Puntúo con un dos porque las discupas de la camarera y de la encargada les honran, pero he tenido la peor experiencia en un restaurante de mi vida. Haciendo honor a la verdad, allí no estaba quieto ningún trabajador, estaban laboriosos e incluso sobrepasados, pero se me ocurre que si no hay soporte u organización para atender a todas las mesas, se podrían cerrar algunas. La persona que nos tomó la comanda lo hizo erráticamente y preguntando en numerosas ocasiones lo que cada uno quería. Preguntó por pinganillo si había choto y después de decir que no había, nos dice que lo va a comprobar en cocina porque no le han contestado (?). Trajeron bebidas y no tardaron dos ensaladas de aguacate para compartir entre 4, ya que habíamos pedido segundos copiosos. Pedimos pan a todos los camareros que pasaron, ya que el comandero se le olvidó (lo pedimos). Estuvimos incluso bromeando por la bizarra situación, porque fuimos ignorados por toda la plantilla. Por fin conseguimos pan como a la quinta petición y haciendo aspamientos surreales con los brazos. Ya casi terminado el primer plato le dicen a mi marido que no hay choto. Consulta la carta y pide el conejo. El comandero le disuade de pedirlo, porque ya estamos con la comida avanzada y según él "el conejo tarda mucho porque está congelado". Congelados nos quedamos nosotros, sinceramente. Entonces, le pide carne a la brasa, su especialidad. Ahí había que llegar, por lo visto. Ya habiendo finalizado los primeros me comunican que no hay manitas de cerdo. Un poco tarde, pero consulto la carta y pido flamenquín de salmón. Me dice que perfecto. Cuando los otros 3 comensales se han comido la mitad del segundo vienen a comunicarme que tampoco hay flamenquín. Nuevamente un poco tarde, pero me ofrece choto (lo que pidió mi marido, pero no había). Perfecto, pero es que yo no quiero choto. Me ofrece carne a la brasa, su especialidad, pero no es lo mío. Comimos allí porque se suponían otras opciones. Me dio la impresión de que estaba en un gag de Martes y Trece o en una cámara oculta, porque me ofrecen la primera negativa a mi marido (choto), y ya llegados a este punto no quería que los demás me mirasen a mí comer, dado que ya estaban finalizando, por lo que rechazo ya el segundo para pedir postre. Comentar que los segundos de mi cuñado y mi marido sí eran carne y un plato vino reciente y muy bueno según comentó, pero el otro que eran varios cortes de cerdo, parecía que lo hubiesen calentado después de hacerlo, porque hasta las patatas estaban marrones. Bastante seco vaya. Lástima no haber hecho foto, pero es que en ese punto ya estábamos totalmente descuadrados. Total, que llega el momento postre y cruzamos los dedos. Cuando fui al baño vi un postre que parecía tiramisú casero y perguntamos para pedir dos. Nos dice que no hay Tiramisú. Le describimos lo que hemos visto para saber y él insiste en que son natillas con canela y tarta tres chocolates. Finalmente mi cuñado se levantó con él a llevarle hasta el susodicho postre a lo que dice " ah sí, tiramisú". Volvemos al gag de Martes y 13 y las empanadas de Móstoles. Alucinante. Vinieron a disculparse, pero ya teníamos un enfado llamativo como es normal, así que se hizo extraordianriamente incómoda la experiencia en sí. Nos invitaron a dos postres y dos cafés, y yo me fui con media ensalada de aguacate, sin segundo plato y buscando las cámaras ocultas. He de decir, como algo favorable, que las reseñas y las contestaciones del responsable nos han dado la vida en el viaje de retorno. ¿Cómo se puede contestar a las reseñas como lo hace este señor? En todo momento externalizando responsabilidades, pensando que otros quieren dañarle, respondiendo a los clientes con un "nosotros las cosas las hacemos muy bien", insultando y haciendo burla a varios comentarios, atribuyendo celos patológicos, cuando no, arremetiendo contra sus propios trabajadores (cocinera, camarera, comanderos, parrillero); no hay lectura de sobremesa que lo supere. En fin, crítica nula. Ánimo a los trabajadores al cargo.
