Jarana | Restaurante Barbate — Restaurant in Barbate

Por dónde empezar…. Hice una reserva para 5 personas para cenar el lunes por la noche, pues bien, lo primero nuestra mesa no estaba preparada cuando llegamos, nos acomodaron en la terraza lateral finalmente, pasados unos minutos acomodaron a otra mesa justo detrás nuestra , a golpe de silla arrastrando y dándonos golpes a nosotros mientras acomodaban la mesa y las sillas, no contentos con eso, el chico se mete entre mi familia para retirarnos la mesa sin ningún tipo de explicación, para que la mesa de atrás estuviese más cómoda. El inicio ya fue regular… pero bueno nuestra expectativa era buena, pedimos la comida, todo estaba muy bueno, de eso no hay queja, pero el servicio es HORRIBLE, no saben lo que venden, te dejan los platos sin explicar nada, y es una cocina de fusión de sabores, según ellos, tiraron encima de la mesa literalmente el paquete de regañas…. Bebida que pedías sin traer, pero lo mejor estaba por llegar, la lasaña de retinto, es de rabo de toro, y mira que al principio preguntamos si lo era, y nos dijo el chico que no había otra así que si, pero cual fue nuestra sorpresa??? La lasaña era de rabo de toro. Llamamos a un camarero, se lo comentamos y nos dice, que que hace?? Que se lo digamos a quien hemos pedido!!!! Mandan al camarero y nos asegura que si, que es retinta, rabo de retinta, y le digo que no, que soy cordobesa y se a lo que sabe el rabo de toro, llega el que parecía el encargado y dice que MEZCLAN una carne con otra para darle jugosidad…. Ridículo! Se llevan el plato y nos ofrecen pedir otra cosa, seguimos confiando… 45’ más tarde llega nuestro plato, buenísimo eso si, reclamado dos veces… el encargado jamás dio la cara, ni nos pidió disculpas por todo lo ocurrido, pero bueno nos invitaron a los postres..

CONCLUSION: Escribo todo esto para que sirva para mejorar, es un restaurante con unos precios elevados y mínimo que tengan un servicio como la carta que ofrecen porque es una pena que estas cosas ocurran, es una cocina muy potente, estaba muy bueno todo, pero el servicio te lo estropea y te hecha a perder la experiencia, hay que formar al personal, hay que dar unos mínimos.

Lo siento mucho de verdad, porque nos reservamos la mejor noche de nuestras vacaciones para ir...

Un restaurante con una ubicación magnífica en el paseo marítimo. La decoración super elegante y cuidada y un ambiente maravilloso. La comida de diez, calidad máxima de la materia prima y una ejecución maravillosa por parte de la cocina. Todos los platos que pedimos nos encantaron. Espectacular la tortilla Macarena, los dados de atún con ajo blanco, el brioche, las croquetas... Todo de principio a fin para enmarcarlo. Sin embargo nos fuimos con un mal sabor de boca en cuanto a la atención que recibimos. Nos chocó mucho y más en un restaurante de estás características. La chica del pelo corto que nos atendió parece que no le caímos muy bien, ya que su trato no fue igual con las mesas de al lado. Llegamos con nuestra reserva hecha hacia varios días a las 22:30h y desde que nos sentamos malas caras y contestaciones no muy acertadas. Para comenzar al dar la comanda quisimos pedir primero dos entrantes y luego seguir viendo la carta para seguir pidiendo. Nos dice de mala forma que no, que todo del tirón y más a la hora que era ( a la hora que nos dieron la reserva) lo comprendimos y pedimos todo junto, pero le comentamos que lo hacemos así por qué vamos a compartir y no queremos que salga todo junto. La siguiente contestación, que eso será en otros sitios pero que allí, no hacen eso. Al momento teníamos tres platos en la mesa. Le dijimos que era lo que no queríamos y con mal talante se lleva uno de ellos. A las 23:00h ya habíamos terminado de cenar... Media hora justa... Una prisa innecesaria cuando quieres disfrutar de una cena en un día de vacaciones. Lo último, al pedir la cuenta y cuando nos trae la cuenta le pido el ticket para llevármelo y le digo que si me lo puede dar a lo que me contesta de nuevo de mala forma que si no estaba ahí ( señalando el vasito donde estaba la vuelta) le dije que no que solo el dinero de vuelta .Se va y vuelve y nos lo suelta en la mesa. En fin una mala experiencia con carrera incluida. Espero volver y poder disfrutar de una cena más tranquila. Pero destacar lo buena que está toda la comida y la calidad de todos los platos. Enhorabuena...

Emblemático lugar de Barbate en Cádiz. A pie de playa y con un parking de tierra (a veces saturado) próximo al restaurante.

El ambiente es muy bueno aunque en días de calor se hace un poco cuesta arriba. Muy conseguida la decoración del lugar ajustada a la naturaleza de un lugar como Barbate.

Toda la comida es apta para embarazadas y si no es apta te la cocinan de una forma distinta, así que muy positivo de cara a la valoración.

El servicio fue muy atento desde el principio y hasta el final siempre respondiendo cualquier tipo de duda y asesorando en cualquier decisión sobre el tipo de comida.

Quisimos compartir platos para probar un poco de todo dejándonos llevar por los comentarios de @cenandoconpablo.

La tortilla Macarena, una tortilla de camarones con gambas en su interior y guacamole con un toque (muy suave) picante.

Después pedimos la versión de los tacos de la Peña del atún. Como nosotros ya habíamos estado previamente en la Peña del atún y existe reseña donde esa visita con 5 estrellas quisimos probarlo y no nos defraudó. Atún en estado puro, con intensidad de sabor y muy muy buenos.

Aunque nos quedamos sin foto por comernos el tataki, uno de los platos que más recomendamos es el tataki de atún con salmorejo. Espectacular el atún.

El brioche de facera y gambón, al cual hay que añadirle por recomendación el contenido de la cabeza de la gamba llevaba una parte del atún, la correspondiente a la cara, que no habíamos probado previamente y que nos encantó.

Cerramos los platos con los dados de atún con ajo blanco, probados por separado, primero atún, después ajo blanco y finamente combinados, muy buenos.

Para cerrar el día un postre que nos encantó, el jamón de la abuela (simula al jabón lagarto o jabón hecho en casa hace años) con su espuma de leche y su interior de chocolate blanco, un espectáculo.

Todos los platos los repetiríamos y tenemos que volver para probar más cosas pero es un sitio completamente...