Gretta — Restaurant in Berga

Jamás escribo ninguna opinión, pero nuestra experiencia aquí no pudo ser ni más breve ni más desagradable. No le pongo 0 estrellas porque no se puede. Éramos cuatro, llegamos y, como íbamos con perro, buscábamos mesa en la terraza, donde ya había otro perro, ya que el establecimiento los acepta en terraza. Al estar todas ocupadas le preguntamos al camarero que estaba sirviendo fuera. Nos mira con cara de "a ver qué queréis", señala con la mirada la terraza y dice de mala manera "no tengo mesas". A ver, ya vemos que no hay mesas en este preciso momento, se pregunta para que hagas una estimación, si sabes que alguna mesa está a punto de liberarse, ... vamos, lo que haría cualquier profesional del sector. Sin más, se va. Y unas personas muy amables de una mesa, que estaban contemplando la escena, nos dicen que acaban de pedir la cuenta y ya se van (qué le costaría al camarero haber dicho eso?). Se van inmediatamente y tomamos asiento. El camarero cuchichea con otro mientras nos mira mal. Al cabo de unos minutos se acerca a limpiar la mesa y nos dice de malos modos que sepamos que no nos va a servir hasta al menos cuarenta minutos más tarde, que nos lo dice por si nos queremos ir .... Se va, vuelve con los servicios y con el mismo rollo en plan desagradable y ya respondimos en plan de que cuál era el problema para que no nos fuesen a servir hasta 40 minutos después. Y nos dice (tan agradable como antes) que les han entrado 2 reservas grandes y que, claro, tienen prioridad. Vamos a ver, si eran reservas (y grandes) lo sabías con antelación; pero es que además no entró nadie, ni grupo, ni persona alguna, en todo el rato que estuvimos allí. Independiente del "pequeño detalle", se le dice que por qué no lo dice cuando preguntamos por la mesa; no responde a eso y dice que las reservas tienen prioridad, que son las normas del local. Insisto, no había entrado nadie. Obviamos el "pequeño detalle" mencionado pero, cansados de sus desprecios y malos modos, le decimos que haga el favor de tratarnos bien porque en ningún momento le hemos faltado y al fin y al cabo somos los clientes. Y tiene la desfachatez de decirnos (y lo repitió un par de veces más) que él es simpático y está siendo agradable ... Chico, pues no sé dónde te enseñaron modales y servicio al cliente; desde luego, no fue en la escuela de hostelería porque es evidente que no has asistido. No sé si el propietario del establecimiento está al corriente, o si sois familia (porque si no no entiendo que te permita trabajar allí), pero pongo en su conocimiento el tipo de "profesional" y el "servicio" que su empleado proporciona y le invito a que reflexione al respecto. Por si hay quien a estas alturas piense que fue una percepción subjetiva nuestra, comentar que las personas de la mesa de al lado, que también iban con perro, estaban completamente atónitas con lo que estaban presenciando y así nos lo comentaron cuando nos íbamos. Lógicamente, no nos íbamos a quedar a dejar nuestro dinero en un establecimiento donde nos han tratado...

Sábado de "Festa Major. La Patum de Berga". Comimos en el Rte. Gretta en la zona centro de Berga. Un comedor bien ambientado y tranquilo. Bastante familiar.

Para empezar, unas Patatas Bravas muy normalitas, nada del otro mundo. Ración para 2, muy correcta. Acompañadas de 3 salsas: mayonesa, allioli, mayonesa con salsa Perrins. A 7,50€, para lo que son ... no sé Rick, algo caras.