RESPUESTA AL...
Read moreWe had high hopes for a good steak, as they had many speciality cuts of beef on the menu, however, we were extremely disappointed with the steak we had ordered. It was a local breed of cow, at the highest price point and was supposed to be incredible. We had to send it back as it was practically raw, far too fatty, and full of sinew and muscle. Furthermore, it came uncut and we had to attempt to hack it up with a blunt steak knife. The steak came with the soggiest fries we had ever seen, and the most random assortment of cut veggies ("salad"). The service was very poor as it took asking about four times for a single glass of wine after sending back a very warm, corked red wine. The waitress did her best to better the situation but the chefs clearly do not know how to cook a steak! Other reviews share similar sentiments but the restaurant's owner continues to refute the claims, I would seriously not recommend this establishment!!! The smallest silver lining: after expressing our concerns, a third of the price was deducted from the final bill, but it still was...
Read moreSitio nada recomendable, una pesadilla. Entramos sobre las 14:30 de la tarde pedimos mesa para dos, un chico super joven con el pelo rizado nos atendió muy amable y muy rapido nos dio una mesa , enseguida vino una chica nos colocó el mantel , después otra chica nos puso cubiertos y nos dejó las cartas. Al poco tiempo vino otro camarero muy joven TB y nos comando bebidas y comida ( 2 bebidas , un plato de migas ,chuletas de lechal y pan para dos ). Al poco tiempo nos traen las bebidas, hasta ahí todo correcto. A las 15:45 nos traen las migas y el chico nos dice que no le quedan chuletas de lechal que si lo queremos cambiar por otra cosa le decimos que si por secreto ibérico. Después de esperar una hora y cuarto me traen unas migas totalmente frías y me dicen que no le quedan chuletas de lechal, puede que haya gente no te lo voy a negar pero he visto que hay camareros suficientes lo que pasa es que entre los dos que atendían mi zona no hacían uno medio regular, lo que no se puede permitir es tener algo en la carta y que a la hora y cuarto te digan que no les queda , me demuestra que hay nula comunicación entre camareros y cocina y lo que menos se puede permitir es que después de esperar 1 hora y cuarto te traigan el plato frío, y ya sin comentar que somos dos a uno le traen su plato y el otro mira. A las 16:30 nos traen el secreto , y como ya me lo venía venir le digo al camarero te pedí pan , quieres que vaya a cogerlo yo a la barra y me dice que no que ya trabajará el por todos los demás camareros , vamos menospreciando a sus compañeros..... Pasan 5 minutos y el pan no viene, pasa un camarero le digo pan porfavor, si ahora mismo , el pan nunca vino , ya pasé y me comí el secreto sin pan pero lo mejor esque en la cuenta si te lo cobran. Este sitio es un desastre , los camareros no tienen nada de experiencia, les pides bebidas y te las traen a la media hora si esque te las traen porque el chico de la mesa de al lado mía le pidió una copa de ribera del Duero y se la trajo literal a la hora, y eso que el chico con toda la paciencia del mundo no se la pidió ni uno ni a dos si no a tres camareros y ni uno la trajo hasta que ya uno por fin por vergüenza después de una hora lo hizo. Otra mesa de al lado se fue sin comer los platos que le faltaban. En fin todo el mundo desesperado , es la primera vez que voy a un sitio y hay tanto desorden por todos lados asique si lee está reseña el director de este negocio que se ponga las pilas y empiece a gestionar su negocio o tenga a algún encargado que controle porque no es tan difícil que haya un orden , no había tanta gente para ese descontrol en todo. Contrata a profesionales cualificados porque estás perdiendo dinero hasta cuando van a cobrar a los clientes ya que si hay algo que no quedaba luego no lo borran y tican lo que en realidad se ha consumido , me paso en mi cuenta y en la de al lado de mi...
Read more