Los Socavones Restaurante — Restaurant in Municipio de Colonia Caroya

Service is essential to any restaurant. The best dish can be ruined if it's cold or wine that was carefully selected in pairing menu is not arriving until you finish the course. This was on Valentine day and expecting people to come, the place was understaffed. All waiters were going kiss who were supposed to service 20-30 tables. With attention to details the place was advertising, the result was not much better than hamburger joint on the side of the road where owner doesn't care as the next place is 100 miles away. Highly...

Fuimos con reservación previa. Llegamos a la hora pactada e ingresamos. Te sirven una copa de desgustacion como cortesía. En este caso fue un vino rosado de la bodega. Nos asignaron a Cande quien nos atendió muy bien. El plato principal se sirvió sin demora prácticamente. Mientras esperamos nos trajeron unos pequeños bocados y un paté casero con focaccia, muy sabroso. De plato principal pedimos ravioles de pollo y panceta con salsa de hongos y sorrentinos de vacio con berenjena ahumada. Ambos platos deliciosos. Porciones justas. Los ravioles al dente le dan otro contraste. La salga de hongos exquisita. El pollo estaba tan bien emulsionado que parecía otra comida. Los sorrentinos de vacio tb deliciosos. Un relleno un poco más seco con respecto a los ravioles. De postre pedimos un flan con crema y dulce de leche que estuvo muy rico. La crema era más bien neutra y no tan dulce.

El ambiente es muy bueno. La separación de las mesas, la atención y la ambientación le da un tono distintivo. Una sobriedad diferente.

Hermoso restaurante. Volvería aunque tengo que...

La infraestructura no tiene nada que envidiar a las mejores bodegas de Mendoza, se nota el esmero que han puesto. El restaurante es muy bello, espacioso, cómodo, muy bien atendido, un tanto complicado a la hora de reservar, los precios muy bien. Los vinos son espectaculares, las entradas que probamos son muy ricas, pero los principales bastante malos, la bondiola seca, apucherada, sin gusto a nada, las papas al horno quemadas, sin ninguna sorpresa, hasta parecía que se estaban por quedar sin y rasparon la asadera para rescatar algunas, cosa que se confirmo cuando en la mesa de al lado pidieron y les dijeron que no tenían más. Fuimos con la idea de pedir postre, pero ante la desilusión de los principales, nos desinflamos y no pedimos. Una verdadera lastima porque si tendrían una excelente cocina en semejante lugar y con semejante entorno harían desastres. Volveremos en otra oportunidad...