Al hincarle el diente a la empanada de carne argentina, y más tarde, a su contraparte ardiente, la empanada picante de carne argentina, quedé inmediatamente impresionado por la profundidad de su sabor a carne. Cada bocado se sentía como un viaje a través del rico paisaje culinario de Argentina. Habiendo probado ambas empanadas, incluida la renombrada oferta de La Querencia, puedo afirmar con confianza que las de aquí tienen el título como mis favoritas absolutas. Hay algo en la mezcla de especias y la calidad de la carne que las distingue. Nuestro camarero, un faro de calidez y hospitalidad, se aseguró de que nuestra experiencia gastronómica fuera simplemente encantadora. Su actitud genuina y su servicio rápido añadieron una capa extra de disfrute a nuestra comida. El plato de 'entrana fina' presumía de un exquisito perfil de sabor, dejándome deseando más con cada bocado sabroso. Esta aventura culinaria no fue solo una recomendación; fue una revelación. Nos encontramos encantados tanto por el servicio como por la comida, superando incluso a la renombrada La Querencia en todos los aspectos.