Restaurante El Fogón de Barbarroja — Restaurant in Ciudad Real

Miércoles de feria, 23:35. Llego con mi familia con la esperanza de cenar algo. Le pregunto a un chico, que más tarde me enteré que se llama Óscar, que si estamos a tiempo de cenar, y él, con una sonrisa nos dice que sin problemas. Nos sentamos y seguidamente nos atiende una chica, no se el nombre, pero tenía los brazos tatuados. Nos toma nota de la bebida y nos informa que la comida va a tardar un poquito porque ha entrado una comanda grande pero que vamos a poder cenar sin problemas (ole por informarnos y por su simpatía). Un ratito después, Óscar nos toma nota de la cena, que fueron dos molletes serranitos una ración de calamares y una hamburguesa fogón. He de decir, que soy malagueño y que los molletes estaban top top, sin menospreciar al calamar. Mensaje para el dueño: Señor barbarroja, llevo tres años viviendo en ciudad real, soy camarero desde hace 28 años y quiero que sepa que su personal es de lo mejor que he visto desde que vivo aqui, sobre todo Óscar, ese chaval es un crack, ya que le dimos todas las papeletas para haberle sacado una mala cara pero sólo estaba su sonrisa, educación y buen humor en su cara. Al personal así hay que cuidarlo, ya que gracias a él ha ganado 4 clientes y un buen...

Atencion desigual hacia los clientes. Fui sola a comer y al entrar me acerque a la barra para ver si tenían una mesa disponible especificando que era para comer. Me informaron que si y tomé asiento. Al cabo de unos minutos la chica tomó la orden y me trajo solo la bebida y al cabo de un rato el plato que había pedido. No hubo preparación de mi mesa como si lo hicieron con un grupo de personas detrás de mí, no hubo cesta de pan y después de comer pasaron varios minutos hasta que decidí levantarme de la mesa para pagar directamente en la barra porque nadie vino a preguntarme si quería tomar café o postre. Así que me levanté,...

Los camareros se han portado de maravilla, muy atentos y educados, pero el bar tenía más mesas de las que podían atender. Casi dos horas de espera y no por culpa del personal, que iba desbordado, sino por una mala organización. Lo peor, el dueño, sentado cómodamente en la barra viendo cómo su equipo se agobiaba sin mover un dedo para ayudar. Falta de respeto tanto hacia sus trabajadores como hacia los clientes. Nos fuimos sin cenar, con la bebida en la mesa esperando la cena y sin tapa.No pienso volver. Una pena, porque el trato del personal es excelente, pero la gestión deja...