Servicio pésimo, tardan mucho en atenderte. Pedimos botella de vino te la traen(venía con la recubrimiento quitado y el tapón medio salido) y te la ponen en la mesa sin abrírtela, después de media hora pedimos que la cambien y que traigan una cubitera porque beberse un vino a 30 grados como que no. El camarero nos dice que no hay cubiteras, le decimos que se la lleve y que ponga copas sueltas, pero al final viene y la trae con cubitera. Nos pregunta que si queremos copas, obviamente no me la voy a beber a morro. Nos traen para vino blanco catavinos. Bueno decimos ya está no pasa nada, puede pasar a cualquiera. Pedimos comida y nos la traen sin ningún cubierto ni plato, le decimos que faltan los platos y nos dice que eso se lo pidamos al compañero, se lo pedimos a otro compañero y nos dicen “un segundo”, me levanto y voy a la barra a pedirlo me dicen “un segundo” me vuelvo a sentar y a los 15 min vienen a la mesa, le tengo que decir que las sardinas llevaban 40 min en la mesa y que me las tenían que cambiar y por fin nos traen los cubiertos y podemos finalmente comer. (Por cierto pedimos viendo comida de otras mesas porque cuando pedimos la carta no nos la trajeron). En fin falta mucho personal y el personal aún siendo un chiringuito, que no me importaría que no fuera super profesional, en qué momento te ponen una botella de vino tal cual en la mesa y te preguntan que si quieres copas, en fin. Muy mal servicio, muy muy malo, no lo recomiendo la próxima vez como en el comercial o zona centro y después me vendría aquí a tomar una copa, pero...
Read moreLa playa del Buzo, porque yo siempre la he llamado así (ahora veo que se llama Playa de Santa Catalina), es una playa atípica y bastante particular, llegan de gente con sillas, neveras, estructuras mastodónticas que deberían pagar el IBI, señoras con sombrilla y jóvenes tatuados. Antaño, no hace demasiado, la playa constaba con los mismos chiringuitos pero de menor enjundia, si bien en los últimos tiempos se han modernizado y homogeneizado, perdiendo parte de su sabor pero ganando en calidad e higiene. La vida…
En fin, que nos paramos a comer, no había nada mejor que hacer, la playa estaba abarrotada ya que era sábado de agosto. Este chiringuito en cuestión tienen un curioso y poco eficiente sistema de turnos con una número como en la carnicería. La cosa es así, como que poco eficiente, pero algo es algo y mejor que el clásico “siéntese dónde pueda”. La comida, pues ahí siempre se come bien; se puede fumar, la bebida está fresca, el verano parece eterno y la vida maravillosa. Un detalle, hay que decirlo, que obliguen a comer con camiseta. “Obligatorio el uso de camisa en el salón…” En fin, un poco grandilocuente el mensaje, pero está bien. El siguiente paso, que no sé si lo verán mis ojos, es prohibir las camisetas sin mangas esas horrorosas. A ver, tampoco es cuestión de obligar a la gente a comer con camisa o con polo, pero mangas… Macho, unas mangas al menos.
En fin, que si vais por la playa, además de comprarle una Cruzcampo al del carro, tomaros una birra y una ensaladilla aquí… Y...
Read moreAwful. We waited outside for 20 minutes to be seen by the waiter. When I went to the bar, one of the waitresses asked me to go back to my table to be served. Waiting for another 5 minutes I ended up getting a waiter to come serve us. He was not particularly helpful, getting simple orders wrong. Toilets are filthy, smelly and doors don't lock, but that seems to be a trend in chiringuitos. The area is a show off of chalets and nice cars; this place is well below par in all that...
Read more