Con la idea de que las cocas fueran del tamaño que solemos pedir, a 14€ la coca pensamos que serían de un buen tamaño. Y no, no lo eran. Del tamaño un pelín más grande que un Pannini normal y corriente tipo supermercado. Los ingredientes otra vez nada del otro mundo. Nos pedimos la Coca Mediterránea y la Coca Patum. Si a la Mediterránea me dices que va a llevar anchoas de l'Escala y a la Patum me pones un bacon de 1era pues te digo que, quizás, si me apuras, te la pongo a 12€. Pero ... lo siento, unas cocas sin mucha gracia a ¡¡14€ cada una!! Como que no, no cuela, por mucho plato de pizarra que pongas.

Los cafés en vasos de cartón. Otra vez, servidos al precio de muy buen café, lo cual no fue el caso. No sé Rick ...

No repetiremos.

Nota después de la contestación a nuestra reseña:

Los precios que quedaron fotografiados en el ticket también estaban en la carta del restaurante. Después de La Patum dudamos mucho de que hayan cambiado la carta para poner los precios anteriores a la fiesta ¿Tienen cartas para el comedor interior del Rte. elaboradas solo para La Patum? No sé Rick ... Tan fácil y sencillo como comprobar si los precios de nuestro ticket cuadran con los precios de la carta a partir del 23/06/2025 😉.

Por cierto, no nos quejamos de la frescura de los ingredientes, faltaría más, imagínense que además del precio caro los ingredientes estuvieran en mal estado. Nos quejamos de que los ingredientes no eran nada del otro mundo (y las salsas no eran caseras, no nos engañen). Calidad/Precio = 2/10.

Por cierto ¿Qué sentido tiene que en el comedor interior del restaurante nos pongan vasos de cartón para el café por medidas de seguridad debido a la fiesta y sin embargo los vasos de agua que nos pusieron eran de vidrio? En el comedor interior. Lo siento, su explicación no es coherente. No cuela 😉

Que...

Jamás he escrito una reseña pero es que jamán antes me habían tratado tan mal en un restaurante. Nada más llegar preguntamos al camarero que estaba sirviendo fuera por una mesa en la terraza, ya que íbamos con perro. Nos señala la terraza con la mirada y nos dice de malas maneras que no tiene mesas, que eso ya lo sabíamos también tenemos ojos, pero lo lógico es que te diga pues tengo una mesa que está con los postres o lo que sea, vamos, lo que haría cualquier profesional que mira por el negocio. Se va el camarero y unos clientes de una mesa nos dice que ellos ya han pedido la cuenta y que se van por si queremos esperarnos. Nos sentamos y viene el camarero a limpiar la mesa cuando nos dice que no nos va a servir hasta mínimo dentro de 30 min. o que más bien van a ser 45 min. y que si nos queremos ir. Vuelve a venir y le preguntamos si mientras tanto no nos puede servir algo aunque sean las bebidas y nos dice que no y nos vuelve a soltar lo mismo y que le ha entrado 2 grupos grandes que tenían reserva (ahí no entró ni salió grupo, ni persona) y que no nos puede servir, que si queremos nos vayamos. 2 veces nos invitó a irnos y todo esto de la peor de las maneras. A lo que le preguntamos qué problema había y él ya empieza a ser aún más desagradable de lo que había sido anteriormente y que esas eran las normas. Nosotros evidentemente, le decimos que nos trate bien ya que en ningún momento le habíamos faltado al respeto, ni hablado mal y que los clientes éramos nosotros. Decidimos irnos, porque evidentemente no vamos a dejar el dinero en un sitio donde tratan así de mal a los clientes. Mientras nos íbamos el chico siguió increpando y mirando con desprecio, pero al volver al coche (que lo teníamos aparcado delante del establecimiento) siguió igual. En fin, que si con esto no fuera poco y aún alguien tiene dudas de lo que estamos diciendo, incluido el propietario, comparto fotografías donde se ve que el mismo camarero nos ha buscado por redes sociales y nos ha ido dejando mensajes, en los que él mismo reconoce que no nos quiso atender y sigue con toda una retahíla de insultos y desprecios, video chats, etc… dejando claro no solo el tipo de profesional sino la clase de...