Restaurante y bufet Mr chilaquil — Restaurant in Durango

Primera y Última vez que visito este establecimiento. No asistan en domingos ni en días de alta demanda, porque el restaurante no está preparado para la alta demanda. El día de hoy me decidí por ir a este lugar ya que veía que estaba bastante concurrido y supuse que sería una buena opción a probar. Decepcionante por completo, lo único que podría rescatar es que cuando entras es agradable a la vista la decoración, sin embargo, una vez que estás ahí, todo está demasiado apretado, amontonado, encajoso. Se dificulta encontrar estacionamiento. El lugar un caos, carente de limpieza y orden. Casi no había cubiertos y vasos limpios y los pocos que habían, mal lavados. El personal amable sin embargo quizá por la saturación de trabajo que tenían, dejaron mucho a desear, tuve que pedir lo que necesitaba varias veces. Ahora vayamos a lo importante, la comida; fría, ácida, mal sabor, algunos guisos insípidos, y cuando cambiaron de buffet de desayuno al buffet de comida fue prácticamente lo mismo. Los chilaquiles súper equis. Y la verdad es que el precio tampoco es algo que sorprenda, por ese costo puedo recomendar otros lugares que si son una buena opción. No se si me tocó mala suerte porque yo veo otros comentarios positivos respecto a este lugar, a final de cuentas cada quien es libre de ir y generar una opinión propia, pero de mi parte yo no volvería ni...

No me gusta dejar malas reseñas, pero me indignó bastante algunos aspectos: Primero, diré que lo único bueno fue el ambiente y decoración del lugar (por lo menos en estas fechas decembrinas), es muy agradable y acogedor. Lo malo es que el personal parece atenderte de mala gana y siempre están parados en la mera pasada de clientes, estorban para los que ya tienen su mesa y no se mueven para nada, hay que andar esquivándolos. Seguimos con la atención al cliente: fuimos una familia grande y pedimos cosas en la ventanilla o a las meseras, siempre nos trajeron algo menos de lo que pedíamos o los platillos erróneos.

La peor parte fue cuando una cucaracha de cocina estaba dando vueltas alrededor de una de las cafeteras que nos habían llevado y de la cual ya nos habíamos servido café. También salió un pelo grande en uno de los platillos. Las tazas estaban mal lavadas con manchas negras o de bebidas anteriores. Los vasos de aguas frescas tenían olor a humedad.

Al final un encargado se disculpó y llevó dos jarras de agua de limón y un postre para la persona que le salió el pelo en la comida.

Diría todos los demás aspectos que no me parecieron bien, pero a fin de cuentas eso fue lo más "grande". De verdad espero lo lean y tomen en cuenta los aspectos a mejorar. Pero de mi parte no...

El lugar es increíble, la decoración y el ambiente es hermoso, es un gran lugar para ir, si no piensas comer, la primera experiencia que tienes al entrar es mágica, te sientes en un lugar fantástico que te invita a comer, pero no aceptes esa invitación, la comida no es mala, pero tampoco tiene nada de especial, su platillo estrella, los chilaquiles, dejan mucho por desear, las hamburguesas estaban aceptables, comibles, aunque los trabajadores son apáticos e ineptos, podría jurar que nos sirvieron la misma bebida rancia a propósito, nos dieron un té helado bastante bueno de cortesía, que al final terminaron por cobrarnos, eso nos arruinó completamente la experiencia, el lugar es demasiado bonito para lo que venden, no recomiendo éste lugar sólo por el trato y la comida, pero lastimosamente el corazón quiere lo que el corazón quiere y volvería sólo por el lugar, sólo recomiendo pedir algo que ni ellos puedan arruinar, una básica y aburrida hamburguesa o algo que sepa a harina, lo que sea para...