El Celler de Joan — Restaurant in Alcoi / Alcoy

Primero llame por teléfono porque quería reservar mesa. Me hace todo tipo de preguntas sobre que quiero comer (para hacerse una idea de cuánto nos dejaríamos en su restaurante), 10 minutos así hasta que me dice que no puedo elegir porque el ya tiene todo encargado y esto funciona así. Accedo a su exigencia y me dice que luego me llama. No me llama y decido volver a llamar yo, me dice que no hay mesa. Es decir, me hizo perder el tiempo para nada. Y uno de mis amigos después de dice que vayamos un anunciarnos, vamos y resulta que si que hay mesa. Nos aclara que nos preparará lo que el quiera (o mejor dicho, lo que le sobre). Accedemos nuevamente a su exigencia y nos hace pasar y cuando nos estamos sentando me dice que los perros no están permitidos. Mi perrita tiene 12 años, no puedo dejarla encerrada en el coche, con lo cual nos está echando. Porque según el tenia una clienta hiperalergica. Las mesas estaban colocadas de forma que había distancia y mi perrita anciana iba en un transportin, con lo cual dudo que esa mujer tuviera alguna reacción si ni siquiera se iba a enterar que había un perro. Para continuar en todos sitios permiten ya un perro en su transportin.Bueno, cómo comprenderá ante tanta mentira y exigencias nos dejo sin comer incluso habiendo accedido a que nos haga las sobras del resto para comer. No entiendo tan mala gestión, solo se que por muy buena que dice el resto que este su comida, la atención es lo que te hace volver. Pero bueno, cómo le sobrará el trabajo, se da el lujo de tratar así a los que no son de Alcoy. Pues espero que nunca tengas que sobrevivir en un...

Comimos ayer en el Celler de Joan.

Llámanos un día antes de ir para reservar mesa y el arroz que queríamos (De pato, foie y setas) nos dijeron que al ser festivo no sabrían si sería posible porque tendría que buscar dónde comprar el pato y que nos avisaría con lo que fuese... y efectivamente a los 20 minutos nos llamó diciendo que si, que había encontrado pato y que no habría ningún problema para hacernos el arroz (esto ya como detalle dice mucho de la persona que regenta un local, que se tome la molestia de encontrar lo que tú quieres...)

Al llegar allí al día siguiente desde el primer momento te sientes como si un amigo tuyo te invitara a su casa a comer. Trato muy muy cercano, te hacen sentir muy agusto.

Nos ofrecieron alguna tapa antes del arroz pero como queríamos darlo todo con el arroz no nos atrevimos así que para amenizar la espera nos sugirió probar los tomates de su huerto (tomates de verdad... con sabor a tomate 😍) y no nos pudimos resistir... y qué razón tenía... simplemente con un poquito de aceite y sal esos tomates sabían a gloria! (De nuevo otro detalle que marca la diferencia... el cariño con el que tratas al cliente...)

Y después llegó el arroz... no hay palabras para describirlo... vaya cosa rica! Se notaba que estaba hecho con tanto cariño como el resto del trato que habíamos recibido!

No nos atrevimos ya con el postre, pero queda pendiente para la próxima!

La relación calidad-precio inmejorable... sin duda volveremos!

Muchas...

Not 5 stars just because the noise, it was so noisy that it was pretty difficult to have a conversation at our table, otherwise it's a great place to enjoy local food, prepared with care to the ingredients and a lot of love. Additionally, Joan, himself takes care of the service, making you feel like his most esteemed client from your very first time there. Despite the noise, it's a place to enjoy next time you...