Restaurante Umea — Restaurant in Cieza

Estuve comiendo allí con mi familia recientemente y fue la peor experiencia la verdad. 1- Primero no dejaban juntar mesas. Familiares míos los encontré cenando allí y queríamos unirnos, por lo cual les pedí a los camareros permiso para juntar unas mesas. Después de idas y vueltas, de preguntar más de 10 veces a careros diferentes, los cuales supuestamente le iban a preguntar a la chica encargada. Al final nos dicen que no, porque sino otras personas no se podrían sentar y tendrían lío con las mesas. Lo concidere inaudito, porque yo siendo camarera he sido capas de llevar varias mesas por mi misma y sin problemas. Este establecimiento es pequeño como para poner una excusa de ese calibre y más cuando dices que más familia van a venir a comer ( más comensales para ellos) y no tendrán sitio, como si ellos no fueran personas, ni clientes. Muy desagradable la verdad. 2- La disputa también fue con una camarera y mi familiar. Que al ser pequeño el establecimiento, no dejaba espacio para pasar y después de la disputa por la mesa, ya esta estaba un poco "caliente". Por lo cual al chocar irremediablemente porque capas que esta (la camarera) no vio a mi familiar, la mira con desprecio. También sin pedir disculpas en el proceso. 3-Falta de higiene y Falta de respeto. Cuando mis familiares llegaron al baño después del mal trago con la señorita, dicho anteriormente. Se encontraron, qué en estos no había papel, por lo cual fueron a pedir. Pues resulta y acontece qué una de las camareras trae el papel higiénico y se los tira a los pies. Con muy mala intención y mucha falta de educación. 4-Para rematar, cuando pedimos la cuenta nos querían cobrar demás. Esto fue debido a que se habían equivocado al marcar el pedido, devolvimos una cosa que nos habían traído porque no la solicitamos. No querían reconocer su error, nos miraban mal y el trato, perdonen qué me repita HORRIBLE. 5-Cuando por último mi familia que se tuvo que quedar en otra mesa pidió la cuenta, no se las dieron. Se lo pidieron a los camareros muchas veces. Pero estos ya hacían oídos sordos. Como para no entrar en una disputa, porque ya estaban respondiendo mal, hablando de nosotros en nuestras caras y sobre todo viendo como tiraban cualquier cosa en la barra con rabia.( ejemplo las latas en donde ponen las cuentas)

Yo he sido camarera en diferentes sitios y este trato no vale para nada, ni nadie lo merece . Por lo cual, le daría un 0 de calificación pero desgraciadamente lo mínimo es 1.

Si planeas comer aquí, yo qué tu.... Me lo pienso 10 veces.

Muchas gracias y espero que mi crítica les ayude a elejir un mejor...

Decepcionante. Fuimos ayer a comer por Nochebuena, y fue un desastre.

Mi más sincera felicitación a los camareros y cocina por todo lo que tuvieron que aguantar, porque la culpa del servicio es única y exclusivamente del gerente, que no conoce los límites de su propio negocio, y desde luego, no sabe dejar de reservar mesas aún sabiendo que el número de camareros y personal que tiene contratado, no puede llegar a tanto.

Ayer fue un desastre, nos sentamos a las 14.50h y a las 17.15h nos tuvimos que ir, sin haber comido a penas, y habiendo cancelado muchos de los platos que habíamos pedido porque eran las 17h, teníamos hambre y estábamos hartos de esperar. La verdad es que todos los camareros tuvieron mucha paciencia con las continuas quejas de los clientes, aún no siendo su culpa lo que estaba pasando.

El problema aquí es que el gerente debe vivir bastante lejos de la realidad, y ve factible atender una barbaridad de mesas con 3 camareros, el día de Nochebuena, cuando habrían hecho falta por lo menos 5 o 6 para atendernos a todos los clientes adecuadamente. Por no hablar de la cantidad de personal que debía faltar también en cocina.

La comida la verdad es que está buenísima, ya había venido aquí otro día a cenar en verano, y el servicio cuando no hay demasiada gente es muy bueno.

Reitero mis felicitaciones a los camareros y el personal de cocina, porque todo lo de ayer no fue culpa suya, y le recuerdo al gerente que somos seres humanos, y llegamos hasta cierto punto, no damos más de sí. No podemos llegar a todas partes. Por favor, en vez de machacar a tres camareros hasta la saciedad, contrate unos pocos más si va a permitir que se reserven mesas hasta el tope, para que sus empleados no acaben saturados (que repito, son seres humanos) y los clientes podamos irnos habiendo comido, satisfechos, y tengamos ganas de volver.

Le va a costar mucho más dinero perder clientes por el mal servicio o que se vayan habiendo comido la mitad de lo que tenían pensado, que contratar dos o tres...

Hace algún tiempo tuvimos un problema con el servicio. Por mi intolerancia a la lactosa, pedí la carta de alérgenos para saber qué podía comer. Encontré una tapa de mi agrado y sin lactosa. Cuando me la sirvieron, le habían puesto una "crema decorativa" (con nata, y lactosa, lógicamente) sobre la tapa que contaminó el plato y no lo pude comer. Errores cometemos todos, por supuesto. Por eso, hoy (viernes, 17OCT25, se me ha ocurrido acudir otra vez, pero llevando más cuidado. He vuelto a pedir la carta de alérgenos, para no tener problema. He ido a lo seguro. Pero hoy la sorpresa venía por otro lado. Pedimos tres tostas (una por comensal): dos de salmón y una serrana. Mala decisión. Las tostas parecían servidas sobre una suela de zapato, en lugar de pan. Costaba horrores cortar un trozo. Con mucho esfuerzo, he conseguido comer la mitad. De las otras dos, una ha sido devuelta y la otra se ha quedado casi a tres cuartas partes sin comer. Lógicamente, no hemos pedido nada más. Pero la sorpresa es que al retirar la tosta, no han preguntado si servían otra... Se la han llevado, sin más. Hemos pedido la cuenta y sí, sorpresa mayúscula: la han cobrado completa. Han cerrado el círculo; no te la puedes comer, me la llevo y te la cobro. Sin problema. Difícil que aparezca por allí nuevamente. En fin... ¡Llevad cuidado si...