Casa Tere Gandía — Restaurant in Gandia

La comida muy bien. Le doy mala puntuación por 2 razones. La primera es porque no nos montaron la mesa donde reservamos ( dentro con el aire y nos dijeron que lo harían sin problema ya que estábamos en plena ola de calor..) La segunda porque son unos agonías metiendo prisas para pedir y tal.. 6 min después de sentarnos faltaba una persona por llegar ya nos estaban agobiando con que la cocina se satura y que hay que llegar a la hora que toca.. . Total que nos hacen pedir a correprisas y faltando una persona que estaba por llegar…

Luego se olvidan de la comanda y tardan 45 min en sacar la comida.. Luego la cuenta es un atraco a mano armada… Lo peor es..de que son unos agonías ya nos pasó hace unos meses y dijimos.. va, tendrían un mal día..vamos a darle otra oportunidad, ya que de verdad se come bien.. Pero no, ha vuelto a pasar…el camarero quemado echandonos la bronca retroalimentandose el mismo con sus argumentos.. y nosotros sin discutirle pidiendo disculpas ya que lo unico que queriamos era pasar un buen rato y estar agusto.. Luego ves el trato a las mesas de al lado que son los típicos clientes, y no tienen nada que ver, todo alfombra roja para ellos..por lo que nos dimos cuenta que si eres el tipico NO cliente te tratan como cual camarero quemado.. Y que quede claro que nosotros fuimos muy respetuosos desde un primer momento…ya que sabíamos que como nos pusiéramos algo pejigosos se iba a liar la cosa. Enfin, una pena, por el...

Encantador descubrimiento en Gandia (corrijo mi error que fui de fuera y creía que era en el Grau)

Comimos en Casa Tere y fue una experiencia que supera las expectativas. Aunque ofrecen un menú diario muy completo (4 entrantes, 4 tipos de arroces, bebida y postre por 25 €), nosotros optamos por comer a la carta.

Pedimos mejillones a la vinagreta, calamar a la plancha y un calamar entero fuera de carta, todo fresco y perfectamente cocinado. Como plato principal, un arroz del señoret sabrosísimo, con un punto perfecto y sin una sola cáscara. De postre, tarta de piñones y flan de queso casero. Y el toque final: un cremaet con miel, que nos dejó maravillados.

La cocina está abierta al comedor y se puede ver cómo trabajan, lo cual transmite confianza y autenticidad. El restaurante cuenta con dos salones: uno más pequeño y otro más amplio, que abren los fines de semana y a partir del 1 de julio por las noches. La decoración es cálida y con mucho gusto.

Todo el servicio lo llevan tres mujeres: Tere (la cocinera y dueña), una ayudante de cocina y una camarera que, con gran profesionalidad, atendió sola todo el comedor sin descuidar ninguna mesa. Un equipo pequeño pero lleno de alma.

Los baños están impecables y cuidados, lo que demuestra atención en cada detalle.

Casa Tere es un lugar donde se cocina con cariño y se atiende con respeto. Un tesoro en el Grau de Gandia....

La atención al cliente es buena, sin más. Podrían ser más amables aunque entiendo que habiendo solo una camarera para todo el restaurante, a penas le dé tiempo de saludarte. Ahora bien, a pesar de haber reservado tuvimos que esperar un rato (cosa que es normal y comprensible) y la camarera casi que nos obligó a pedir unos entrantes. Pedimos lo más sencillo(pan con alioli) ya que nuestra intención era no pedir, y nos señaló la carta indicando el precio. Nunca nos preguntó cuántas raciones ni nada. Y cuando nos dieron la cuenta vimos que nos cobraron dos raciones, que ni siquiera nos terminamos comiendo, porque repito, no queríamos entrantes. A la insistencia de los entrantes se le suma también la insistencia porque pidiéramos café junto al postre. Tuvimos que decir más de 3 veces que no queríamos. Parece que vayan a comisión. Entiendo que su trabajo es asegurar un buen servicio, pero se nota demasiado la insistencia porque consumas, y eso solo hace incómoda la situación y te hace sentir mal como cliente.

La comida es buena, mejorable. A la paella le faltaba tiempo. Calidad-precio un poco caro.

Para resumir, deberían dejar claro el precio real de los productos, así como mejorar la atención al cliente, centrandose en servir y no en vender los productos....