Un fin de semana en pareja por tierras riojanas. Zona de buen comer y mejor beber. Siempre hago la misma pregunta a los lugareños, "¿Dónde puedo comer con mi mujer y salir a hombros?". A la gente que pregunte, sin dudarlo, me respondieron; "El sopitas"... y para allí me fui. Reservando mesa claro.
El lugar es sorprendente. Una cueva, con diferentes espacios en los laterales (hay una ruta virtual en su página web) que hacen de comedores privados. Al fondo un espacio más amplio donde se disponen diferentes mesas, para diferentes números de comensales más números. Los comedores laterales son también diferente número de comensales, 2/4/6... todos para grupos reducidos.
La comida, no es que me sorprendiera, pero sí que fue excelente. Siempre que hago comentarios sobre un restaurante, pongo siempre la misma coletilla con la intención de ser lo más justo posible; "nadie cocina como tu madre".
Para beber pedimos, como no podía ser otra de otra manera un vino riojano, de autor con uva 100% garnacha. "Cien pilares", de bodegas Vico.
Mientras esperábamos vimos en la carta una tabla de quesos riojanos (para el postre), que pedimos y fuimos degustando mientras nos servían los platos. Lo primero que nos sacaron fue un aperitivo cortesía de la casa; Crema de calabaza con garbanzos. Los platos que pedimos fueron: Canelones de boletus, salsa de foie, trufa y virutas de jamon. Muy ricos e intensos en su sabor. Un pelín secos para mi gusto. Aunque a mi mujer le chiflaron. Alcachofas fritas, crema de boletus, brochetas de langostino y cecina de Leon. Notable,. El crujiente de la cecina era lo que yo llamaría el "rock and roll" del plato. Caracoles a la riojana con su punto de alegría. El picante no era muy intenso, así que aunque no te guste el picante este es un plato para todos los paladares. Muy, muy ricos. Y aquí es donde aparece mi madre, ella le ponía unos trocitos de jamón y chorizo para la salsa, que los eché de menos. Rabo de toro deshuesado y estofado al vino tinto de Rioja, papada ibérica y pisto riojano. Otra vez mi madre. El rabo de toro siempre ha sido mi plato preferido, pero siempre me ha gustado con el hueso, poder rumiarlo y chupar hasta el tuétano. Tarta de queso con helado (casero) de nata y frutos rojos. Sencillo pero la la tarta estaba realmente deliciosa.
El servicio flaqueó un poco, creo que nos tocó la camarera con menos experiencia. Pero nadie nace sabido y los pequeños detalles que cometió se le pueden pasar sin escandalizarse. Después tuvieron el detalle de enseñarnos la bodega, detalla que agradecimos.
Voy a comentar mi plan de fin de semana creo que te puede ayudar si quieres pasar un fin de semana romántico y de descanso con tu pareja. Dormimos en Arnedillo (al lado de Arnedo), en un hotel enfrente del balneario. Nos hicimos un circuito en el balneario de "Termas romanas" un 10. Y después un circuito de spa. Piscina muy grande con zona interior y exterior y multitud de chorros. El domingo fuimos a Arnedo visitamos sus famosísimas cuevas (los primeros datos del siglo V), muy interesante. Y después un homenaje en el sopitas.
Un restaurante que te recomiendo, yo le pondría un 8,5/10. La relación calidad precio es más que justa. Producto de la tierra, elaboración con mimo, platos con sabores potentes. Seguro que...
Read moreRecientemente tuve el placer de visitar el restaurante Sopitas de Arnedo y debo decir que fue una experiencia absolutamente maravillosa. Desde el momento en que ingresé, fui recibido con un trato excepcional. El personal fue amable, atento y muy profesional, lo cual me hizo sentir bienvenido y apreciado.
El ambiente del restaurante es simplemente encantador. Para mi sorpresa, tuve la oportunidad de disfrutar de mi comida en una cueva privada, lo cual añadió un toque único y misterioso a la velada. El entorno exclusivo y la atmósfera íntima crearon un ambiente perfecto para una cena especial.
La comida en Sopitas de Arnedo es sencillamente espectacular. Los entrantes que elegimos, como los pimientos, el carpaccio y los canelones con trufa, fueron una auténtica delicia. Cada plato estaba cuidadosamente preparado con ingredientes frescos y de alta calidad, lo cual se notaba en cada bocado. Los sabores eran exquisitos y la combinación de ingredientes era simplemente perfecta.
Los platos principales no se quedaron atrás. El cordero, el pulpo y el solomillo con foie fueron elecciones acertadas. Cada uno de ellos estaba cocinado a la perfección y los sabores se complementaban de manera extraordinaria. Fue todo un festín para el paladar.
Y qué decir de los postres, ¡simplemente deliciosos! La torrija, con su textura suave y su sabor dulce, fue el cierre perfecto para la comida. Además, tuvimos la oportunidad de probar unos sorbetes de mojito que resultaron ser refrescantes y originales.
Por supuesto, no puedo olvidar mencionar el vino que elegimos para maridar la comida: un buen Tinto Rioja. Fue la elección perfecta para acompañar los sabores de los platos, aportando un toque de sofisticación a la experiencia gastronómica.
En resumen, mi experiencia en el restaurante Sopitas de Arnedo fue simplemente increíble. Desde el trato excepcional hasta el ambiente acogedor y, sobre todo, la comida deliciosa, todo fue impecable. Recomiendo encarecidamente este lugar a todos los amantes de la buena cocina. Sin duda, volveré en mi próxima...
Read moreI can’t fault anything! My experience was perfect from start to finish. The staff was very friendly and welcoming and they paid attention to my strict dietary restrictions and recommended things that they can accommodate for me from the menu. The ambience and decor was unique as the restaurant is built into a cave. The food is above all the best I’ve had in a long time - my favourite was the shrimp and fried artichoke. I left with a very happy tummy and if only I live in Spain I would come...
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