Bambu Canting — Restaurant in Municipio de Cipolletti

El día de hoy estábamos disfrutando en familia en el restaurante Bambu de la ciudad de Cipolletti, al principio todo bien como de costumbre. Sin embargo, la alegría se esfumó cuando, al servirnos hielo, había una cucaracha. La sorpresa y el asco fueron inmediatos. Inmediatamente informamos a la mesera, quien solo se disculpó sin ofrecer explicaciones ni soluciones. Nos acercamos a la encargada del lugar y le informamos que nos negamos a pagar por una comida que no pudimos terminar, ya que el apetito se nos había cerrado, el momento se volvió repulsivo y desagradable. Sin embargo, el personal se resistió alegando que debíamos pagar si o si sino se nos hacía una atención (atención que no valía el mal momento) argumentaron que mantenían los cuidados necesarios, pero que el problema radicaba en la empresa proveedora de hielo, "Mym Hielo". Es así que insistimos en que ellos debían resolver el asunto con su proveedor, ya que como clientes, no éramos responsables de sus problemas de suministros, sino que solo veníamos a disfrutar de una cena donde NO HUBIERAN cucaracha... Lo más preocupante fue la indiferencia hacia la salud de nuestros seres queridos, especialmente la de un niño de solo 5 años. No se puede permitir que la negligencia de un proveedor ponga en riesgo la salud de los clientes. Aunque para nosotros la negligencia es del lugar, quien sabe por donde más estuvo la cuca hasta llegar a la cubeta donde sirven el hielo... La experiencia fue desoladora, preocupante por la falta de empatia y consideración. Nos pusimos firme en no pagar por la comida consumida hasta el momento previo a la cucaracha, he hicimos bien porque la ley 24240 Ley de Defensa del Consumidor establece en sus artículos 19, 20 y 21 que tenemos Derecho a la seguridad y calidad de los alimentos al reemplazo de la comida si fuera necesario y el Derecho al reembolso... Es así, que nos fuimos del lugar solo pagando por las bebidas embotelladas, intactas y sin contacto con la contaminación aunque varios ya habíamos consumido la bebida con el hielo. 🤢 Es por ello que NO RECOMENDAMOS EL...

Viaje rutero para el olvido. Restaurante tipico de comida libre. El único de cipolletti. Como muchos comercios bajaron su calidad en la mercadería pero no en sus precios. A veces un error que impacta fuertemente en el corazón de aquellos clientes que les gusta este tipo de negocios. La idea de la rutina libre no es salir del restaurante con el ultimo botón abrochado sino comer variedad y calidad. De hecho un comenzal no se levanta mas de dos veces de la mesa antes de cerrar su cuenta. Positivo los chicos que dan servicio en mesa cordiales atentos y agradables . Pendiente a su oficio siempre y parrillero de experiencia. Negativos . Varios estacion de panqueques con cinco variedades. De los cuales solo podian ofrecer uno.(duraznos) porque no habia frutas de la zona como manzanas. Parrilla poca variedad .si no dan carne a un asador dificil hacer magia. Y por ultimo vigilar la cuenta. Aire acondicionado insuficiente una tortura compensado con dos ventiladores. Agobiante. Y por ultimo. Revisar la cuenta. Eramos 5 comenzales y cobraron 6 . Disculpas aceptadas. Pero son muchas seguidas. Esperando sean concientes de un cambio radical. Y que retomen el camino que tenian cuando abrieron y se hicieron conocidos. Sino lamentablemente que sea un pueblo chico requiere el doble de esfuerzo para sus clientes. Saludos y a seguimos desgustando las...

Fuimos a Bambú (tenedor libre) hace dos semanas. Cinco adultos: $62.900 sin contar las bebidas (5 aguas saborizadas a $1600 c/u) *Comida: papas en variadas formas, muchas ensaladas, queso/fiambres, aceitunas, pickles, empanadas, pizza, comida marina, pastas, carne de vaca, etc. Solo me limité a comer comida vegetariana y no hay gran variedad pero si cantidad (es decir, muchas ensaladas, papas, pasta pero no comida diversa además de eso(?). En postres había torta, tartas, ensalada de frutas y helado de 6 sabores. *Servicio: los chicos se veían amables y atentos, la moza que nos tocó fue muy buena onda. No sé si corresponde acá pero no me parece bueno que por "política del lugar" se tenga que consumir si o si una bebida que quizás haya gente que no toma. *Ambiente: llegamos a la hora de apertura a la noche (21.00hs) y ya eramos 3 familias para comer. A la media hora se empezó a llenar. No me gustó que permitieran que las familias dejen a sus hijos chiquitos correr y andar de un lado para otro, es peligroso para cualquiera. No pienso que un local de comidas con tanta gente y poco lugar para moverse sea apropiado para que los chiquitos estén jugando con...