Don Corbettone — Restaurant in Corbera de Llobregat

Dada la respuesta maleducada y FALSA que el dueño ha dado a mi pareja Juan Quilis (quien ha sido muy laxo con su crítica diciendo de que la comida era "buena" simplemente porque no era incomible), voy a dar rienda suelta a mi honesta opinión sobre la cena que tuvimos en este lugar, donde lo único bueno eran la decoración y el servicio de una chica muy maja.

Para empezar, llegamos ANTES de la hora no TARDE como dice el dueño en su respuesta y fuimos recibidos con la absurda norma de no servir las bebidas hasta que ordenas la comida. Todo un problema si tardan más de media hora en tomarte nota.

No puedes tomar solo una copa de vino, así que has pedir una botella entera. La carta tiene una buena oferta, pero una vez eliges "casualmente" ninguna de las botellas está disponible y te ofrece una que, dice, es similar a la de tu elección (la misma que observas pone en todas las mesas) por 23 euros y calidad mediocre por muy italiano que sea (servida abierta por cierto).

Pasemos a las pizzas... Muchos adoramos las masas finas, pero es que las de Don Corbettone pueden usarse como papel de calcar. Además, su redondez perfecta revela que no son caseras, sino posiblemente cortadas con un molde de uno de esos rollos de masa hecha que compras en el super.

Pedimos tres; la de barbacoa tenía una salsa dulce como la que te ponen con los rollitos de primavera, el conjunto era infumable, insípido.. la peor. La otra más que de prosciutto parecía de mojama sin sal.. será porque como dice el dueño el prosciutto venía de Italia, pero deducimos que lo hizo a lomos de un burro llegando irremediablemente caducado a nuestra mesa. La tercera de ajetes era pasable, más que nada por el contraste con las otras dos. El queso "mozzarella" de las tres eso sí, sería una ofensa imperdonable para cualquier italiano (no es de extrañar el comentario indignado que leí de un comensal de esa nacionalidad).

Pasemos a la ensalada de jamón de pato, que era un prado de lechuga con un par de lonchas perdidas en la selva y una lluvia monzónica de salsa dulce y cuatro piñones que había que buscar concienzudamente tipo "buscando a Wally".

Las esperanzas estaban puestas el plato "sugerencia"; la pasta rellena de trompetas de la muerte y salsa de fricandó... que resultó ser pasta rellena de queso fresco con minúsculas motas oscuras, que suponemos eran las famosas trompetas. Todo regado con salsa de fricandó y moixernons, cuyo sabor sí que cumplió con las expectativas, quizás porque esta parte era catalana como el dueño.

Tras toda la experiencia reflexioné sobre cómo es posible que este lugar tenga tan buenos comentarios, dando lugar a que incautos como nosotros cayésemos en la trampa. Mi conclusión es que cuatro son los motivos:

Hay muy pocos restaurantes en el pueblo. Muchos de los que comentan son amigos del dueño, que son servidos con más mimo que los desconocidos (como la mesa que teníamos al lado, a quien el dueño sirvió en persona y que llegando bastante más tarde que nosotros estaba comiendo cuando nosotros no teníamos ni las bebidas) El dueño tiene tan mala uva que ningún vecino quiere arriesgarse a cruzarse en su camino. Pena por dañar un negocio familiar ya que dice que su mujer está trabajando arduamente en la cocina cual mama italiana (en realidad descubrí que en la cocina trabajaba un jovencito solo que hacía lo que buenamente puede)

Este comentario será respondido con toda seguridad con agresividad por parte del dueño, ya que como he podido comprobar su modus operandi es enmascarar los numerosos defectos de su negocio difamando, insultando e incluso mintiendo sobre el comensal y las circunstnacias de su visita. Sin embargo, haciendo oídos sordos a su predecible reacción, mi objetivo es que todo futuro visitante acuda a este lugar con verdadero conocimiento de causa.

Y no señor, no necesitamos que nos sirva un gondolero veneciano (como hemos dicho en ambos comentarios, la chica que nos sirvió era encantadora) con que sirvan una comida mínimamente disfrutable y el dueño demuestre un poco de decencia u honestidad...

Horrible pizza, blend, soggy. Ingredients were poor quality.

I have been to this restaurant almost 2 years ago and I never dared to go back. I would never post a review if I wouldn't have been to the place that I'm doing the review also I believe this is to try to help and get better. If owners get offended, I totally understand, but as a customer I have all the rights to have my opinion about something even if my opinion is different than...

Decepcion por lo mal educado que es el dueño, pedimos un vino rosado y nos traen un tinto, se lo decimos y encima nos dice "si no sabeis pedir os lo tengo que cobrar" nos lo ha dicho en un tono alto y chulesco, con la botella erronea en mano para llevar y nos ha dejado en ridiculo delante del resto de clientes!! Lastima que hace 5 años que voy pero ya no mas, por cierto las respuestas que das a las malas reseñas no es de ser educado ni responsable y te falta mucha humildad!! TE VUELVO A REEDITAR: Parece un restaurante para tus amigos y conocidos y de ahi el trato al resto. Si pedimos un rosado La Pappesse y no teneis querremos otro rosado digo yo?? No eres capaz de disculparte a la cara en tu casa aun sabiendo el error, la camarera un encanto pobre pero durara poco como todas. Y si si hace años que vamos o te recuerdo en la carta anterior que tenias una casa en alquiler en la montaña?? De que lo se entonces?? Lo dicho no aceptas las criticas y por supuesto que tengo las espaldas muy bien cubiertas para...