Pizzería la Valentina — Restaurant in Cártama

Local: al ser nuevo, se nota que tanto la decoración como el local está impecable, con un decorado agradable a la vista que te invita entrar solo con verlo, una cosa a tener en cuenta es que todas las mesas y sillas son altas, por lo que personas con movilidad reducida tendrán dificultades para poder sentarse a las mesas, sin añadir el enorme escalón principal (no dispone de rampa), además tanto la mesa como algunas sillas se sentia algo inestable (al menos la que nos sentamos nosotros) servicio: el servicio fue correcto, nos tomaron las bebidas pronto y el tiempo de espera para la comida no fue muy largo, nos trataron con mucha amabilidad y respondieron a nuestras preguntas satisfactoriamente. Comida: Pedimos unas patatas turcas ,una pizza carbonara (sin champiñones) y una mexicana, el tamaño de la pizza es de 30cm los precios oscilan entre los 7,5 y 10€ de masa fina (muy fina) por lo general las pizzas tenían buen sabor, aunque por el tema de la masa fina, la pizza mexicana se deshacía y los parte del borde de la carbona se quemó (entiendo que esto puede ser algo puntual). Las patatas en principio estaba bien, un poco secas, pero estaba rico.

Conclusión: si te apetece pizza es una opción más en Cártama estación pero si vas en sillas de ruedas o con personas mayores que le cueste moverse deberán pedir a domicilio, tengo pendiente probar las hamburguesas y algún postre que tenían muy buena pinta, espero que esta crítica ayude al local a mejorar porque...

Hemos venido a cenar esta noche, ya que nos habían hablado muy bien del local. Pedimos una pizza para cada uno y como entrante, unas “Patatas Cuñado” (con la salsa aparte) al centro para compartir. Según los ingredientes que ponía en la carta, las patatas cuñado llevaban pollo, pull pork, salsa de yogurt, mozzarella y cheddar. Cuando nos las han servido, observamos que no han tenido en cuenta nuestra petición de poner la salsa aparte, y además, las patatas no tenían pollo troceado, sino que llevaban carne de kebab de pollo. Acto seguido, se lo comentamos a la camarera, que no tenía ni idea de los ingredientes de ninguno de los platos de carta, no sabemos si sería nueva o no. Esta nos dice que va a preguntarlo en cocina y no vuelve a decirnos nada, sino que se pone a cuchichear y a reírse con el resto de compañeras. Hemos tenido que llamarla varias veces para intentar solucionar este incidente, ya que en otras patatas de la carta SÍ que se especifica que llevan KEBAB DE POLLO y no pollo simplemente. En este momento también notamos una descoordinación entre los trabajadores, pues la camarera nos ha dicho que no había problema y que se obviaría el plato de la comanda, aunque posteriormente nos lo acabasen cobrando. Justifican esto diciendo que estas patatas siempre habían llevado kebab de pollo, sabiendo nosotros, por otros amigos, que las patatas llevaban pollo troceado. Todo se resume en una experiencia para nada recomendable. No...

Tras repetirles en reiteradas ocasiones que por favor bajaran un poco el aire acondicionado por problemas de salud (especificándolo) y no había la posibilidad de cambiarnos de mesa que fue lo primero que intentamos antes de molestar al personal, nos dicen que no van a subirlo porque supuestamente una mesa del fondo pidió que se bajara la temperatura (podrían haber puesto un punto medio porque repito, era por problemas de salud) Además, contestando de muy malas maneras. Sin duda no volveré a venir más aquí. P.D.: quizás no tendré la mejor ortografía pero si me vais a contestar esto tomaros las molestias de buscar en Google primero como se escriben...