Portosenso Bar — Restaurant in Altea

Les voy a trasladar mi experiencia en el Bar Porto Senso en el día de ayer 16/08/2024. Vaya por delante que no es la primera vez que voy. Soy Cliente habitual de los últimos 4 años, y suelo ir aproximadamente 4/5 veces cada verano con Familia y amigos. Me suelo gastar cada verano en este restaurante una media de 30€ por persona, a razón de 900€/1.000€ por temporada. Mas allá de otros muchos amigos a los que hemos mandado durante estos años. Dicho esto debo de decir que la comida es razonable y una carta correcta, partiendo de la base de que es un restaurante tipo chiringuito. Lo mejor sin duda de este restaurante son las vistas y ubicación, ya que una parte de las mesas dan directamente al mar en una zona muy agradable y tranquila, que es lo que vamos buscando nosotros. Los Clientes que lo conocen y reservan con tiempo, piden siempre una mesa en esa zona, pero por razones organizativas de la gerencia, no se reservan mesas en esa zona y sientan a los Clientes donde ellos quieren, aunque les hayas pedido mesa en esa zona, no una mesa concreta, sino en esa zona, donde hay aprox espacio para 10/12 mesas más o menos, tanto grandes de hasta 8 personas como pequeñas y medianas. En la zona vamos a decir más interna hay peores vistas sin duda, y más ruido ya que está la zona de música y la cocina. Pues ellos han decidido que cuando el Cliente (del que viven) pide una mesa en la zona con vistas y más tranquila, con tiempo, no atienden su petición. Porque? Por razones organizativas suyas propias que han sido incapaces de explicar con un mínimo de coherencia. Repito haciendo la reserva con hasta 1 mes de antelación. Este es el nivel de interés que tienen en atender a los clientes en sus demandas de mesa. Debo de decir para ser honesto que el personal es muy amable y correcto y atienden rápido. Ayer de hecho, más haya de la molestia que esto nos generó, les dejamos una generosa propina a los camareros, ya que ellos no tienen la culpa de la sinrazón de la gerencia. El problema es la gerencia que tiene una visión limitada de la importancia que tiene para un Cliente la ubicación de la mesa donde va a comer o cenar. Y le da igual si estás celebrando algo especial o vamos con amigos a enseñarles el lugar y hacer de ese momento un experiencia especial. Lo importante como ayer me dijo la responsable “Alicia” es su organización. Y por tanto comes donde ella decide. Es decir, que puede que haya gente que la sienten en esa zona y no la haya pedido, porque ni siquiera lo conozcan y los que si la han pedido no puedan sentarse ahí. Es decir, es su criterio el que prima, sin importar lo que quiere el Cliente. Es su decisión y por tanto debo de aceptarla aunque no esté de acuerdo en absoluto con ella. Como ya nos ha ocurrido en varias ocasiones especiales y además ayer dicidió no atender mi petición y discutir conmigo, dejo esta opinión escrita y visible para que la gente que vaya en un futuro sepa a qué atenerse. En nuestro caso concreto hemos decidido dejar de ir a este establecimiento y no recomendarlo más, por su falta de interés en atender nuestras peticiones como Clientes y no querer valorar nuestro interés y nuestra experiencia final. Dicen que un experiencia de restauración se basa fundamentalmente en: comida, compañía y ambiente/ubicacion. Puesto esto último lo decide en este caso la gerencia del restaurante. No el CLIENTE. Así es la vida, unos regalan Clientes y otros los cogen. Un...

The location of the restaurant at the end of the pier with a view over Altea is truly something special. It’s a lovely spot for a relaxing drink or coffee while enjoying the scenery.

However, when it comes to the food and drinks, the selection is comparable to what you’d find at many standard beach bars. Unfortunately, the quality leaves much to be desired.

We ordered the “Porto Senso Burger,” which was described on the menu as being made with well-aged beef. It’s highly doubtful there was any beef in the patty at all. The main ingredient was clearly pork — finely minced into a mousse-like texture. When I pointed out that the meat didn’t taste or look like beef, the response from the staff was vague: “It is beef.” Upon further questioning about the texture, flavor, and color, the only reaction was a shrug and a dismissive, “If you say so…”

Disappointing, to...

First visit to this bar today, good location on the edge of the water. Coffee was good, but then I decided to have lunch and ordered the bacon and mushroom crepe at 12 euros (not cheap). When it arrived I was shocked at the presentation, it resembled a plate of vomit, decorated with black salt (see photo). Forever hopeful, I started to eat it, there was a crepe buried beneath the mountain of bottled or canned sauce, something that barely resembled a mushroom and I think there was bacon in there, but the taste was chemical and nothing more than salt. Needless to say I left most of my meal, I did not complain as I did not have the chance, the waiter did not return to our table and I had to go the the bar to ask to pay my bill. This is utterly sub-standard food and particularly at this price. We will not return to eat and would not recommend...