Makaipa Tapas — Restaurant in Conil de la Frontera

Lo siento por la reseña pero hace mucho que no como tan mal. Hemos tenido la mala suerte de caer en este bar. Nos íbamos de Conil con grata experiencia en bares y restaurantes, íbamos apurados con un niño que tenía hambre, y era lo que había más cerca. Hemos visto que tenía un 4'5 y craso error confiar en eso. Resulta que es "carta sin gluten 100%". Supongo que fenomenal para gente con problemas con el gluten, pero para los que afortunadamente podemos comer de todo, un despropósito. Pero ya no es el "sin gluten". Creíamos que íbamos a lo seguro con: tomate aliñado, salmorejo, revuelto de bacalao y sandwich mixto. Pues todo mal. El tomate no estaba en su punto (estaba verde); el salmorejo, "bueno" (el peor que me he comido en un restaurante, pero bueno, aceptable); el bacalao del revuelto era testimonial y las patatas yo no sé si refritas o qué pero malísimas, como mustias... Aunque venían 4 patatas, pero malas - prácticamente todo huevo vaya; el sandwich literalmente una loncha de jamón york de sobre y una de queso, también de sobre, metidas dentro de pan tipo molde tostado - el niño (de 2 años, pero con criterio), ha sacado el interior y se lo ha comido - esto tiene perdón por ser pan sin gluten y hay lo que hay, pero pasarlo por la plancha y un poco más de relleno, mimo y mantequilla, cambiarían mucho el resultado. Además había 3-4 niños supongo que hijos o sobrinos de algún empleado, que sigue educación libre, y que estaban peleándose, corriendo y jugando de lado a lado de la sala. La chica que nos ha atendido simpática y todo correcto, es lo único a favor. Bueno y supongo que es a favor para cierta parte de la población lo del 100% sin gluten, pero puestos a mirar por minorías, también sería interesante tener un cambiador (para pañales) en el baño. Ah y barato tampoco (nos hemos gastado 32€, con los que normalmente se come bastante mejor. Y no somos ratas comiendo, nos da igual pagar lo que sea si comemos bien). En fin, para los religiosos del gluten o veganos (hay varias opciones en carta), supongo que bien y que de su fe vendrá la nota... Para los que no tenemos problemas, completamente desrecomendado. Animo al bar a que reviséis un poco las preparaciones porque hay bastante competencia...

En general bien, lo recomiendo. El concepto es bueno. Con buena atención. Un restaurante familiar. Pero creo que se equivocan en varios conceptos, por ejemplo, la ubicación, puesto que está situado en un barrio raro a las fueras de todo. No te pueden cobrar casi 7€ por un “tomate de la huerta” que no es más que medio no tomate de supermercado cortado en rodajas. Los tomates de la huerta no son así. Este es el punto que más me molestó del restaurante porque es algo básico en lo que no se puede fallar. No puedes vender una hamburguesa con “pan artesano” cuando tienes las cajas de la empresa que te suministra el pan dentro del local a la vista de la gente, por cierto, hay mucho mejores panes de hamburguesa en el mercado por el mismo precio que los de “leon the baker” que son bastantes secos. Pero muchísimo mejores. Probé también los calamares fritos, estaban ricos pero muy escasa la media ración. También probé varios sándwich y estaban ricos y cargados. Las patatas con queso también ricas y buena cantidad en la tapa. Probé varias tostas y estaban muy ricas. Los precios de las bebidas también me parecieron adecuados. Las croquetas son caseras pero también creo que muy muy pequeñas y poco jugosas (lo de que sean poco jugosas lo he notado es varios restaurantes sin gluten y no entiendo el por qué…. Porque la bechamel queda igual de jugosa con maicena que con harina). Tuvieron un detalle muy bueno conmigo por un problema con una ración, por eso en el servicio he puesto 5 estrellas. Además muy rápido todo en servir. Os deseo mucha suerte y espero que mejoréis algunos aspectos y que sigáis igual de bien donde lo estáis...

No entiendo las reseñas positivas de este lugar, o nosotros hemos acudido en un mal día o las reseñas no concuerdan con lo que realmente es. Mesas descuidadas tanto con clientes como vacías con todo por recoger. Una camarera muy jovencita ella sola para comandar, limpiar y servir. No te avisan de lo que va a tardar la comida en salir, han tardado 30 minutos en sacarme una tapa de ensaladilla, la cual solo tenía sabor a mayonesa de bote, estaba insípida. Un montadito que he pedido ha tardado 40 minutos el cual venía con el pan duro y la carne quemada, ni siquiera me lo he podido comer. La calor de dentro era insoportable. Cuidado con pedir aliños para ensaladas, no los tienen individuales, y te los sirven rellenándolos ellos en un cuenco donde lo tienen con la temperatura tan insoportable que hacía dentro. El cocinero solo daba vueltas en la cocina y para fuera. (La única que he visto con educación y simpatía era la mujer cocinera, que incluso ella salía para limpiar las mesas o cobrar a la gente, gente que tenían que entrar ellos a pagar la cuenta dentro) cuando he pedido la cuenta y le he dicho a la camarera que mi plato estaba incomible ni siquiera se ha disculpado (no es que fuera a pedirle que no me lo cobrara, pero si al menos una disculpa ya no solo por el plato si no por todo en general, porque no creo que una ensaladilla y un montadito sea para esperar hora y media) No...