera poco... Y no es porque nos lo regaló, pero estaba muy sabroso! Luego nos fuimos, con la panza llena, contentos, conociendo a una persona que nos brindó una gran hospitalidad y con las ganas de...

Carísimo por dónde lo mires. La calidad un cero. Las porciones parecen una muestra gratis. Comimos parrillada para dos de una carne que parecía chicle. La porción de ensalada era pequeñísima y te la cobra aparte. El dueño es el que te atiende y se hace el amable invitando dos empanadas de carne pero ni cobrándote las dos empanadas puede resultar tan Caro todo. Lo primero que dice es que el lugar es limpio pero no hay in alcohol en gel y si van al baño se van a dar cuenta que es todo sucio y feo. Dudo que pase una inspección porque es pura fachada. Es un caza turista. Ademas de todo lo que mencioné, a los Diez minutos de estar sentado te vas a querer ir porque el dueño no para de hablar, si no te habla a vos, habla con otro y no te va a quedar otra que tener que escucharlo porque habla a los gritos y todos son comentarios desafortunados sobre las mujeres. Ojalá más usuarios como yo se animen a comentar lo que pasa en ese lugar. La cultura del machismo. No solo eso sino que ademas maltrata a su empleado con gritos y represalias. Horrible todo. 4500 pesos a la basura. Veo otras opiniones negativas y coincido con todo. El puede decir que no es cierto pero tiene que acordarse que el cliente siempre tiene la razón. Hay que escuchar o leer más a...